Ayer estaba solucionada la continuidad del delantero tatengue, pero a última hora surgieron algunos obstáculos. También se quiere arreglar el contrato con Rosales.
De la Redacción de El Litoral
Ayer fue un día movido para la dirigencia de Unión. Por un lado, lo ocurrido con Marcelo Mosset, que evidentemente alteró el ritmo normal, y por el otro, las muchas gestiones que se están haciendo para definir el plantel profesional con vistas al inicio de la temporada.
Ayer al mediodía, el presidente del club, Juan Leonardo Vega, había cerrado la continuidad de César Pereyra por un año más. Imprevistamente, por la tarde-noche surgieron algunos contratiempos que hoy se intentaban resolver. Pereyra fue tentado por varias instituciones, entre ellas Talleres de Córdoba, que le ofreció un contrato más importante que el de Unión. De todos modos, la expectativa de arreglo era favorable y se trata de una de las prioridades de Teté Quiroz.
El otro tema que estaba casi arreglado aunque de última surgió un obstáculo, es el de la incorporación de Claudio Guerra, delantero que viene de militar en Huracán. Al parecer, Babington estaría interesado en Paulo Rosales y pretendería que se haga una operación conjunta. "No me consta que sea así, creo que hoy lo vamos a arreglar favorablemente a lo de Guerra", señaló esta mañana el titular tatengue ante la consulta periodística.
Esta mañana comenzó a entrenar con sus compañeros la cara nueva de Unión: el marcador lateral izquierdo Raúl Gorostegui.
¿Y el "5"?
Caídas las gestiones que se hicieron con Meza Sánchez (firmó para Huracán) y Carrizo (ex Independiente) surgieron algunos otros nombres, dos de los cuales se mantienen en carpeta.
Uno de los jugadores ofrecidos fue Rogelio Martínez, ex Colón y Olimpo, pero su nombre no convenció a Quiroz. Otro jugador es Fernando de la Fuente, que estuvo jugando en San Martín de San Juan y es conocido por el técnico, volante de 22 años que, aparentemente, ocupa el puesto uno en cuanto a prioridades.
Otro de los que fue ofrecido a la dirigencia, es Diego Agustín Calgaro, volante de 21 años que forma parte de la lista de prescindibles en Rosario Central. No resultaba fácil su incorporación, inclusive no se trataría de un jugador de las características requeridas por Quiroz, pero integraba la carpeta de nombres en este puesto, donde aparentemente quedó descartada la continuidad de Juan José Serrizuela.
Por el momento, Unión tiene dos volantes centrales: se trata de Leandro Sartor y Germán Rodrigo Acosta.
El caso Nereo
Hoy aparecen declaraciones de un dirigente de Gimnasia y Esgrima de Jujuy, de apellido Chagra, que indican que "Unión pretendió que paguemos al contado, en 24 horas, el pase de Nereo Fernández. Ese es el motivo por el que no pudimos cumplir".
El presidente de Unión, Juan Vega, señaló que "Unión envió dos carta-documento del mismo tenor y condiciones a Gimnasia, una por Desvaux y otra por Nereo. Se cumplió con la de Desvaux pero no con la de Nereo. Además, ni siquiera llamaron ni tampoco atendieron nuestros llamados para negociar".
¿Cuál será el futuro de Nereo?, no se sabe. A Unión es muy difícil que vuelva. En Colón fue evaluado, pero Mohamed consideró que no era conveniente. "Pienso en el jugador y si se come un gol, no va a poder atajar más", dijo el entrenador rojinegro. ¿Alternativas?, hay algunas. Una puede ser Rosario Central y otra San Martín de Tucumán. Por el momento, Nereo está en Jujuy.
A Brasil
Es muy posible que entre lunes y martes viaje el secretario del club, César Donna, con destino a Río de Janeiro, junto con el delantero Leandro Zárate.
La transferencia a Botafogo fue acordada de palabra, pero no enviaron los avales. Unión gestionará en la ciudad carioca todo lo atinente al aspecto legal para asegurarse. Mientras tanto, el jugador no podrá incorporarse al Botafogo, más allá de que en Río se habla insistentemente de su llegada.
Si no se hace lo de Zárate al Botafogo, el destino de la "Chancha" estará en el fútbol europeo. Unión mantiene en stand-by dos ofertas, una de ellas del fútbol griego, que se contemplarían en el supuesto de que no se consiga la seguridad legal de lo que se acordó con el Botafogo.
No retrasarían
Los dirigentes de Unión señalaron que no recibieron ninguna notificación de parte de Belgrano ni de la AFA, solicitando el retraso del partido que ambos equipos jugarán por la primera fecha del torneo. La idea de Unión es jugarlo el fin de semana del 8 al 10 de agosto, junto con el resto de los equipos. En principio, se había pensado en aplazar el encuentro, pero Unión recibió la negativa de la AFA.