Un joven quedó seriamente comprometido por la tenencia de la pistola utilizada para cometer el crimen. Si bien niega su cercanía, sería un íntimo amigo del principal sospechoso.
La Justicia confirmó el hallazgo del arma con la que mataron a Sergio Amati, el jugador de fútbol de las inferiores de Colón. El peritaje realizado por técnicos en balística de la Policía local estableció las coincidencias entre los proyectiles extraídos del cuerpo de joven, las vainas recogidas en el lugar del hecho, y la pistola calibre 22 secuestrada dos semanas atrás. Para los investigadores, el único detenido es un íntimo amigo del principal sospechoso del crimen.
Los resultados del peritaje llegaron a Tribunales a última hora del viernes y las novedades no hicieron más que agravar la situación del muchacho detenido con el arma en cuestión.
En un allanamiento realizado el 22 de abril último, Seguridad Personal de la Policía detuvo a Alexis A. con una pistola calibre 22 mm. de la marca Smith Wesson. Por ese hecho el juez de Instrucción Séptima, Diego De la Torre, abrió un expediente por "portación de arma", pero las actuaciones pasaron de inmediato al juez Carlos Ferrero, de Instrucción Sexta, ante las sospechas de la policía de la vinculación con el caso Amati.
No lo conoce
Ahora, el expediente completo se irá al Juzgado de Instrucción Cuarta, de Rubén Eduardo Saurín, por que el detenido tenía cuentas pendientes con la Justicia.
No obstante, el muchacho capturado con el arma homicida habría negado ante las autoridades su vínculo con el supuesto asesino, un tal "Caca de mono". Le preguntaron qué hacía con el arma y quién se la había dado, pero a cambio recibieron respuestas inconducentes, que no permiten llegar a la guarida del supuesto agresor.
A Marcelo Amati lo acribillaron a tiros un mes atrás, la noche del viernes 11 de abril, en el barrio San Lorenzo. Ocurrió en la esquina de General López y Lamadrid, cuando el joven jugador de Colón de la 5ta. División de AFA recibió tres disparos. Falleció pasadas las 11 de la noche en el Hospital Cullen.
Al parecer, el chico iba con su novia cuando un conocido los interceptó en bicicleta y comenzó a agredirlos. Pero como Amati se defendió del ataque a mano limpia, el agresor sacó un arma y lo ejecutó. Para los investigadores queda descartado el robo, dado que testigos pudieron identificar al autor del crimen con nombre y apellido y no faltó quien aludiera a cuestiones personales que acabaron de la peor manera.