Sucesos: SUCE-01
El sistema de alarma no funcionó
Audaz robo a una casa de repuestos para camiones
Levantaron una chapa del techo y se filtraron por un entrepiso del galpón. Se llevaron más de $ 10.000 en repuestos, además de dólares, efectivo en pesos y cheques a terceros. Los delincuentes actuaron durante la madrugada, sin provocar mayores destrozos.

De la Redacción de El Litoral

Enrique Ruscitti se levantó temprano esta mañana para trabajar. Pero, al llegar al galpón donde funciona su negocio de venta de repuestos, se encontró con todo revuelto y, si bien no había puertas forzadas, desde lo alto del techo una chapa suelta revelaba la incógnita de lo que había pasado.

El robo al galpón de Corrientes 3652 se produjo entre las 4.30 y las 5 de hoy, hora en que algunos vecinos recordaron haber oído ruidos extraños en los techos. No obstante, ninguno le dio la importancia suficiente.

El propietario de la casa de repuestos para camiones llamó a la policía y, a las 7.30, el personal de la Seccional Segunda había montado un importante operativo, con despliegue de unidades en el barrio y colaboración de efectivos de Investigaciones.

Los ladrones -podría tratarse de varias personas- ingresaron por el techo, a una altura de más de diez metros. Cortaron una chapa y bajaron a un entrepiso, que sólo conocen quienes alguna vez entraron al negocio.

Sin alarma

Antes de poner un pie adentro, los delincuentes hicieron un pequeño orificio en una chapa central, de un material como la fibra de vidrio, y desde allí estudiaron la forma de desactivar el sistema de seguridad, para luego ingresar. Una vez en el interior, desmantelaron el sistema de alarma y desconectaron la línea telefónica.

Si bien la familia Ruscitti se encontraba esta mañana haciendo una evaluación de las pérdidas, a primera vista reconocieron el faltante de una importante cantidad de cheques a terceros, dólares y efectivo en pesos, además de una caja de repuestos que estaba lista para ser entregada y que el dueño del local estima que le costará más de diez mil pesos.

También se llevaron el estéreo y los papeles de la camioneta, a la que le dejaron el tablero destrozado y con todos los cables sueltos.

Dadas las características del caso, se estaría ante la presencia de profesionales porque no provocaron destrozos, aunque sí mucho desorden; estudiaron a la perfección el terreno y dieron el golpe en medio de la madrugada, llevándose cajas de repuestos de alto valor.

Muy enojados

La familia Ruscitti cuenta con el servicio de alarmas desde junio de 2001. Desde ese entonces, fueron varias las noches en las que le interrumpieron el sueño para verificar el local cuando el sistema se activaba de noche.

Viven a la vuelta del negocio, por calle San Juan, y también su casa está protegida. No obstante, tanto Enrique como su esposa y su hija se mostraron muy disconformes con el servicio, ya que esta vez parece no haber servido para nada.

La familia Ruscitti se lamentaba por lo ocurrido y dudaba de que algo de lo robado apareciera, aunque destacó la predisposición y el trabajo de la policía. Mientras tanto, ya están pensando en cómo van a hacer el lunes, cuando tengan que recibir a los proveedores y clientes con quienes tienen compromisos asumidos.