Linda Zalazar Reyes y Cintia Pizarro Giménez llegaron a nuestra ciudad el 3 de julio, cuando un desafío personal las decidió a tomarse un avión y trasladarse desde Perú a Argentina. Ambas tienen 24 años y son estudiantes de la carrera Terapista Ocupacional en la Universidad Cayetano Heredia. Están en 4º año y sólo les resta uno para graduarse.
Fue en la recorrida realizada por el hogar de ancianos Amor y Esperanza que El Litoral encontró a estas dos jóvenes. Estaban junto a dos abuelos enseñándoles una manualidad. Más tarde, Linda y Cintia explicaron que su labor como terapistas ocupacionales se centra en la "rehabilitación de pacientes que tengan cualquier tipo de discapacidad o limitación a través de distintas ocupaciones".
"Estamos en Santa Fe para conocer la realidad de los centros geriátricos y de hospitales en el marco de nuestra futura profesión y hacer una comparación con lo que pasa en Perú", dijo una de las jóvenes. Y agregó: "Hasta el momento vamos notando que entre ambos países hay marcadas diferencias y que nuestro lugar está muy atrasado en materia de bibliografías e investigaciones".
Aprovechar al máximo cada minuto de la estadía en nuestra ciudad es un lema para las jóvenes peruanas que llegaron hace unos días. Es que estarán hasta el 5 de agosto y hasta ese día no quieren derrochar ni un segundo.
Todas las mañanas, las chicas se levantan temprano para dirigirse al hogar de ancianos Amor y Esperanza, que se localiza en las inmediaciones de la avenida Gorriti y Gobernador Leiva. Están allí, trabajando con los 35 abuelos que hay en el asilo, hasta las 14 horas, para luego emplear el tiempo recorriendo los hospitales, las bibliotecas y las universidades.
"Los terapistas que hemos conocido en el Hospital de Niños nos han dado una visión diferente a la que teníamos de la carrera. Es que en Perú no está tan avanzada la investigación en nuestro campo, por lo que por las tardes nos dedicamos a buscar libros que nos serán de gran utilidad", manifestó Linda. Cintia, por su parte, acotó: "Nos gustaría quedarnos más tiempo, pero las clases recomienzan el 4 de agosto así que para esa fecha tenemos que regresar".
Cabe señalar que los fines de semana los aprovechan para recorrer y conocer la ciudad y también para leer la bibliografía a la que van teniendo acceso. "La gente de Santa Fe es muy cordial y el trato que nos da de lo mejor. La verdad es que no tenemos quejas y cambiaríamos Perú por Argentina", señalaron con risas de por medio.
"Esta idea nació por parte nuestra, digamos que la buscamos. Queríamos vivir una experiencia que nos enriquezca profesionalmente y también personalmente. Al principio habíamos pensado en irnos a Brasil, pero por el tema del idioma descartamos esa opción. También habíamos pensado en Chile. Pero nos decidimos a venir a la Argentina, luego de contactarnos con un terapeuta de acá que publicó una investigación en Internet y nos abrió las puertas", comentaron las jóvenes, indicando seguidamente que todos los gastos económicos son costeados por ellas y sus familias.