El paro a la actividad comercial de granos sigue hasta el lunes, pero no se prolongará. La gobernación no acepta la gestión propuesta por el defensor del pueblo, que recibirá a los dirigentes del campo.
De la redacción de El Litoral / DyN
El campo resolvió ayer no prolongar el paro, cuya finalización está prevista para la hora cero del lunes 9 de junio, e informó que concurrirá al encuentro convocado para ese mismo día por el defensor del Pueblo de la Nación, Eduardo Mondino.
El ombudsman también convocó al gobierno, que ya adelantó su rechazo en virtud de que "no se pidió un mediador", según el secretario de Agricultura, Javier de Urquiza. Los ruralistas resaltaron en un comunicado los llamados del Episcopado, las fuerzas políticas y la sociedad civil en general, a los que caracterizó como "gestos tendientes a garantizar la paz social".
En ese marco, señalaron que "todos estos llamados han sido encauzados a través de la Defensoría del Pueblo de la Nación", y que acudirán a esa convocatoria "en cumplimiento de nuestra obligación cívica".
En consecuencia, instaron al gobierno a "retomar el camino del diálogo con las garantías que nos da ese mecanismo contemplado en la Constitución". La audiencia con Mondino podría representar la reanudación del diálogo con el gobierno, si es que el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y el ministro de Economía, Carlos Fernández, acceden a concurrir, si bien a lo largo de la semana se puntualizó desde despachos oficiales que no se aceptará una mediación, porque no son "contraparte" en el conflicto.
En ese sentido, la primera voz oficial después de conocerse el comunicado de los ruralistas fue la de De Urquiza, quien, pese a no haber sido citado por Mondino, sentenció que "el diálogo se tiene que dar entre el gobierno y el campo, no se pidió un mediador".
Largas deliberaciones
La decisión de los ruralistas se tomó luego de una extensa reunión de aproximadamente ocho horas, en las instalaciones que la Sociedad Rural Argentina (SRA) tiene en el Predio Ferial del barrio porteño de Palermo.
Al término de las deliberaciones y luego de 85 días del conflicto iniciado el 13 de marzo, los ruralistas precisaron que la no comercialización de granos para la exportación se mantiene "hasta el domingo 8 del corriente a la hora 24", momento a partir del que permanecerán "en estado de alerta y movilización".
También se deja en libertad de acción a las bases de productores que quieran "mantener la presencia a la vera de las rutas en aquellas localidades que lo consideren necesario". La tercera resolución destacada fue la de "reforzar la campaña de recolección de firmas para la recuperación de las facultades constitucionales del Congreso Nacional para la fijación de impuestos y derechos de exportación".
A diferencia de ocasiones anteriores, los dirigentes de las entidades no ofrecieron una conferencia de prensa, y la posición se dio a conocer a través de un comunicado difundido a las 20.20, por lo que a última hora subsistían las dudas entre las bases de productores.
En diferentes concentraciones de productores se reclamaban "precisiones" para saber a ciencia cierta cuándo se reanudaba la comercialización de granos, que en el documento se estableció a la hora cero del lunes 9 de junio.
Los reclamos de las bases guardan directa relación con los inconvenientes que en muchos puntos del país se mantienen con transportistas de cargas, que desde hace tres días llevan a cabo cortes en las rutas, en contraposición a la resolución que en su momento tomaron las entidades agropecuarias.
Síntoma dialoguista
Jorge Capitanich dijo que "el diálogo es la mejor herramienta" y recordó que "el gobierno ha planteado sistemáticamente la voluntad de establecer un mecanismo de diálogo para ir resolviendo los problemas". Sostuvo el gobernador chaqueño que en tres meses "se avanzó", por ejemplo en la "flexibilidad para los monotributistas con facturación hasta $ 144 mil" y en "convenios con las provincias para adelantar el sistema de transferencias" de fondos. "Ahora se va a liberar la exportación de 1,2 millones de toneladas de trigo", señaló. Confió, además "podría haber un acuerdo" con el sector lechero.
La presidenta con los frigoríficos
La primera mandataria Cristina Fernández pidió hoy a los responsables de la producción y venta de la carne que se trate de "evitar que las cadenas de comercialización después se apropien del esfuerzo", en el marco de los acuerdos de precio.
Lo hizo luego de firmar el acuerdo con los frigoríficos exportadores para "incentivar la exportación de derivados" de la denominada vaca conserva (vaca vieja). Al mismo tiempo, con el objetivo de impulsar el consumo de estos productos en el mercado interno, se decidió fijar en 2,50 pesos el precio de venta al público de la "viandada". "La obligación de todos es poder hacer más virtuosa toda la cadena de valor", afirmó la presidenta. Durante la reunión, la jefa del Estado pidió que en la lata de viandada aparezca "impreso el precio para que en la cadena de comercialización no se apropien del esfuerzo del productor y del industrializador".
"Hay que evitar que las cadenas de comercialización después se apropien del esfuerzo de los productores e industrializadores", insistió. En el informe a la prensa, el secretario de Agricultura y Ganadería, Javier de Urquiza, remarcó que la medida "cumple con el acuerdo firmado el 17 de abril último con los sectores de la producción".
Urquiza, junto al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, acompañaron a los gobernadores de La Pampa, Oscar Jorge; de Chaco, Jorge Capitanich; de Entre Ríos, Sergio Urribarri; de Formosa, Gildo Insfrán; de Santiago del Estero, Gerardo Zamora; y de Corrientes, Arturo Colombi, en la audiencia con la presidenta y los representantes de los frigoríficos.
Estuvieron directivos de Swift, el Rioplatense, Finexcor, Food's Land, Lafayette, Udercar, Mirab, Pampa Gourmet, Sadowa, Friar y Rafaela Alimentos. Por su parte, Capitanich destacó que el acuerdo firmado "mejora la rentabilidad de la producción" en provincias del norte como el Chaco que "se están posicionando como nuevas provincias ganaderas".