Santa Fe pudo palpar en vivo el mejor tenis del mundo
Una exhibición inolvidable
Desde la clínica que ofreció José Luis Clerc, pasando por los mini-duelos entre las promesas y los históricos de nuestra región, y con el plato fuerte entre David Nalbandian y Juan Ignacio Chela, la ciudad vivió un acontecimiento de primer nivel que tuvo una respuesta acorde del público.

Alejandro Galetto

La ciudad se debía un acontecimiento de estas características. Luego de que llegaran a Santa Fe los seleccionados nacionales de básquetbol y de rugby, además del TC 2000, quedaba vacante la posibilidad de vivir una muestra de tenis de primer nivel, usufructuando la cantidad y calidad de jugadores, que en la actualidad el país aporta al circuito internacional de la Asociación de Tenistas Profesionales.

Luego de varias idas y vueltas hasta concretar la exhibición tal cual se vivió ayer en el estadio de la Universidad Tecnológica Nacional, se contó con la presencia de los mejores en sus respectivos rubros: José Luis Clerc en la enseñanza (es director de la Academia del Parque Roca, en Buenos Aires) y Nalbandian y Chela en el duelo central (dos de los 25 tenistas más importantes del planeta).>

La clínica

Apenas pasadas las 10, "Batata" Clerc ingresó al impecable court montado en el estadio de la Tecnológica, en el cual lo esperaba una gran cantidad de chicos para recibir consejos de uno de los más grandes tenistas de la historia nacional. Con un carisma indescriptible y un buen humor interminable, el ex 4 del mundo se dispuso a enseñar, pero siempre dentro de un marco lúdico que hacía más sencillo y divertido el aprendizaje para los niños, que disfrutaban del encanto de Clerc y de los demás profes.

Los juegos didácticos estaban a la orden del día. Como el que utiliza José Luis para enseñar la correcta posición del servicio: el indio con arco y flecha, apuntando hacia arriba. O la metodología para lograr una volea consistente a través de una postura firme: en el momento del impacto, ni un empujón debe hacer mover al tenista.>

Bromas y sonrisas enmarcaron la disertación plena de docencia del ex jugador del elenco nacional de Copa Davis. Y todos quedaron enamorados de Clerc, que una y otra vez repetía lo contento que estaba de encontrarse nuevamente en nuestra ciudad.>

Bien santafesino

Concluida la escuela de Clerc, llegó el turno para los partidos de tenis. El primer turno fue para las promesas de nuestra región. En ese segmento del show, se enfrentaron tres duplas con partidos a un tie break. En primer término, el dúo conformado por Martín Gamarci y Mateo Galdón derrotó al binomio de Julián Mora e Ignacio Sastre. Luego, fue el turno de Federico Cavallero y Juan Obeid, quienes vencieron a Mora y Sastre y ganaron el derecho de disputar la final ante Gamarci y Galdón, a quienes vencieron para coronarse en el petit torneo.

Después llegó el turno de los históricos, y en ese encuentro se pudo volver a ver a Fernando Dalla Fontana en una cancha de tenis, formando pareja con Roberto Scarponi. Sus rivales fueron el profesor Carlos Schinner junto a Federico Cavallero, ya que Juan Carlos Rivarola prefirió no formar parte del mini-duelo. >

Tras esta exhibición, la gente empezó a tomar calor. Se venían los monstruos del tenis internacional.>

De menor a mayor

La gente ovacionó el ingreso de David y Juan Ignacio, que por primera vez desde que son profesionales visitaron Santa Fe. Uno a uno aplaudían los puntos obtenidos, que en un comienzo fueron muy tibios hasta que empezaron a calentarse los motores. Arrancó mejor Chela, pero ya en el cuarto game se niveló el juego y se empezó a armar un lindo partido. En definitiva, en un trámite muy peleado y con algunos puntos de buena factura, terminó ganando el unquillense por 6-4.

Este envión le dio un mejor comienzo al "gringo" cordobés, que rápidamente quebró y se fue arriba en el marcador. Pero con el apoyo de la gente, Chela volvió al partido, descontó la ruptura y puso en problemas a su rival. Sin embargo, David se quedó con el servicio de Juan en el séptimo juego y ya todo se definió.>

Más allá de todo esto, lo más importante era otra cosa, y estaba plenamente satisfecho: el espectáculo, el show y el mejor tenis, que nuestra ciudad pudo disfrutar a pleno. Ojalá se repita.>