Aumentó la sustracción de cables subterráneos, lámparas y tapas de farolas, entre otras cosas. Las reparaciones demandan una inversión superior a los 10 mil pesos mensuales sólo en materiales. Piden que los ciudadanos denuncien si detectan irregularidades.
Existe preocupación en el municipio ante el reiterado robo de cables, artefactos de iluminación y tapas de columnas de alumbrado público en la capital santafesina. Según estimaciones, sólo en materiales para reponer lo sustraído se deben invertir mensualmente más de 10 mil pesos, pero, además, esto provoca que varias zonas queden sin servicio eléctrico hasta que se logre la reparación.
Para citar un ejemplo, personal de la Municipalidad detectó en la última semana el robo de cable subterráneo en avenida Almirante Brown, sobre la Costanera, en dos sectores: uno, a la altura del 5000, y otro, a la altura del 6700. Además, el viernes por la tarde se comprobó la sustracción de cables subterráneos también en Peñaloza al 7700. En definitiva, sólo en esos sitios se sustrajo un total de más de 300 metros, por lo que esas áreas quedaron a oscuras durante una jornada.
Paralelamente, en la avenida Costanera se puede evidenciar la ausencia de todas las tapas -que han sido sustraídas- en aproximadamente 70 columnas de alumbrado.
También se han robado unas 102 lámparas del Parque Garay y unas 90 del Parque del Sur, por citar otros casos. Por último, se informó que se sustrajeron los cables subterráneos y de las columnas desde calle San José y hasta el hospital de Niños. Y todo esto sin contar los innumerables robos que se producen a diario en cada barrio.
En todas las oportunidades, desde el Municipio se han realizado las denuncias policiales correspondientes.
Por el cobre
Los encargados de llevar adelante este tipo de delitos buscan principalmente el metal del cobre, entre otras cosas, para luego fundirlo y revenderlo. Cabe destacar que existe toda una industria en torno a este tipo de metal, y se estima que los delincuentes obtienen unos 16 pesos por kilo de cobre fundido.
Según se detalló, se trata de gente especializada en la materia y que diariamente se encarga de desarrollar estas tareas. Los delincuentes saben cómo manejar los comandos, actúan sobre ellos y realizan pozos para llevarse los cables. Por lo general, actúan de noche, pero últimamente también se animan a plena luz del día: en el caso del robo en avenida Peñaloza, los propios vecinos denunciaron que tres hombres que circulaban en un Renault 12 estuvieron trabajando en la mañana del viernes durante un par de horas para llevarse los cables subterráneos.
Denunciar
De esta manera, y ante la imposibilidad del municipio de salir inmediatamente a reponer los artefactos y cables robados, los principales perjudicados son los ciudadanos. Por eso, desde el gobierno de la ciudad se solicitó a los vecinos que colaboren en el cuidado del patrimonio público, haciendo las denuncias correspondientes en el mismo momento en que presencien un hecho de esta naturaleza, o ante cualquier acto sospechoso en la vía pública.
En ese sentido, Diego Poretti, subsecretario de Prevención y Seguridad Ciudadana, explicó que se establecieron contactos con los responsables de las fuerzas de seguridad para coordinar acciones que permitan revertir esta tendencia que ha aumentado en el último tiempo.