En los feedlots hay mucha hacienda para salir que se está pasando de grasa. A las pérdidas derivadas de la falta de disponibilidad de granos y subproductos, ahora se agrega el atraso en los pagos de las compensaciones oficiales, sin las cuales, buena parte de los corrales se vaciará y caerá el precio de la invernada.
Como nunca antes en la historia, la cadena de ganados y carnes se ha quedado sin stock. Hay una oferta acumulada para salir en los campos y en los feedlots, pero no hay hacienda en los corrales de los frigoríficos, ni en tránsito, ni en las playas de faena y tampoco hay carne en cámara, heladeras y góndolas de carnicerías y supermercados.
Los extranjeros siempre se sorprenden de que el negocio de la carne en nuestro país funcione prácticamente sin stocks de importancia, pero los "carne-ductos", que normalmente están cargados con el equivalente a varios días de consumo, han desaparecido totalmente. También se ha vaciado el stock en las heladeras y freezers de las amas de casa, que supone a menudo otra buena cantidad de días de consumo.
En los feedlots hay mucha hacienda para salir que se está pasando de grasa. Hace ya casi dos semanas que no se repone y apenas se regularice la situación, deberán salir a las ferias a colocar la hacienda vendida.
A las pérdidas derivadas de la falta de disponibilidad de granos y subproductos, ahora se agrega el atraso que se está presentando en los pagos de las compensaciones oficiales, sin las cuales, buena parte de los corrales se vaciará, al tiempo que se produciría una baja dramática en el precio de la invernada.
Subsidios altos
Desde el Gobierno se advierte que los subsidios al feedlot son muy altos y generalizados y esto no ha servido para impedir la tremenda disparada del precio del ganado y de la carne desde febrero último.
Pero si con un feedlot súper estimulado y lleno (como nunca antes en un verano) los precios del ganado treparon 35 por ciento en pocas semanas, ¿puede imaginarse que habría pasado si no hubieran estado las 300 mil cabezas que mensualmente está aportando el engorde a corral?
Hoy, los feedlots están presionados por la Secretaría de Comercio Interior, que los ha intimado telefónicamente a abastecer a los supermercados, y por los productores, que sitian con piquetes sus corrales, sin dejar que entre y salga una cabeza de ganado.
Aunque es un eslabón imprescindible en la producción de carne vacuna, el feedlot, con cuatro millones de cabezas anuales encerradas que engordan unos 100 kilos cada una y que rinden unos 59 kilos en gancho por animal, aportaría unas 236 mil toneladas de carne anuales sobre una producción de 3,2 millones de toneladas en el 2007.
Alimentación a pasto
El grueso de la producción sigue siendo la ""pastoril suplementada", que no recibe subsidio alguno y que está seriamente limitada por el avance continuo -a razón de un millón de hectáreas anuales- de la agricultura sobre la superficie ganadera más productiva.
Aporte nacional
Afuera, los precios internacionales de la carne vacuna siguen en ascenso. La Argentina, primero con el límite a las exportaciones de carne y ahora con la paralización de la industria frigorífica, contribuye a esa escalada en los valores.
Ignacio Iriarte