De la corresponsalía de Rosario
La Empresa Mixta de Transporte Rosario SA (EMTR), la firma que integran la Municipalidad y otras compañías de la ciudad de Rosario, estuvo parada desde el domingo a la mañana hasta hoy al mediodía, luego de que los choferes de las líneas que pertenecen a esa sociedad decidieran realizar una medida de fuerza, en repudio a la agresión que sufrió un conductor en un supuesto intento de robo.
Juan Vélez, chofer de la Línea 127, fue agredido el domingo a la madrugada en un presunto intento de robo. El conductor sufrió un corte profundo en una de sus manos, y esta mañana estaba previsto que lo operaran en el sanatorio Laprida. Vélez tiene una lesión en el dedo pulgar que compromete un tendón. Su recuperación requerirá al menos de 90 días.
Según relató el delegado gremial César Banchero, el chofer fue atacado por un extraño en el baño de la punta de línea, ubicada en Sánchez de Bustamante y Crespo. Al parecer, el agresor estaba en el interior del sanitario y cuando la víctima ingresó, lo atacó y le cortó una de sus manos tras lo cual huyó. Aunque, malherido, Vélez volvió al colectivo y manejó hasta el galpón de la empresa, situado en Ricchieri y 24 de Septiembre, donde fue auxiliado por sus compañeros.
Después de que trascendiera la agresión al chofer, sus compañeros decidieron con el aval de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) llevar adelante un paro hasta hoy al mediodía, cuando se reúnan con las autoridades municipales. Los conductores reclaman mayor seguridad y piden protección policial.
Hoy los choferes que se desempeñan en la Empresa Mixta de Transporte Rosario SA iban a mantener una reunión con autoridades del Ente del Transporte Rosario, de la Secretaría de Servicios Públicos de la Municipalidad y de Seguridad Comunitaria de la provincia. También participarán la policía y representantes de la empresa La Mixta. Tras esta instancia, realizarán una asamblea para evaluar la situación.
El secretario general de la UTA, Manuel Cornejo, consideró que la inseguridad que experimentan los colectiveros no se resuelve "con un policía en cada una de las unidades". El sindicalista puso en duda la solución de este problema, ya que según expresó "cada vez es más complicado trabajar en la calle".