Alrededor de diez trabajadores de la construcción, de nacionalidad paraguaya, se movilizaron esta mañana junto a integrantes de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra) para reclamar soluciones a una serie de irregularidades que vienen padeciendo hace meses, cuando una empresa constructora de Buenos Aires desembarcó en nuestra ciudad para trabajar en la readecuación de un edificio que será utilizado como sede de la Iglesia Universal Pare de Sufrir. La protesta tuvo lugar sobre calle Catamarca, entre Rivadavia y 25 de Mayo, en medio de quema de cubiertas y tránsito interrumpido.
Consultado por El Litoral, Carlos Verón de Astrada, miembro de la comisión directiva de la Uocra, manifestó que dicha empresa viene trabajando para la Iglesia Universal hace tiempo y en diferentes provincias. "Cuando tomamos conocimiento de la situación de estos trabajadores, que son 35 en total y la mayoría indocumentados, le dimos intervención a la Secretaría de Estado de Trabajo. Desde la Uocra, lo que queremos es que se les pague como corresponde, es decir según lo establecido en el Convenio Colectivo de Trabajo y la Ley N´ 22.250, y que se les dé un lugar digno donde vivir, porque están habitando en el mismo edificio donde están trabajando", dijo el hombre. Y agregó: "Los tienen como esclavos, y ese régimen se abolió hace miles de años".
Cabe señalar, según comentó uno de los trabajadores damnificados, desde la Uocra tomaron conocimiento del hecho cuando uno de ellos se acercó espontáneamente a averiguar si visitar a su familia era motivo de suspensión y narró las condiciones en las que se encuentran trabajando.
"Esta gente está en Santa Fe hace cuatro meses, interviniendo en lo que será una Iglesia Universal que tendrá entrada por 25 de Mayo, entre Eva Perón y La Rioja", señaló Verón De Astrada. Y agregó: "Hay cerca de 25 trabajadores que no pueden estar presentes en la protesta porque no los dejan salir. Los encerraron...".
El reclamo puntual, explicó el hombre, es contra la empresa que contrató a estos trabajadores de nacionalidad paraguaya pero también contra los dirigentes de la Iglesia Universal Pare de Sufrir puesto que, como lo establece la ley, "es la responsable solidaria".
Según pudo conocer El Litoral, estos 35 hombres paraguayos tienen una jornada laboral de 12 horas y perciben un sueldo de $500. Por todo lo expuesto, desde la Uocra indicaron que seguirán con las medidas de fuerza hasta tanto se normalicen las condiciones laborales.
Al cierre de esta edición, desde la Secretaría de Estado de Trabajo se esperaba una autorización judicial para poder ingresar al edificio y liberar a los trabajadores que se encontraban en su interior porque "los capataces no los dejaban salir".
mr