El presidente boliviano, Evo Morales, llegó ayer a Caracas para una reunión extraordinaria del Alba que su colega venezolano, Hugo Chávez, convocó a última hora para tratar principalmente de la crisis en Bolivia, que "está a punto de estallar", según dijo.
El gobernante boliviano fue recibido por Chávez en el palacio presidencial poco antes de la medianoche, tras la llegada del vicepresidente cubano, Carlos Lage, y antes de la del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, gobernantes de los países que integran la Alternativa Bolivariana para las Américas (Alba), cuya cumbre extraordinaria se desarrollará hoy.
El Alba se creó a instancias de Chávez en el 2004, en contraposición al Área de Libre Comercio de las Américas (Alca), impulsada por Estados Unidos.
Morales, que afronta intenciones internas de sus opositores por asuntos territoriales en Bolivia, dijo ser un "convencido de que los países vecinos, los países de Latinoamérica y la comunidad internacional están junto al pueblo boliviano" en su lucha por la "justicia social y la igualdad entre los hermanos bolivianos".
Chávez, a su vez, manifestó que "Bolivia está sometida hoy a fuego, una vez más, por atreverse a soñar, por atreverse a retomar el camino de la dignidad y de la libertad de la independencia verdadera".
Por ese motivo, añadió el gobernante venezolano, "recibe hoy el fuego de la canalla", de quienes "quieren partir a Bolivia en pedazos".
"Ratificamos nuestra solidaridad y nuestro compromiso contigo y con tu pueblo, en este momento en que el imperialismo dispara sus cañones desde dentro y fuera", le expresó a Morales al darle la bienvenida, en una ceremonia transmitida en cadena nacional obligatoria de radio y televisión, de medios privados y estatales.
Horas antes, al anunciar la cumbre extraordinaria del Alba, Chávez manifestó que "el imperio" estadounidense busca que el gobierno de Morales y que toda Bolivia "estalle" y que "la derecha fascista quiere la guerra".
La cita presidencial de hoy tiene entre sus objetivos principales discutir qué hacer "desde fuera" en apoyo a la democracia boliviana, señaló el jefe de Estado venezolano.
El líder cubano, Fidel Castro, recordó Chávez, escribió el domingo pasado que se está "a punto de presenciar otra tragedia" con la crisis en Bolivia.
"Es la locura (...); la locura del fascismo, de la extrema derecha fascista alentada por la mano asesina del imperio" estadounidense, reiteró Chávez en una alocución desde su despacho, reproducida por la emisora VTV de la red estatal de televisión.
En tanto, unos doscientos intelectuales de izquierda denunciaron una "conspiración" para "desmembrar" Bolivia, apoyada por oligarcas de ese país y "el imperialismo" estadounidense, informó hoy la prensa oficial cubana.
EFE