Panorama agropecuario

Las formas y el fondo

Mientras la economía global abunda en señales negativas para la economía doméstica, el Gobierno nacional responde a los productores con montajes propios de campaña electoral.

CAMPO_P3.jpg

En Leones, Córdoba una masiva convocatoria de productores reflejó el malestar que todavía persiste en el sector rural

FOTO: DYN

Carlos Petroli/CMI contenidos.

El gesto de distensión que propusieron una semana atrás los referentes del agro bien recibido por diferentes ámbitos, incluidos del oficialismo quedó empantanado rápidamente.

Apenas unas horas antes de que el vocero de la Casa Rosada, el miércoles casi de trasnoche, anuncie el contenido de un diálogo secreto entre la Rural y el ministro Julio De Vido, la Mesa de Enlace había salido a reprochar “dilaciones inexplicables” en una convocatoria que, al menos a la luz pública y de manera formal, tardaba en materializarse.

La Rural debió salir a dar explicaciones sobre las gestiones y conversaciones que Luis Biolcatti, acompañado de uno de los técnicos de la SRA, había mantenido con De Vido y el secretario de Agricultura, Carlos Cheppi, desde los primeros días de enero.

La entidad admitió esos contactos, que fueron “con pedido de confidencialidad por parte de los funcionarios que participaron, a fin de encauzar una negociación”.

“Sin embargo, el Gobierno nacional estableció precondiciones insuficientes para ese diálogo”, explicó la Rural antes de ratificar su apoyo a la postura esgrimida por sus pares de Coninagro, CRA y la Federación Agraria.

Desaveniencias

La rápida lectura que hicieron los referentes agrarios fue de que Biolcatti concurrió al convite oficial para agilizar los puntos más candentes de la agenda rural, y que luego el Gobierno utilizó esa negociación secreta para dividir a la Mesa de Enlace.

Biolcatti, ayer, se mostró decepcionado por la jugada oficial y la falta de avances en la agenda que fue a buscar en su incursión reservada.

Las desavenencias, que ayer desembocaron en el anuncio de un nuevo paro comercial (el sexto de la serie con Cristina) que irá hasta el próximo martes al mediodía. Un rato después debería concretarse la reunión con la ministra de Producción, Débora Giorgi, a la que los dirigentes aceptaron concurrir.

La guerra mediática y de comunicados transcurrió en una semana con otras malas noticias: los precios fueron golpeados por el agravamiento de la crisis internacional y la soja perdió más de 100 pesos por tonelada en pocos días.

Pero no sólo el agro presiona para que el Gobierno no dilate la confrontación con los productores, con montajes que tienen cada más tufillo de campaña electoral antes que la búsqueda de encarrilar el aparato productivo.

El flanco industrial

La Unión Industrial Argentina (UIA) que no ocultó su alivio el jueves anterior cuando los líderes ruralistas pusieron el freno en una nueva protesta quedaron ahora igualmente descolocados.

La constitución del Consejo Económico y Social fue el canal que habían imaginado los líderes de la UIA como camino de salida, también con un guiño de la CGT de Hugo Moyano durante el reciente viaje de Cristina Fernández a España. Pero los referentes de la industria volvieron a indicar que no serían de la partida si en esa mesa no se sentaba el sector agropecuario.

Claro que antes de llegar a este punto, las entidades del agro presionadas desde el interior de sus bases, exigieron al Gobierno medidas inmediatas de tipo comercial, financiero y tributario (incluido un retoque de las retenciones).

 

La guerra mediática y de comunicados transcurrió en una semana con otras malas noticia

 

///

en relación

Semana agitada

El pasado miércoles, en la ciudad de Rafaela, la flamante “comisión de conflicto” (amalgama de autoconvocados y Mesa de productores) decidió un plan de acción que dependerá del resultado de las últimas reuniones que se mantendrán hasta el lunes con la industria. Allí, los productores tamberos pedirán percibir un precio cercano al peso.

“Con los paros el campo siempre salió ganando” y “primero hay que pegar y después negociar” fueron, a decir por los aplausos que despertaron en la reunión, las apreciaciones que mejor reflejaron ese estado de ánimo, aunque después, los dirigentes se encargaron de hacerles ver que el momento exige manejarse con inteligencia “organizando la protesta” para no dar un paso en falso que dispare el reproche de la sociedad. “Nosotros no podemos apretar a la parte comercial, que se queda con la gran tajada, así que tenemos que hacerlo contra lo que podemos, que es la industria.

Después, que los industriales le reclamen a la parte comercial y a Moreno”, dijo en su discurso uno de los tamberos resumiendo la estrategia. Por su parte, los productores autoconvocados del norte provincial esperarán a la vera de la ruta el resultado de la reunión de la Comisión de enlace con la ministra Giorgi. “Si sale mal, va a salir todo el mundo a la ruta”, le confesó un productor a Campolitoral, en referencia al apoyo de otros sectores, como los camioneros, comerciantes y demás fuerzas vivas de los pueblos afectados por la crisis.