Cada vez hay más basura
La ex cava Lombardi, todo un problema
El basural existente en ese lugar genera molestias a los vecinos de barrio Schneider y Ciudadela Norte, quienes esperan de la nueva gestión municipal que tome cartas en el asunto, debido a que su erradicación es un reclamo de años.

Que las autoridades municipales no se olviden de barrio Schneider resume el pedido de las autoridades de la vecinal. Es que, para ello, la nueva gestión deberá atender y brindar soluciones a varios problemas. En un orden prioritario, el vicepresidente de la entidad, Oscar Vallejos, señaló que son tres las principales situaciones a revertir: las consecuencias que genera el basural de la ex cava Lombardi, la cantidad de yuyos que hay por todo el barrio y el mal estado de las calles.

En barrio Schneider viven alrededor de 2.700 personas. Pero la ex cava se encuentra en el límite con Ciudadela Norte, por lo que desde la vecinal también incluyen a los vecinos de dicho barrio como damnificados.

Ratas, alacranes, olores nauseabundos, moscas y contaminación son algunas de las consecuencias que padece la gente de estas dos jurisdicciones de la ciudad a causa de la ex cava. "Y serán aún peores en unos años, si nada se hace", consideran desde la vecinal Schneider.

Gente que tira basura y otros que van a juntarla caracterizan a diario al lugar donde está emplazada, lo que es un verdadero peligro porque ello da lugar a la quema de residuos y por allí pasa la red de gas natural. Incluso, un cartel de letras azules de la empresa prestataria prohíbe excavaciones por tal motivo.

"A nosotros nos indigna que muchas veces sea la misma Municipalidad la que tira basura en la cava, además de frigoríficos y pollerías", manifestó el vicepresidente de la vecinal.

En las inmediaciones de la ex cava Lombardi está la sede de Urbafe, una de las dos empresas encargadas de la limpieza de las calles de la ciudad. Sin embargo, pese a los reclamos realizados desde la asociación vecinalista, dicha empresa "nada puede hacer", puesto que el basural está ubicado en terrenos que son privados.

"Los propietarios de la ex cava son los sucesores de Lombardi. Pero no se preocupan porque para ellos es más fácil pagar una ínfima multa antes que limpiar los terrenos y cerrarlos", dijo Oscar.

Ramón Zapata vive en barrio Schneider hace 50 años y actualmente es el tesorero de la vecinal. Preocupado por cumplir el pedido de los vecinos, considera que en la zona se produjeron varios adelantos. Sin embargo, también reconoce que lo que se hizo alguna vez no se mantuvo en condiciones a lo largo de los años y hoy la zona está postergada en cuanto a mejoras.

De fábrica a basural

La cava Lombardi, cuentan los vecinos, se formó luego de que allí funcionaran hornos de ladrillo. Y, aunque por entonces se reclamaba su relleno, ahora la gente asegura preferirla.

"Era una cava limpia, donde muchos chicos y grandes se bañaban. Había tortugas y hasta anguilas que muchos pretendían pescar. No obstante, también varias personas se ahogaron en ella y se empezó a pedir que la rellenaran", recordó Ramón, quien a continuación relató que se respondió al pedido, pero la basura fue el material de relleno. "Tal vez la ex cava se podría arreglar bien y ser utilizada como un espacio de recreación o una canchita de fútbol", sugirió el hombre.

El vicepresidente de la vecinal, por su parte, remarcó que en Schneider "el 95 % de los vecinos paga responsablemente los impuestos"; sin embargo, "los funcionarios no responden de la misma manera. En la gestión anterior estuvimos olvidados los cuatro años. Los vecinos creen que no hacemos los reclamos, pero no es así. El tema pasa porque no somos escuchados", puntualizó Oscar, deseando que ésta sea la última vez que la ex cava Lombardi sea motivo de reclamo en las páginas de El Litoral.

Además

Desde la asociación vecinal Schneider reclaman también soluciones a la falta de iluminación en la ex cava Lombardi, la apertura de calle Ruperto Godoy, la restitución de la línea 3 en el barrio y la limpieza de un desagüe tapado de basura que atraviesa la ex cava. Sobre este último punto, el vicepresidente de la entidad, Oscar Vallejos, manifestó: "Cuando llueve no tenemos demasiados problemas porque es una zona alta. Pero, si llega a repetirse una inundación como la del año pasado, quedaríamos anegados".

De la Redacción de El Litoral