Desde hoy, comienza a regir la fotomulta a conductores que crucen el semáforo en rojo. El municipio buscará acordar con las estaciones de servicio que no vendan combustible a motociclistas que no tengan casco. Propiciará que los bares entreguen bonos de taxis a los conductores que estén alcoholizados. Crearán un registro de bicicletas.
De la redacción de El Litoral
Tres ejes de acción tiene el plan integral de seguridad vial que el intendente Mario Barletta presentó esta mañana, con el objetivo principal de disminuir los accidentes de tránsito y las condiciones que posibilitan su ocurrencia: Infraestructura y servicios; Jerarquización del control y Educación y comunicación.
Cada uno de ellos supone la implementación gradual de importantes novedades en materia de tránsito. Entre hoy y mañana comenzará a regir el sistema de detección electrónica de faltas graves: la fotomulta. Es decir, la captación de imágenes de automóviles, motos y otros vehículos que violen la luz roja de los semáforos, equipamiento ubicado en 10 esquinas cargadas de tránsito vehicular.
Algunos inconvenientes técnicos demoraron la puesta en funcionamiento de este sistema creado por especialistas de la Universidad Tecnológica Nacional y que constituirá una prueba inobjetable para la Justicia de Faltas Municipal.
El secretario de Control, Cornellio Collins, aseguró que "en estos últimos días se han tomado unas 500 fotografías de infractores, que serán multados como corresponde".
Multas más severas
En materia de control, los cambios incluyen la firma de acuerdos con concesionarias y estaciones de servicio para propiciar la venta responsable, es decir, para que las primeras vendan motocicletas con casco y las segundas no expendan combustible a los vehículos sin las condiciones mínimas de seguridad, como casco y documentación.
Además se impulsa la aplicación de multas más severas, a partir del proyecto de reformulación de penalidades, ya enviado al Concejo Municipal para actualizar los montos, aumentando de manera considerable la sanción de las conductas peligrosas, actualizando de los criterios de aplicación general de multas, con elevación del piso de los valores mínimos.
El estacionamiento medido también traerá novedades. El municipio analiza la posibilidad de incorporar nuevo equipamiento con el fin de sustituir las ticketeras por parquímetros digitales con tarjetas.
"La instancia de fiscalización y control se entiende asociada a una mejor preparación del personal", por eso se incorporará más personal y se continuará capacitando a los actuales inspectores. Uno de los objetivos es avanzar hacia la descentralización del control de tránsito, de manera tal que la ciudad cuente con brigadas zonales permanentes que atiendan toda la problemática que en esta materia presente el área asignada.
Se incrementarán los controles especiales que se vienen realizando junto con la Justicia, la Policía Provincial y la Gendarmería Nacional, tendientes a preservar la integridad de conductores y transeúntes impidiendo el tránsito de vehículos conducidos por personas que han ingerido alcohol, o de quienes no usan casco protector; y también actuando severamente sobre quienes conducen a velocidades peligrosas, causa principal de los accidentes de tránsito. Se trata de dispositivos múltiples, rotativos y simultáneos, de control de alcoholemia, uso de casco en motos, control de picadas, entre otros.
Infraestructura y servicios
La reformulación de intersecciones críticas de la ciudad, introducirá cambios en los siguientes puntos: Av. Perón y Autopista AP01 calle Iturraspe; Ruta 168 (tramo viaducto Oroño y Barrio El Pozo); adecuación de calle Cruz Roja Argentina y acceso al Club El Quillá y calle 3 de Febrero; reformulación geométrica de la rotonda que vincula Av. López y Planes, Av. Freyre y Bv. Pellegrini; readecuación de la intersección en cabecera oeste del Puente Colgante; modificación de ramas de aceleración de ingresos a Av. 7 Jefes.
En materia de semaforización y reductores de velocidad, se licitará la incorporación de la avenida Aristóbulo del Valle a la central de control de tránsito que funciona en la Base Pellegrini; y se colocarán nuevos reductores de velocidad en distintos puntos de la ciudad, acordes a la restricción de velocidad que se pretende regular, la jerarquía de las arterias y las condiciones urbanísticas del entorno.
En las escuelas se colocarán vallas de seguridad peatonal en todos los establecimientos que por su ubicación afecten la seguridad de docentes y alumnos, se pintarán de sendas peatonales y de señalización vertical y se colocarán reductores de velocidad.
Además, se estudian nuevos corredores de bicisendas y ciclovías con el objetivo de ordenar el tránsito de bicicletas y promover mayores niveles de seguridad para los ciclistas. Respecto de la penalización de sus conductores, Collins anticipó que "empezaremos con un sistema de registración especial para bicicletas que implique una suerte de patentamiento municipal simple, sin costo o con un costo muy exiguo, de manera de poder tenerlas localizadas y llevar adelante un control eficaz".
"Cambiemos de actitud"
El último aspecto del programa se basa en una fuerte campaña de educación y comunicación, orientada al niño, la transeúnte y a los jóvenes. El lema será "Cambiemos de actitud" y plantea cuatro instancias: la firma de un manifiesto por la seguridad vial por parte de empresas, instituciones y asociaciones; la creación de un Foro por la seguridad vial; promover la reflexión sobre la problemática; y procurar un cambio de actitud en los ciudadanos, con intervenciones públicas de alta visibilidad que pongan en evidencia las conductas riesgosas.
Para comenzar, esta mañana, representantes de 15 establecimientos educativos firmaron un acuerdo con el intendente a los fines de orientar la intervención en infraestructura y servicios de la Municipalidad en correlación con la implantación de un programa de educación vial en la escuela.
Más adelante se pondrá en marcha el programa Detective del tránsito que busca construir seguridad vial con niños y adolescentes de manera que desde su actividad escolar se transformen en "líderes" como detectores de situaciones de riesgo y "agentes de cambio".
El programa "Noche responsable" propone convocar a las empresas de bares, restaurantes y salones de fiesta así como a las de taxis y remises, para que se sumen al programa promoviendo conductas responsables en los ciudadanos tendientes a reducir los riesgos de accidentes de tránsito. Bajo el lema "Tomaste alcohol, tomate un taxi" se buscará hacer acuerdos para la entrega de bonos para uso de taxis o remises a los asistentes de bares y restaurantes, asociadas a la promoción de la conducción sin alcohol; y la designación de un conductor responsable. Además se promoverá la autoconcientización del conductor sobre sus capacidades para conducir, a través de la instalación de alcoholímetros en estos lugares de esparcimiento.
Objetivos
Disminuir los riesgos de accidentes de tránsito y las condiciones que posibilitan su ocurrencia, tanto a nivel de infraestructura y servicios como en relación con las conductas y actitudes que los producen; mejorar los niveles de seguridad vial, planificando las intervenciones públicas en infraestructura, servicios y control de manera acorde con el mapa de accidentes y zonas críticas de la ciudad; promover una cultura ciudadana asentada en el respeto a la vida, el cumplimiento de las normas y la asunción de nuevas prácticas de convivencia y de conductas seguras en la vía pública; articular las acciones de educación vial que llevan adelante organismos provinciales y numerosas instituciones de la ciudad en una sinergia que potencie el cambio de actitudes hacia una mejor calidad de vida.