El culto a las diosas Mia y Ana
BuliMIA y ANorexiA. Son dos enfermedades cada vez más extendidas en todo el mundo. ¿Quién puede pensar en promoverlas? Sin embargo, chicos y chicas que padecen estos trastornos de la alimentación -a los que llaman cariñosamente MIA (bulimia) y ANA (anorexia)- encuentran en Internet el espacio ideal para defender lo que consideran un "estilo de vida". Para ellos no son patologías, sino "amigas", "metas", "ideales de vida" (¿o de muerte?), "diosas" por las cuales vale la pena inmolarse. textos de Agustina Mai.

Desde hace más de una década dos enfermedades han tomado protagonismo en nuestra sociedad: la bulimia y la anorexia. Se tratan de dos trastornos de la alimentación: el primero se caracteriza por ingerir grandes cantidades de alimentos -atracones- que luego son evacuados del organismo -ya sea provocándose el vómito o a través de laxantes y diuréticos-, mientras que el segundo consiste en ingerir la menor cantidad de alimentos, llegando en algunos casos a varios días de ayuno.

Hasta aquí nada nuevo bajo el sol. Pero ¿sabía que existen páginas web que promueven estas dos enfermedades? A estos sitios se los denomina "pro ana" -cuando defienden la anorexia nerviosa- y "pro mia" -cuando alzan sus banderas por la "causa" de la bulimia-.

Para tener una idea de la difusión de estas páginas en Internet, basta con escribir pro ana o pro mia en cualquier buscador. El resultado es increíble: casi tres millones de páginas web en español se definen pro ana, mientras que las pro mia superan los dos millones.

El origen de estos sitios

"Los primeros sitios web pro ana y pro mia se detectaron a fines de la década del '90, sobre todo en Europa y en Estados Unidos", aseguró Marcelo Bregua, Psicólogo Clínico, Coordinador General de la Asociación de Lucha contra la Bulimia y la Anorexia (Aluba), sede central Buenos Aires. "Los primeros sitios fueron en inglés -continuó Bregua-; luego mutaron a extensiones en español y así aparecieron páginas .es y .ar".

Quienes frecuentan estas páginas buscan "ayuda" para poder bajar de peso, afrontar las etapas más duras de la enfermedad (el tercer día de ayuno es uno de los más difíciles de soportar) y compartir "tips" (trucos o consejos) para perder cada vez más kilos. "Las personas se reúnen en estos sitios, en los cuales, lamentablemente, comparten elementos negativos. Por ejemplo cómo engañar al médico en una entrevista o a los papás en su casa", destacó el Coordinador General de Aluba.

Es muy difícil saber quiénes crean y mantienen estos sitios porque, como explica Bregua, "no son páginas .com ni .net, sino que generalmente son blogs o espacios abiertos, donde se utiliza un `nick' (sobrenombre o apodo) para ingresar. Muchas veces el moderador -quien `abre' este sitio- utiliza `nicks' como `princesa', `alma' o `mariposa', es decir sujetos etéreos y alados. Esto indicaría que son personas que están padeciendo anorexia o bulimia nerviosa y que sienten la necesidad de compartirlo con otros que estén pasando por lo mismo".

Qué ofrecen estas páginas

La mayoría de estos sitios presenta "tips", que consisten en consejos o trucos, como por ejemplo: "Ayuna durante 28 días, el músculo perderá cuerpo y no tendrás que preocuparte más por el peso", "Si eres mia, lava tus dientes con bicarbonato después de vomitar para protegerlos", "Dale la comida a tu perro", "Maquillate para que no te noten las ojeras y la palidez", "Cuando estés comiendo con más gente prueba el truco de la taza opaca: aparenta que estás comiendo y escupe la comida en la taza cuando aparentes estar bebiendo". Bregua advierte que estos tips son "tomados como una verdad dogmática cuando, en realidad, son verdades a medias que ponen en riesgo la vida".

Otra sección infaltable es la de "Thinspiration" (conjunción de las palabras "thin" -flaco- e inspiración). Allí uno puede ver fotos de personalidades super flacas, como Angelina Jolie, la cantante Beyonce o la modelo Kate Moss. A veces, las fotos son retocadas digitalmente para acentuar las señales de delgadez extrema como las costillas, el esternón, los huesos de la cara, codos y rodillas sobresalientes en brazos y piernas escuálidos.

Además, en estos sitios se pueden dejar comentarios. En www.pandeblog.net se puede leer un mensaje de Adriana que dice: "Ayúdenme: quiero vomitar hasta morir. Morir, pero flaca. Quiero ser bulímica y que nadie se dé cuenta. He vomitado como 18 veces en 3 días. Los amo".

Tablas con las calorías de diferentes alimentos, "carreras de kilos" (competencias en las que intentan bajar la mayor cantidad de kilos en menos días), el "self injury" (daños corporales que se autoinfligen como castigo por haber defraudado a Ana o a Mia) y diccionarios que definen términos relacionados a estos trastornos son otras de las secciones que forman parte de estos sitios web.

Así, a través de estos foros, los/as jóvenes crean una comunidad virtual en la que intercambian experiencias, miedos, dudas, consejos, etc. A veces, también se proponen encuentros cara a cara y para reconocerse las anoréxicas usan una pulsera roja con bolitas, y las bulímicas, la misma pulsera, pero color violeta.

¿Un estilo de vida?

Las personas que padecen de anorexia o bulimia nerviosa -y en algunos casos de las dos enfermedades simultáneamente- no se refieren a estos trastornos en términos de enfermedades, sino como un "estilo de vida", por lo que es común ver comentarios en contra de quienes se oponen a la bulimia y la anorexia: "Todos son unos ridículos esto es para q las chikas y chikos se vean excelentemente bien y yo no creo ke sea una enfermedad por q no te controla: tu la controlas a ella y una puede parar si asi se lo propone. ustedes creen q es muy fácil ser anoréxica y bulímica, pero lo q no saben esk la belleza cuesta y mucho!!!!!!!", "ojala ke la gente ke no entiende este estilo de vida no se meta a opinar", "creo ke ser anoréxica es un estilo y una forma de vida y hay ke respetarlo".

Culto a dos diosas

Navegando por cualquier sitio pro ana y pro mia se advierten varios términos vinculados a la religión, como "credo", "creencias", "oración", "diosa Ana", "altar a la diosa Mia". En este sentido, Bregua reflexiona: "¿Lo podemos comparar con un fanatismo religioso? Claro que sí. Es como el culto a la diosa Ana y a la diosa Mia. Es como inmolarse por una causa de fe: `Yo no voy a ser obeso. Voy a morir en el intento por adelgazar'. Esto nos estaría explicando el tipo de estructura de personalidad que tiene esta personita". Y remarca: "Este fanatismo, este culto a la diosas Ana y Mia tiene consecuencias. Nosotros les preguntamos a algunas jóvenes si cuando una persona que solía conectarse al chat o por medio de la página web ya no lo hace, sospechan que puede haber muerto. Y lo que responden es terrible: `Sí. Murió, pero no es gorda'".

Se trata de personas enfermas y que sufren por serlo. Como señala el psicoanalista: "En estos sitios se ven fotos que hablan mucho más que mil palabras. Hay una imagen de una joven, vestida de princesa o hada madrina, que está sufriendo, esperando el tren en el medio de las vías. Otra es de un jovencito, con una línea de puntos en la muñeca, que dice corte aquí".

Algunas de las frases que uno puede encontrar en estos sitios nos dan la pauta de que realmente se trata de enfermedades y no de un "estilo de vida" como afirman las personas bulímicas y/o anoréxicas: "morir... nuestro deseo", "cada kilo k pierdo es un sueño logrado", "cada centímetro k se va es un pecado menos", "ser perfecta es mi meta", "mejor muerta k gorda", "ana y mia para mi tienen un gran sueño".

En tanto, el "Credo Ana" reza: "Creo que soy la persona más rastrera, inútil y despreciable que haya existido jamás en la tierra y que soy absolutamente indigna del tiempo o la atención de nadie. Creo que quienes me digan algo distinto son idiotas; si pudieran verme como soy realmente, me odiarían tanto como yo lo hago. (...) Creo en la perfección y lucho por obtenerla. Creo en las lista de calorías como palabra suprema. Creo en las básculas como indicador de mis fracasos y éxitos diarios. Creo en la pérdida de peso, el remordimiento por los pecados, la negación del cuerpo, y una eterna vida de ayuno. Amén".

Por su parte, quienes prefieren rezarle a la diosa Mía repiten: "El baño es mi confesionario sagrado. Me arrodillaré ante la taza del baño y haré penitencia por mis pecados. (...) Al jalar la cadena lavaré estos pecados. Me confesaré todos lo días, sino lo hago, habrá un acto de castigo. Cortaré o castigaré mi cuerpo. (...) Seré perfecta. Amén".

¿De quién es la culpa?

"Sinceramente el ser ana o mia es un 'estilo d vida'. Hay muchas cosas k nos influyen para ser anorexikas o bulímicas. A veces se preguntan el porke existe esa 'enfermedad' como muchas personas la llaman. es muy simple. solo vean a la sociedad. todo lo k tenga k ver con felicidad esta relacionado con ser flaka. ¿cuándo han visto una gorda en un anuncio d ropa, o de celulares?. siempre ponen una flaka!! es por eso k la felicidad se relaciona con la delgadez". Esto es lo que opinan la mayoría de las personas que padecen anorexia y/o bulimia nerviosa: la culpa es de la sociedad, de la publicidad, de las modelos.

En este sentido, Marcelo Bregua plantea este interrogante: "La publicidad, la moda, estos sitios web... ¿son factores que predisponen para una enfermedad?". La respuesta es clara y contundente: "No", asegura el coordinador general de Aluba, al tiempo que se explaya: "Son factores que pueden ser de mantenimiento o quizás precipitantes, pero la persona que, tras ver un programa de televisión o una publicidad, leer el periódico o navegar por Internet, inicia algún tipo de sintomatología es porque ya contaba con una predisposición para hacerlo".

Es decir, uno no se vuelve bulímico y/o anoréxico sólo porque en las publicidades se muestren chicas y chicos flacos y bonitos, ni porque la mayoría de las celebridades lo sea. Sin embargo, Bregua advierte: "Sí puede ser un factor precipitante, lo que se llama el `gatillo de la enfermedad' o un factor de mantenimiento. Cuando alguien se empieza a recuperar, si consume estas páginas puede volver a convencerse de que lo que estaba haciendo estaba bien. Pero tiene que haber un factor de predisposición que puede ser: la herencia genética, la herencia aprendida, la historia social de cada personita, dificultades en los procesos de separación-individuación, situaciones de crisis vitales. Todo ese cúmulo de eventos recibe el nombre de trastorno multi-causal".

Otro uso de las tecnologías

"Desde hace ya más de 22 años, estudiamos los trastornos de la alimentación y sabemos de la necesidad de los que padecen estas enfermedades de comunicarse con un grupo; por eso nuestro tratamiento es grupal", comenta Marcelo Bregua.

El psicoanalista no condena a las tecnologías porque considera que "las herramientas que da Internet también se pueden usar para un correcto tratamiento". Y ejemplifica de esta manera: "En Aluba trabajamos en un tiempo horario muy corto: quizás la persona viene una hora y media dos veces por semana. Entonces recurrimos a otros medios: esta semana fulanito va a llamar a este jovencito/a, le va a mandar un mensaje de texto o un mail, o va a chatear- como si fuera una moderador. Es posible utilizar estas herramientas para la salud. En lugar de pasarse recetas y tips para la enfermedad, también se pueden pasar herramientas para una vida mejor".

Otro caso que nos cuenta Bregua es el de un chico anoréxico que, cuando empezó su tratamiento en Aluba, "puso su propia página web como un sitio de alegría en el que contaba su experiencia de recuperación". Asimismo este joven se puso en contacto vía chat con chicos/as que había conocido en los sitios pro ana y pro mia y convenció a una adolescente para que fuera a Aluba. Hoy están realizando el tratamiento juntos.

¿Qué hacer?

Algunas páginas pro ana y pro mia cuya dirección es ".es" (correspondiente a España) han sido clausuradas. Como explica Bregua: "Nuestros colegas de Aluba España han hablado con el ombudsman de Barcelona, quien cuenta con una legislación y se puso en contacto con los proveedores de Internet más importantes. Entonces, por la jurisprudencia de ese lugar, esas páginas no pueden estar más en sitios ".es". Pero, lógicamente, mutan a sitios ".ur", ".ar", etc. porque encuentran un lugar donde la legislación es inexistente o flexible en el área de Internet".

¿Qué hacer frente a esta situación? Bregua responde: "Sería lindo que el gobierno o alguna entidad se comunicara con los creadores de Google, Yahoo, Hotmail, etc. para proponerles que cuando uno ingrese a una página pro ana o pro mia, exista un link que diga: 'Ud. está entrando a un sitio peligroso. Puede buscar información correcta acerca de estos trastornos en tal otra página'. Es decir, generar un espacio donde la persona encuentre si esto es verdad o no. Sabemos que el fanatismo les va a hacer creer que es verdad, pero si nosotros insistimos, con paciencia, prudencia y, sobretodo, entendiendo lo que sufren estas personas, vamos a lograr que estos sitios terminen desapareciendo".

Cómo detectarla las señales

Las señales más claras de la bulimia y la anorexia nerviosa se descubren a través del rechazo a mantener el peso corporal por edad y talla, lo que ocasiona una pérdida importante de peso.

Dónde acudir

Aluba es una asociación civil de bien público y sin fines de lucro -con más de 20 años de experiencia-, compuesta por un grupo de profesionales especializado en la prevención y tratamiento de las patologías de los trastornos alimentarios.

Se pueden realizar consultas llamando al 0800-22-25822 o en la sede de la ciudad de Paraná (La Paz 361), tel: (0343) - 4223873. Más información en www.aluba.org.

El tratamiento

El tratamiento para la anorexia nerviosa y la bulimia debe contemplar un abordaje "integral" del paciente, teniendo en cuenta los aspectos psicológicos, psiquiátricos y clínicos, sin perder nunca de vista al paciente, como persona integrada en un contexto social determinado.

DIARIO DE UNA ANORÉXICA

"Nadie dijo que ser una princesa fuera fácil" (*)

Ana y Mia son caminos por los cuales se llega a la perfección. Ser Ana o Mia significa querer la perfección y amar el viaje hacia ella. La perfección es física, mental y espiritual. Queremos vernos preciosas, queremos que al vernos en el espejo y decir "soy una princesa", sintamos que es verdad. Tenemos sueños, y no es fácil cumplirlos cuando la sociedad cree en estereotipos que nos orillan a tomar este camino, para ser aceptadas por la sociedad y por nosotras mismas. No es nuestra culpa, es de la sociedad. La gente dice que ni el peso ni la complexión importan, pero jamás lo pone en práctica. Nosotras somos personas de voluntad, que van a donde sea necesario por su felicidad. Las páginas pro-ana y pro-mia, así como los grupos, no son pro-enfermedad, ni pro-muerte. Simplemente son pro-perfection. Queremos sentirnos orgullosas de representar la perfección, y lo lograremos. El fin justifica los medios, por eso lo hacemos. Somos fuertes, y lo vamos a lograr, porque Ana y Mia no son "asesinas", como las llaman, sino que son la voluntad que nos guía al triunfo, a la felicidad y al cumplimiento de nuestros sueños y los estereotipos sociales.

(*) Fragmento extraido de http://pro-anaymia.blogspot.com/