Internacionales: INTE-01
Georgia atacó a los separatistas de Osetia del Sur y denunció el bombardeo de Rusia
El Cáucaso arde y se encuentra en guerra
Aviones y tropas rusas ingresaron hoy a la capital de la región separatista de Osetia del Sur, Tsjinvali, y produjeron el retroceso de las fuerzas georgianas, mientras que una columna de blindados rusos comenzó a ingresar a Tsjinvali, en medio de bombardeos georgianos.

AFP-EFE-Télam

El presidente de Georgia, Mijail Saakashvili, aseguró hoy que Rusia está librando una guerra en territorio georgiano, luego de que aviones de Moscú atacaran una base aérea en las afueras de Tsjinvali como respuesta al ataque de las fuerzas georgianas a la región separatista de Osetia del Sur.

"Rusia está librando una guerra en nuestro propio territorio", dijo Saakashvili en una entrevista con la cadena de noticias estadounidense CNN, a la vez que pidió "la ayuda de todo el mundo" para detener el proceso bélico.

Georgia lanzó hoy una ofensiva militar contra la región separatista pro rusa de Osetia del Sur y denunció bombardeos de represalia rusos, en una escalada que ha puesto a esa región del Cáucaso en una guerra general.

Al menos 15 civiles murieron a causa de los combates y los ataques aéreos georgianos en Tsjinvali, la capital de Osetia del Sur, que en unas horas quedó ""casi totalmente destruida", según refirió el comandante de las fuerzas rusas de mantenimiento de la paz, Marat Kupajmetov, citado por la agencia rusa Interfax.

Un portavoz del Ministerio georgiano del Interior dijo que las fuerzas leales a Tiflis habían tomado control de la capital osetia, pero tanques y blindados rusos habían ingresado a Tsjinvali, en las últimas horas, haciendo retroceder a las tropas georgianas.

"Corredor humanitario"

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) pidió que se abra un ""corredor humanitario" para evacuar a los heridos de los combates.

Un oficial georgiano denunció por su lado que la aviación rusa bombardeó en represalia una base militar georgiana cerca de Tiflis (oficial georgiano) y que dos aviones rusos fueron derribados sobre territorio georgiano.

La televisión georgiana había dado parte previamente de bombardeos rusos en Gori, negados por un portavoz de la Cancillería rusa.

El presidente de Georgia, Mijail Saakashvili, anunció la ""movilización total" para hacer frente a una ""intervención militar de gran envergadura" y exigió que Rusia ""detenga los bombardeos" de ciudades georgianas.

Testigos citados por las agencias rusas refirieron que una columna militar rusa ingresó en Osetia del Sur.

Un periodista vio a unos cincuenta tanques y camiones con tropas y material militar dirigiéndose desde Vladikavkaz, capital de la república rusa de Osetia del Norte, hacia Osetia del Sur.

""Si se confirma que tropas y armas rusas ingresaron a Georgia, significa que estamos en estado de guerra con Rusia", dijo el secretario del consejo nacional de seguridad georgiano, Alexander Lomaia.

Putin con Bush

El primer ministro ruso, Vladimir Putin, le dijo al presidente estadounidense, George W. Bush, que hay voluntarios rusos dispuestos a combatir a las fuerzas georgianas en Osetia del Sur y que sería ""difícil retenerles", informaron fuentes rusas en Pekín, donde ambos dirigentes participan en la inauguración de los Juegos Olímpicos.

El presidente ruso, Dimitri Medvedev, advirtió por su lado que Rusia no dejará ""impune" la muerte de sus ciudadanos en Osetia del Sur.

"Anoche, las tropas georgianas cometieron en Osetia del Sur un acto de agresión contra las tropas rusas de paz y la población civil", señaló.

La mayoría de los 70.000 habitantes de Osetia del Sur tienen pasaporte ruso y Moscú brinda apoyo a los separatistas de ese territorio que a inicios de los años '90 se proclamaron independientes de Georgia.

La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (Opsce) pidió el cese inmediato de las hostilidades y anunció el envío de un emisario especial, el finlandés Heikki Talvitie, para calmar los ánimos en la región.

El consejo permanente de la Opsce mantendrá hoy mismo en Viena una reunión extraordinaria para analizar la situación en el Cáucaso.

El Consejo de Seguridad de la ONU manifestó en la madrugada del viernes su preocupación por el conflicto, pero sin lograr consenso para votar una declaración promovida por Rusia que reclamaba el fin de la violencia.

Rusia comete una ""agresión militar" en nuestro territorio, denunció la canciller Ekaterine Tkeshelashvili, que llamó a los líderes mundiales a ayudar a frenar esa intervención enviando un ""mensaje claro" a Rusia.

Sin acuerdo en el Consejo de Seguridad

El Consejo de Seguridad de la ONU manifestó esta madrugada su preocupación por el conflicto en el enclave separatista de Osetia del Sur, en Georgia, pero sin lograr consenso para votar una declaración promovida por Rusia reclamando el fin de la violencia.

""Lamentablemente, no ha sido posible todavía acordar una declaración del Consejo de Seguridad sobre este tema", dijo la representante británica Karen Pierce, al terminar una reunión de emergencia convocada por la delegación rusa.

""Esperamos que sea posible en los próximos días", agregó. ""Pero la falta de una declaración" no debería ""ser tomada como una señal de que el Consejo de Seguridad no está comprometido con este tema", indicó.

La frustrada declaración que discutieron los 15 miembros del Consejo de Seguridad expresaba ""seria preocupación por la escalada de violencia" y llamaba a ambos bandos a ""detener el derramamiento de sangre sin demora y renunciar al uso de la fuerza".

La reunión del Consejo de Seguridad a puerta cerrada fue convocada por Rusia, luego de que Georgia lanzara un ""asalto" a la república separatista de Osetia del Sur para ""restaurar el orden constitucional".

Tras más de dos horas de negociaciones, los integrantes de la máxima instancia de la ONU fueron incapaces de llegar a un acuerdo.

De acuerdo con el embajador ruso, Vitaly Churkin, el tema clave en litigio era ""la reticencia" de algunos miembros del Consejo de Seguridad a aceptar una referencia a ""renunciar al uso de la fuerza".

El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, afirmó hoy tener noticias de que había habido ""escenas de limpieza étnica" en Osetia del Sur, la república separatista pro rusa de Georgia, donde Tiflis lanzó una operación militar esta madrugada.

""Hemos oído hablar de limpieza étnica en algunos pueblos de Osetia del Sur", declaró Lavrov durante una intervención retransmitida por la televisión. ""El número de refugiados está aumentando. Hay una amenaza de crisis humanitaria", añadió el jefe de la diplomacia rusa.

Una ciudad virtualmente en ruinas

Tanques georgianos penetraron hoy en la capital de la separatista región de Osetia del Sur, Tsjinvali, que ha quedado prácticamente destruida, según el comandante de las tropas de paz rusas.

"Hay carros de combate georgianos en Tsjinvali, y luchas encarnizadas por toda la ciudad", aseguró el general Marat Kupajmetov, comandante de la fuerzas de paz rusas destacadas en Osetia del Sur.

Kupajmetov añadió que "como resultado del cañoneo de Tsjinvali con armas pesadas durante muchas horas, la ciudad ha sido prácticamente destruida".

"En varias horas, la ciudad quedó prácticamente destruida, muchos edificios yacen en ruinas. Falta agua, no hay electricidad ni luz y apenas funciona la comunicación telefónica", dijo Kazbek Fríev, comandante del batallón oseta de las Fuerzas Mixtas de Paz en Osetia del Sur, a la agencia RIA-Novosti.