Sucesos: SUCE-01
Ruta de la efedrina
EE.UU. niega que el prófugo sea un integrante de la DEA
La Embajada norteamericana en la Argentina aseguró que las credenciales que mostraba Hernán De Carli son falsas. El sospechoso estaría ahora en Miami. Parte de su familia estuvo demorada por la policía, pero todos recuperaron la libertad.

Télam/DyN

Hernán De Carli, cuya mansión fue allanada en la causa en la que se investiga la ruta de la efedrina y se encuentra prófugo, no es un agente de la Agencia Antinarcóticos de los Estados Unidos (DEA), informó la embajada de ese país en esta capital.

"Esta fotografía muestra una auténtica placa identificatoria utilizada por funcionarios de la Agencia Antinarcóticos de EE.UU. (DEA). Tal como los medios han informado, la Embajada de EE.UU. confirma que el señor De Carli no trabaja ni trabajó nunca para la DEA", señaló un comunicado difundido por la sede diplomática.

La embajada difundió una foto de la verdadera placa, luego de que en la lujosa casa de De Carli ayer se encontrara otra que sería falsa.

En el marco de la causa que lleva adelante el juez federal de Campana Federico Faggionatto Márquez, declaró un testigo de identidad reservada y sus dichos derivaron el martes en un allanamiento en una mansión situada en el barrio Los Tilos de General Rodríguez, valuada en unos dos millones de dólares.

La policía no encontró allí a De Carli, quien estaría en Miami, pero detuvo en su casa a sus padres, su hermano y una amiga, que ya recuperaron la libertad, y a una funcionaria de General Rodríguez; un policía y un ex penitenciario que siguen presos.

Además, en la casa se hallaron 10 armas, una camioneta con patente norteamericana, credenciales y uniformes del grupo de Swat y la placa de la DEA.

Pero el abogado de las viudas de las víctimas del triple crimen de General Rodríguez, Miguel Ángel Pierri, dijo que cree que los tres hombres estuvieron "cerrando un negocio" en esa mansión.

No descartó, incluso, que hayan sido retenidos y hasta atacados en algún sótano o habitación de esa lujosa residencia.

Nuevo hallazgo

Mientras tanto, entre 700 kilos y una tonelada de cocaína que iban a ser traficados a España fueron secuestrados en un allanamiento a un galpón situado en el partido bonaerense de San Miguel, donde se detuvo a dos hombres mexicanos que habían arribado hace un mes, uno de los cuales tenía orden de captura de su país.

Luego, la policía realizó otros cuatro allanamientos en la Capital Federal donde detuvo a un hombre boliviano. Los operativos fueron realizados por la Delegación de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas de Zárate-Campana, al mando del comisionado Honorio Rodríguez y efectivos de Drogas Peligrosas de la Policía Federal, en un galpón situado en la calle Íllia (ex ruta 8) al 2300, en pleno centro de San Miguel. Si bien se detuvo a dos mexicanos, los voceros indicaron que la banda estaba conformada por grupos de esa nacionalidad y de colombianos.

En tanto, ayer por la tarde realizaron allanamientos en la Capital Federal -dos en el barrio de Floresta, otro en el microcentro y el restante en Las Cañitas-, en los que se detuvo a un hombre de nacionalidad boliviana.

Los procedimientos se llevaron a cabo por orden del juez federal de Tres de Febrero, Juan Manuel Culotta, y su par Federico Faggionatto Márquez, de Zárate-Campana, que investiga a una banda de narcos mexicanos que fabricaban drogas en base a efedrina.

El núcleo de la investigación estuvo a cargo de la Policía Federal en el marco de una causa que lleva adelante Culotta, iniciada hace dos meses a partir de datos aportados por la Drug Enforcement Agency (DEA), la oficina antidrogas estadounidense.

El jefe de Operaciones Federales de Drogas Peligrosas de la Federal, comisario Miguel Ángel Castro, indicó que el informe daba cuenta "de dos organizaciones narcocriminales, la primera de origen colombiano y la segunda, mexicano".

Según el jefe policial, los colombianos introducían al país la droga, proveniente de Bolivia y de Perú, y luego se la entregaban a los mexicanos, que a su vez tenían la misión de llevarla camuflada a España.

Si bien habría una conexión entre la banda y la causa que lleva adelante Faggionatto Márquez, no se encontró relación con el triple crimen de Sebastián Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina, según el comisario Castro.

La droga estaba en 700 paquetes que, en principio daría un peso total de 700 kilos, aunque concluido el pesaje podría ascender a una tonelada y su valor en Europa ascendería a cerca de dos millones de euros.

Careo.

Ricardo "Ricky" Martínez fue sometido ayer a un careo con el mexicano Rodrigo Pozos Iturbe, en el que insistió en haber presenciado un encuentro entre éste y Marcelo Tarzia, el argentino arrestado el 18 de julio pasado cundo se desarticuló un laboratorio para fabricar drogas sintéticas en base a efedrina. El careo entre Martínez e Iturbe se desarrolló durante unos 50 minutos en el despacho del juez federal de Zárate-Campana, Federico Faggionatto Márquez, y ambos se mantuvieron en sus dichos, ya que Pozos Iturbe negó conocer a Tarzia.

Penitenciario detenido

El penitenciario detenido en el marco de la causa por la ruta de la efedrina negó que en la mansión de General Rodríguez se realizaran reuniones con mexicanos y dijo desconocer a Leopoldo Bina, una de las víctimas del triple crimen.

Al ser interrogado como imputado, el agente Miguel Angel Lombarda admitió no obstante haber acompañado a realizar un viaje de negocios a Paraguay a su amigo Hernán De Carli, el dueño de la mansión, que está prófugo en la causa, informaron fuentes judiciales.

Lombarda es una de las tres personas que quedaron detenidas el miércoles último luego de una serie de allanamientos realizados por el juez federal de Campana Federico Faggionatto Márquez.