El ministro de Asuntos Estratégicos de Brasil, Roberto Mangabeira Unger, dijo hoy que el Escudo de Defensa propuesto por el gobierno de Lula da Silva no tiene que ver con la reactivación de la IV Flota estadounidense sino con un vínculo entre "desarrollo del país y la defensa".
"No tenemos enemigos en América del Sur ni en cualquier país del mundo, nuestro trabajo tiene como foco el futuro de Brasil", declaró el funcionario, citado por la agencia italiana de noticias Ansa.
Este Plan Estratégico es, según el ministro brasileño, "una iniciativa sin precedentes en nuestra historia" que permitirá una "calificación amplia de las fuerzas armadas, por medio del vínculo indisoluble entre desarrollo del país y la defensa".
Destacó que el Estado debe "asegurarles" a las empresas "la continuidad de las compras públicas" para garantizar la creación de un "complejo" industrial militar.
El Escudo de Defensa propuesto comprende refuerzos en la presencia naval en el Océano Atlántico, y militar en la Amazonia, y está incluido en el nuevo plan estratégico que será presentado al presidente Da Silva el 7 de setiembre, Día de la Independencia.
"Si Brasil quiere trazar un camino propio en el mundo, también precisa tener un escudo contra amenazas e intimidaciones, es eso lo que está en discusión en nuestra propuesta de estrategia de defensa", consignó Mangabeira Unger.
Sin embargo, funcionarios del gobierno y legisladores brasileños han manifestado su preocupación por la reanudación de los patrullajes de la IV Flota. El ministro de Defensa, Nelson Jobim, viajó el mes pasado a Estados Unidos donde se reunió con los jefes del Comando Sur.