Una falla grosera en defensa y mucha impotencia a la hora de atacar...
Lo probó Colón: "Errar es humano... y decisivo"

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En un partido parejo, un penal producto de la indecisión para rechazar una pelota y un gol en contra de Chitzoff le dieron a Argentinos Juniors una ventaja decisiva en el primer tiempo. Descontó Cardetti cuando no había tiempo para nada. Colón, pese a los cambios ofensivos de Astrada, fue impotente en el segundo tiempo y no supo cómo atacar a Argentinos.

Enrique Cruz (h)(Enviado Especial a Buenos Aires)

No se puede buscar la excusa de la cancha chica, porque eso condiciona, pero no fue el motivo de la derrota. Colón perdió porque no jugó bien y porque cometió errores imperdonables. Puntualmente, el de Diego Chitzoff, involuntario (obvio), pero determinante para un partido parejo. Porque de eso se trataba, de un partido cerrado, en el que Colón perdía por aquel penal de Tombolini a Hauche que Ortigoza transformó en gol, pero, de a poco, se arrimaba con cierto peligro al arco de Navarro. Con pocas ideas, dependiendo de Grisales y de Gandín (otra vez estrelló un remate de tiro libre en el travesaño), aunque con toda la sensación a flor de piel de que no era difícil remontar el 0-1. Pero se equivocó feo Chitzoff. Cometió el error que no puede cometer un defensor: confiarse de su compañero. Es la primera enseñanza que se le da a un defensor. "Vos tenés que desconfiar del compañero", le dicen los técnicos. Y es natural que así sea, porque resulta preferible rechazar la pelota a cualquier parte, generando una salida para el contrario, que intentar "asegurarla" como lo quiso hacer Chitzoff, "adivinando" en qué lugar se encontraba Tombolini, y metiéndola adentro de su propio arco.

Ya el 0-2 traía consigo una complicación extrema. Y reaccionó Astrada. Primero, lo metió al venezolano González, a quien daría la impresión de que la adaptación al medio para mostrar todas sus cualidades le llevará tiempo, en lugar de un apático Capurro. La primera lectura que hizo el técnico fue la de tratar de poner a alguien que se asociara a Grisales con más claridad para manejar la pelota Y, después, sí, el "Jefe" tiró a la cancha todo lo que le quedaba en el banco: Cardetti y Quinteros adentro, tres puntas (con Gandín) y otros tres (Romero, Grisales y el "Maestrico") para crear. Y entonces vino el tiempo de la impotencia, apenas alterada con algunos remates de "Totono", otra vez el mejor, y el golazo de Cardetti.>

Planteos y estrategias esperadas

Es una gran verdad que en el fútbol terminan definiendo las individualidades. Se pueden plantear tácticas y estrategias, pero luego hay situaciones particulares que son las que inclinan la balanza. Por ejemplo, Colón se preocupó naturalmente por los casi 2 metros de Delorte, para que no cabeceara con tranquilidad, pero terminó complicándole la noche la cabeza de Chitzoff. Y después, una jugada embarullada adentro del área culminó en un penal de Tombolini a Hauche (no fue último recurso como la falta que el propio Tombo cometió en Tigre y que no fue sancionada, porque había dos o tres jugadores de Colón que cerraban a sus espaldas), que Ortigoza luego transformó en gol.

¿Cómo planteó Argentinos al partido? Muy similar en lo táctico con respecto a Colón. Con dos líneas de cuatro y metiendo a sus jugadores más claros por los laterales. Ahí, el duelo también se repartió, porque Pereira se lo ganó al "Rulo" Romero, pero "Totono" fue más que Cabrera y lo preocupó demasiado.>

Naturalmente, Argentinos buscaba abrir la cancha y meterle el centro de Delorte. ¿Qué hacían los defensores de Colón? Trataban de desacomodarlo para que no cabeceara con facilidad. Es la única manera que tienen hombres como Garcé o Merlo, que miden 20 centímetros menos que el grandote, para neutralizarlo. Pero el problema no estaba en el poderío aéreo de Delorte, sino en los errores defensivos que cometían los propios jugadores de Colón, que llevaron a que el partido tuviese un exagerado 2 a 0 a favor del local cuando, en el trámite, prácticamente no había diferencias.>

La "Totono-dependencia"

Con la ausencia de un jugador muy claro y vertical como Centurión y la de uno que empuja como Falcón, quedó en evidencia la notoria dependencia que tiene Colón de Grisales. Que no está mal, si se observa el buen momento del colombiano, pero que, en partidos como el de anoche, termina siendo muy poco y contraproducente.

Es decir, cualquiera que ve a Colón y a "Totono" diría: "Tírensela a Grisales y que él juegue". Eso no está mal. Pero, si enfrente hay un equipo que, gracias a la ventaja de dos goles a su favor, se repliega, mete las dos líneas de cuatro en su propio terreno y se aprovecha de las reducidas dimensiones de la cancha, esa estrategia de buscarlo indefectiblemente a Grisales se termina transformando en contraproducente. O, en todo caso, en un argumento escaso para sostener el deseo de cambiar la historia de un partido.>

¿Qué hacía "Totono"? Las pedía a todas, recibía relativamente descubierto, pero no tenía con quién jugar o a quién habilitar. Había pocos espacios y el único que mostraba ímpetu y "agresividad" era Gandín. Ya Romero se había caído definitivamente, "Teté" González apenas podía transformarse en descarga, el venezolano no aportaba demasiado y tanto Quinteros como Cardetti quedaron atrapados en los pocos espacios y la cantidad de hombres que Argentinos dispuso para defenderse en esa parte complementaria.>

Impotencia absoluta

Colón terminó jugando peor el segundo tiempo, con terreno y seis hombres para atacar, que el primero. Y vaya paradoja: en el primer tiempo, el equipo perdía 2 a 0. Y al segundo período lo "ganó" 1 a 0. Pero en el balance futbolístico, esa parte final deja muchas cuestiones para la crítica. Por ejemplo, el hecho de haber entrado tan acentuadamente en el terreno de la impotencia absoluta a la hora de atacar. Es cierto que Argentinos se plantó con ocho jugadores (nueve, contando al arquero) para defender; sin embargo, también es una gran verdad que Colón no supo qué hacer con la pelota. La movió de un costado al otro, pero no fue punzante. Faltó mayor precisión en el toque corto. Cuando la hubo, se generó algún tiro libre en la puerta del área. No obstante, después, la única manera en que Colón llegó a inquietar a Navarro fue con los "sablazos" de Grisales o este remate espectacular de Cardetti, que se transformó en el descuento que le puso un poco más de realismo al resultado final.

Se extrañan

Lo mejor que tiene Colón es el mediocampo. De eso, al menos para quien esto escribe, no hay dudas. Y ayer, a Colón le faltaron dos de sus titulares (Falcón y Centurión). Y se notó. No porque Capurro y Romero no estén a la altura de las circunstancias. Pero sí porque los dos ex Vélez habían tenido un buen arranque de torneo, sumándose a la trascendencia futbolística y temperamental que tiene "Totono" a la hora de manejar la pelota. Conclusión: sin la claridad y habilidad de Centurión, ni la enorme incidencia para recuperar la pelota y empujar al equipo que muestra siempre Falcón, a Colón se le hace más complicado todo.

Que quede claro: Capurro y el "Rulo" Romero, sus reemplazantes, hoy están un escalón por debajo de Falcón y Centurión. Y es porque éstos muestran aptitudes futbolísticas superiores a las de quienes tuvieron la oportunidad para reemplazarlos. Pero no debe ser observado como una crítica para Capurro y Romero, sino como el natural elogio -por una cuestión de buen rendimiento- para los dos que ayer no estuvieron y se sintieron. Como tampoco el "Maestrico" González pudo salirse del molde de la mediocridad con la que Colón jugó el segundo tiempo de anoche.>

Argentinos Jrs. 2Colón 1

Cancha: Argentinos Juniors.

Árbitro: Sergio Pezzota.

Argentinos Juniors: Navarro; Barzola, Scotti, Caruzzo y Sabia; Cabrera, Battión, Ortigoza y Pereira; Delorte y Hauche. A.S.: Carrera. Estuvieron en el banco: Fleitas, Mercier y Niell. D.T.: Roberto Antelo.

Colón: Tombolini; Chitzoff, Garcé, Merlo y Rivarola; Romero, Esteban González, Capurro y Grisales; Enría y Gandín. A.S.: Blásquez. Estuvieron en el banco: Píccoli, Jerez e Iriarte. D.T.: Leonardo Astrada.

Goles en el primer tiempo: a los 12 min. Ortigoza (AJ) de penal y a los 25 min. Chitzoff (C) en contra de su propio arco.

Gol en el segundo tiempo: a los 48 min. Cardetti (C).

Cambios: en el segundo tiempo, al comenzar, César González (C) por Capurro; a los 12 min. Quinteros (C) y Cardetti (C) por Chitzoff y Enría; a los 23 min. Abán (AJ) por Delorte; a los 32 min. Peñalba (AJ) por Battión y a los 35 min. Escudero (AJ) por Pereira.

Amonestados en Colón: Garcé, Merlo, Capurro y Enría.

La tarde-noche de los D.T.

Una tarde-noche muy particular se vivió ayer en La Paternal. Es que mientras en el banco de suplentes estaba Roberto Antelo dirigiendo al equipo, en la platea se observaba la inconfundible presencia de "Pipo" Gorosito, técnico entrante, que hasta vio el partido de reserva, y después del partido sorprendió verlo a un emocionado Ricardo Caruso Lombardi, el técnico renunciante.

"El regalo para mí es haberle dejado al club un equipo competitivo y hacer una experiencia hermosa en Primera División acompañado por jugadores no tan conocidos, igual que yo", destacó Caruso Lombardi.

Para ponerle un mejor cierre a su ciclo (Néstor Gorosito asumirá a las 16), el locuaz Caruso repartió elogios y agradecimientos, además de prometer su regreso para más adelante.

"La gente ahora conoce a (Roberto) Battión y (Alvaro) Pereira, y vio un poquito de (Gabriel) Peñalba, de (Sergio) Escudero. Yo traje nueve jugadores y falta aparecer un par más todavía, pero Gorosito tenía razón cuando dijo que tenía buena materia prima para desarrollar su tarea".

Sobre su intempestivo alejamiento dijo que "acá en Argentina están acostumbrados a que a los técnicos se los echa y no a que se van, por eso cuando uno deja el puesto por su propia decisión suena tan raro. Me voy porque la cabeza me pide un descanso. Llevo quince años dirigiendo y no tuve un respiro importante. Mi problema es personal, estoy bajoneado, así no puedo seguir", argumentó.

"Lamento que se dé justo ahora que estoy en Primera División, pero a su vez no soy una persona que se arrepiente de lo que hace. Por eso me voy muy contento con el plantel que le dejo a Pipo, con la gente, con los dirigentes y con Diego (Maradona, quien lo recomendó)", finalizó, aunque todo el mundo del fútbol tiene el derecho a pensar que algo sucedió, más allá de los problemas anímicos y de salud que argumentó el particular Caruso.

Un año después.

Martín Cardetti marcó un golazo en la única ocasión que tuvo para mostrar sus aptitudes. Y lo hizo después de un año de no marcar en la Argentina. El último gol lo había hecho el 13 de agosto del año pasado, cuando señaló uno de los tantos de Gimnasia en la victoria ante Quilmes, por 3 a 2. Claro que después se fue al Deportivo Cali y allí sí convirtió varios goles. "Me voy enojado por el resultado, porque merecimos algo más. Nos resultó incómodo jugar en una cancha tan chica", dijo el delantero sabalero, que clavó un remate espectacular en el ángulo superior derecho de Navarro.

Empató la reserva.

El equipo de "Carucha" Corti igualó en dos goles con su similar de Argentinos en el encuentro preliminar. Los tantos rojinegros fueron marcados por Troncoso y Chena (muy buena definición). El equipo alistó a Díaz; Quilez, Retamoso, Mansilla y Navarro; Miranda, Alfredo Ramírez, Mansilla y Acosta; Troncoso y Chena. En el banco estuvieron Bailo, Lazzaroni, F. Sánchez, Aguirre y Ordinas.