Jugará en el mismo estadio donde cayó por goleada ante Brasil en la reciente Copa América
Argentina vuelve a Maracaibo por una revancha
El seleccionado nacional, tras la merecida victoria que logró en su debut ante Chile en Buenos Aires por 2 a 0, visitará hoy a Venezuela, en el estadio José "Pachencho" Romero, de Maracaibo. El encuentro, que comenzará a las 21.40, será controlado por el brasileño Carlos Simón.

Agencia Télam / De la redacción de El Litoral

El plantel dirigido por Alfio Basile, que llegó el domingo por la noche a tierras venezolanas, derrotó sin brillar pero con argumentos sólidos al conjunto chileno, ahora dirigido por Marcelo Bielsa, en la cancha de River Plate. En Argentina se destacó la exquisita y decisiva pegada de Juan Román Riquelme y la inteligencia para controlar el ritmo de partido.

El único de los titulares que arrastra una molestia leve es el defensor del Real Madrid Gabriel Heinze, con una contractura en el aductor izquierdo, aunque no tendría problemas para comenzar el cotejo ante Venezuela. El "Gringo" se sometió a una ecografía y se esperará su evolución, de acuerdo al parte médico entregado por el seleccionado.

El resto del equipo sería el mismo que comenzó el sábado, con la repetición de la fórmula en el ataque de Lionel Messi, ovacionado por los venezolanos al ingresar al hotel, y Carlos Tevez, con una mezcla de velocidad y desenfado del jugador del Barcelona y la potencia característica del ex delantero de Boca Juniors.

Basile se mostró satisfecho con el rendimiento colectivo del debut y obviamente por la pierna derecha "asesina" de Riquelme, a pesar de ciertos altibajos en algunos pasajes del encuentro.

Aunque siempre hay cosas para mejorar, un triunfo sin sufrimiento ante un adversario renovado y con una nueva mentalidad que le impuso Bielsa, se alejaron los fantasmas de los empates en los comienzos de las últimas eliminatorias.

Una de las pruebas a sortear para la selección argentina, además de no recordar la paliza que sufrió en julio pasado en el mismo estadio ante Brasil por la final de la Copa América, será el intenso calor (entre 25 y 30 grados a la hora del partido), máxime el esfuerzo realizado hace tres días y el viaje de ocho horas en avión.

En donde sí habría modificaciones sería en el banco de suplentes, ya que la dolencia de Heinze le daría un lugar entre los relevos al defensor del Inter de Italia Nicolás Burdisso, quien vio desde la platea el primer cotejo eliminatorio, mientras que el volante del Mallorca de España Jonás Gutiérrez viajó con la delegación pero está descartado por lesión.

Habrá que seguir analizando cómo funciona el nuevo reemplazante del histórico Roberto Ayala -su retiro de la selección es un problema de difícil solución- como primer marcador central, Martín Demichelis, de aceptable cotejo ante los chilenos y con buen juego aéreo en ambas áreas, una de los graves debilidades que acarrea este plantel en los últimos años.

La fe venezolana

Por el lado "vino tinto", la vida es mejor imposible. Salvo la lesión en el tobillo izquierdo del volante del Mallorca de España Juan Arango, figura del equipo dentro y fuera de la cancha, el entrenador Richard Páez repetiría los mismos titulares que consiguieron el histórico triunfo ante Ecuador por 1 a 0, en Quito, donde siempre había perdido y no había anotado goles.

En el caso que Arango no sea titular, su lugar será ocupado por el mediocampista Alejandro Guerra, quien lo reemplazó en Quito durante el segundo tiempo.

"Sabemos que en casa no debemos dejar escapar ningún punto, espero que las cosas salgan con Argentina y estamos con las mismas ganas. Creo que estas cuatro primeras fechas son importantes para lo que uno aspira", comentó el entrenador.

"Debemos hacernos muy fuertes en casa y demostramos que podemos sumar de visitante como lo hicimos ante Ecuador", argumentó el atacante Giancarlo Maldonado, el referente de área venezolano, estrella en el torneo mexicano con once tantos en la misma cantidad de partidos para el Atlante.

Páez, que dirige por tercera vez consecutiva una eliminatoria a Venezuela, dijo que el actual es "el mejor equipo de la historia" del país. "Es hora de dejar de aprender y ya clasificar para una ronda final de un mundial", dijo y sus dirigidos se muestran convencidos en que pueden luchar por una plaza hacia la hazaña.

"Para ganarle a Argentina hay que jugar extraordinario, no solamente bien. Es un gran rival, con un fútbol increíble, pero ya no lo tomamos al adversario como un obstáculo que no se puede superar", agregó Páez.

Venezuela consiguió algo histórico en Quito, pero es no menos real que, salvo el zapatazo de José Rey desde mitad de cancha, hizo poco y nada por el espectáculo y el resultado pudo ser un empate, de no haber caído Ecuador en la desesperación total en los últimos metros.

Para Argentina, la de hoy no será una prueba de fuego, ni mucho menos. Se sabe que con el sistema actual de competición, equipos poderosos como el de Basile o Brasil no quedarán afuera de un Mundial, pero servirá para ir diagramando cambios en algunos puestos precisos. Una nueva experiencia para seguir creciendo.

El regreso

Siete jugadores y el cuerpo técnico del seleccionado argentino regresarán desde Venezuela mañana a la 1 de la madrugada hacia Buenos Aires, tras jugar dos horas antes frente a ese rival por las eliminatorias sudamericanas, mientras que el resto del grupo volará directamente a Europa. En principio, los que retornarán ni bien finalizado el partido en el vuelo chárter de la empresa Aerosur, serán Juan Pablo Carrizo, Fernando Belluschi, Hugo Ibarra, Germán Denis y Daniel Montenegro, los cinco del fútbol local, más Juan Román Riquelme, quien no es tenido en cuenta por el entrenador del Villarreal de España, el chileno Manuel Pellegrini, y Daniel Díaz.

Ganó siempre

Los seleccionados argentinos vencieron a los venezolanos en las 14 ocasiones en que jugaron, desde 1967 hasta la fecha, ya sea por torneos sudamericanos, eliminatorias mundialistas, Copa América y cotejos amistosos, con 60 goles a favor y apenas 8 en contra. Por eliminatorias, jugaron en ocho ocasiones: para México 1986, Francia 1998, Corea-Japón 2002 y Alemania 2006. En la mayoría de las veces, la diferencia a favor del albiceleste fue por goleada, pero se destaca una por sobre todas: el 11 a 0 que le propinó en Rosario, el 10 de agosto de 1975, por un torneo Sudamericano.

El orgullo de Demichelis

El defensor Martín Demichelis resaltó que "Argentina es una potencia mundial y en este momento está fuerte en todas sus líneas. El fútbol argentino sigue mereciendo su respeto, más allá de que hace años que no gana cosas".

Demichelis también fue consultado sobre la obvia referencia al dueño anterior de su puesto, Roberto Ayala, referente por más de una década en el seleccionado argentino. "No tuve la chance de hablar todavía con él, pero sería un orgullo dialogar con Ayala porque podría sacarle un gran provecho. Ojalá se dé en el futuro. Yo me siento más cómodo como marcador central, y cuando llegué (Alfio) Basile me dijo que me quería en esa posición, aunque estoy para colaborar donde sea", comentó.

Demichelis agregó que para sentirse "consolidado" necesita "tiempo y continuidad", destacó "el apoyo de los compañeros", admitió que "siempre hay cosas para mejorar y corregir" y coincidió que el partido ante Venezuela "será difícil, porque todos le quieren ganar a Argentina".

"Lo que pasó antes del mundial anterior (quedó desafectado por José Pekerman sobre el final) ya terminó. Puede quedar una herida, pero ya está. Lo de los elogios de ahora no hay que tomarlo con euforia, porque el fútbol es cambiante", consignó Demichelis.

El defensor confesó que cuando el equipo "está volcado en ofensiva da gusto verlo jugar desde atrás" y se mostró "orgulloso por ser partícipe de este equipo que la gente disfruta".

"La presión es para nosotros"

El defensor y capitán del seleccionado argentino, Javier Zanetti, afirmó ayer que el partido ante Venezuela "será muy complicado", más allá de las ocho victorias albicelestes en la misma cantidad de partidos que jugaron en esta instancia desde 1985.

"Respetamos mucho a Venezuela. En los últimos años han evolucionado mucho en juego y resultados. Será muy complicado, los dos venimos de ganar y seguramente querremos seguir por el mismo camino". Y agregó que "tienen jugadores como Juan Arango, al que enfrenté varias veces, que mejoró mucho yéndose a Europa y Giancarlo Maldonado es importante en el área", comentó en una conferencia en el hotel Crown Plaza Maruma, de Maracaibo.

Zanetti confesó también que "el hecho de volver a la ciudad donde perdimos la final de la última Copa América nos trae malos recuerdos, pero es algo que ya pasó y estamos ante un nuevo desafío".

"Para mí es un motivo de orgullo ser capitán de la selección. Si pienso los jugadores que se pusieron esta cinta, no lo puedo creer. La tuvo (Diego) Maradona, un gran amigo como Roberto Ayala, es muy gratificante para mí", remarcó el "Pupi".

El defensor, elogios al rival al margen, se hizo cargo del lugar que ocupa Argentina en el plano mundial futbolístico. "Argentina por historia siempre tendrá la presión. Somos una gran selección y debemos salir a buscar el partido. Es cierto que el tiempo de descanso no es mucho, pero así están dados los calendarios de eliminatorias y ojalá que podamos repetir lo que hicimos contra Chile", dijo el defensor del Inter de Italia.

En otro sentido, Zanetti se refirió a la diferencia de jugar con delanteros de menor envergadura física como Tevez y Messi, en lugar de Hernán Crespo, no citado por Basile para las dos primeras actuaciones en estas eliminatorias. "Por ahí se busca más por abajo para armar jugadas y entrar en pared, en lugar de ir por afuera y tirar un centro", puntualizó.