Está en el límite entre Los Hornos y Jardín Mayoraz

Rejas para una ermita

En casi 10 años, es la tercera vez que la dañan. Los vecinos reclaman que cuiden el lugar, y le den el respeto que merece. No saben aún quién fue el autor del incidente.

1_fr.jpg

Fue construida hace 10 años. Rompieron el vidrio que protegía a la Virgen.

Foto: Flavio Raina

De la redacción de El Litoral

[email protected]

Un grupo de vecinos de barrio Jardín Mayoraz manifestó su malestar tras descubrir que fue agredida la ermita ubicada en Ángel Cassanello y Pje. Rodríguez, en el límite entre los barrios Los Hornos y Jardín Mayoraz. El hecho sucedió hace una semana, pero aún no pudieron repararla. Como no es la primera vez que sucede -ya la dañaron tres veces-, analizan la posibilidad de resguardarla tras las rejas.

Según describieron a El Litoral, autores desconocidos rompieron el vidrio que recubría la imagen de la Virgen María Inmaculada. La ermita fue construida hace 10 años por Benjamín Emilio Basilio, un residente del lugar, de 63 años. “Hice un trabajo de hormiga”, dijo Basilio, en comunicación con el diario. Este vecino limpió el lugar para hacer la plazoleta, donde se ubicaría luego la imagen de la Virgen.

Para reunir los materiales de construcción, juntaron fondos entre los vecinos. Además, la Municipalidad les brindó ayuda, para construir una parte de la ermita.

La construcción fue bendecida el 7 de diciembre de 1999 (día en que fue terminada), por el entonces cura párroco de la iglesia Don Bosco, Padre Elvio Brisaboa, quien aprecia mucho este lugar y visita de vez en cuando la imagen, que se encuentra a cinco cuadras de la parroquia que tenía a su cargo hace casi diez años.

Punto de encuentro

Los vecinos se reúnen en la plazoleta el último día de cada mes, y realizan una novena a la Virgen. Además, a diario la gente se acerca a rezar el Santo Rosario, junto a la imagen de María Inmaculada.

Si bien la ermita no es conocida por mucha gente, “las personas que transitan por el lugar se persignan como una señal de respeto y saludo”, aclaró Benjamín Basilio, que además de haber construido la ermita, y protegerla, siente un gran dolor luego de verla en estas condiciones.

Para proteger a la Virgen mediante rejas, los vecinos están organizando una rifa para el próximo mes, que incluso intentarán vender entre residentes de barrios cercanos, y familiares. La reja se hará con una estructura de caño, con metal desplegado, y tendrá 2,40 metros de alto.