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Recién iniciada en su cargo de concejala habló con El Litoral sobre la impronta de su participación en el cuerpo deliberativo local. Ocuparse del acceso a la información pública es uno de sus objetivos a corto plazo.
Adriana Molina es una de las cinco mujeres que integran el Concejo municipal; a diferencia de algunas de sus pares que ya venían desempeñando en el cargo, asumió a fines del año pasado luego de que Mario Barletta sea elegido intendente de la ciudad. Integra la comisión de Hacienda y asegura estar interesada en promover iniciativas que favorezcan la participación ciudadana y por los problemas que generan la diferencia de género.
Desde su nuevo rol de funcionaria, dice que espera del Concejo pluralidad y debate y que asumió el cargo "con una gran responsabilidad personal y social fundamentalmente". También sabe que de su desempeño -y del de sus pares- depende en gran medida el futuro de la ciudad. "Creo que la ciudadanía espera de nosotros que trabajemos, que la escuchemos y que concretemos soluciones a sus problemas".
A la realidad política santafesina la ve como "desprestigiada" pero "apuesto a cambiar eso y el único modo de modificarlo es que vean que es posible que las cosas se hagan de un modo diferente".
Que todos sepan
Uno de los temas que quedaron pendientes tratar el año pasado en el Concejo es el de acceso a la información pública, iniciativa que a Molina le interesa particularmente que se convierta en norma.
"Creo que es esencial, el acceder a la información debe entenderse como un derecho humano, si no se conoce no se pueden ejercer los derechos. Cualquier gestión democrática que quiera ser participativa, trasparente, con criterios éticos, no puede no tener una ordenanza de acceso a la información", afirmó la concejala.
El presupuesto
La concejala integra la comisión de Hacienda del municipio lo que la vincula directamente con el presupuesto para el 2008 que el intendente presentó ante los ediles hace pocos días.
"El presupuesto es una herramienta para quien está en la gestión de un gobierno, es planificación pero también debe ser una herramienta de control político del Concejo y también para los ciudadanos", asegura Molina sobre el plan de ingresos y egresos, que aún falta aprobar desde las bancadas.
Que los vecinos tengan acceso también al presupuesto y hagan un seguimiento de los planes planteados por el intendente y su concreción o no en el futuro es la relación más importante que la concejala hace entre acceso a la información y el modo en que el presupuesto se presentó este año. "Es para destacar la memoria explicativa que incluye el proyecto, saber en particular en qué se va a gastar y cuánto es una novedad", afirmó.
Proyectos a presentar
En los próximos días la edil de la UCR ingresaría dos propuestas relacionadas con uno de los temas que más interés le despiertan: las mujeres.
La primera es una iniciativa para que se modifique la manera en que se designan los nombres de las calles de la ciudad. "Queremos que sea más equitativa. Hicimos un relevamiento y sólo entre un tres y cinco por ciento de las calles tienen nombres de mujer", afirmó Molina.
Cabe aclarar que su propuesta no implica cambiar los nombres ya asignados, sino la manera en que se haga en el futuro.
"Queremos reivindicar la historia y el nombre de muchas mujeres", afirmó la edil y agregó que la elección se pondría a consideración de organizaciones conformadas por mujeres de la ciudad.
El otro proyecto es un pedido al DEM para que inste al Ejecutivo provincial a que reorganice el funcionamiento de las `comisarías de la mujer' o centros de atención a las víctimas de violencia sexual y familiar que existen desde hace tiempo "pero no están trabajando bien ya que no tienen móviles ni capacitación de personal".
Personal
Adriana Molina obtuvo su título de abogada en la UNL a los 21 años y, tiempo después, el de Negociación y Mediación. Está casada, tiene una hija de 19 y un varón de 15 y es hincha de Unión. Actualmente, es profesora de Derecho Constitucional en la misma casa de altos estudios donde se recibió y comenzó su carrera docente hace 20 años.
De la Redacción de El Litoral
