En el Salón de Ginebra

El 308 sustituyó ya en sus variantes berlina y SW al 307. Se aprovechan las cualidades de su exitoso antecesor, pero impone su renovación generacional, su modernidad y su fuerte personalidad.

De la redacción de El Litoral

[email protected]

El Peugeot 308 CC entró en escena. A finales de noviembre de 2008, más de 650.000 cupés cabriolet habían sido fabricados para disfrute de los amantes del “arte de vivir”. Esta cifra convirtió a la marca del “León” en el líder mundial de los cabrio. Desde el lanzamiento del 307 CC en 2003, la estructura del mercado de los automóviles descapotables del segmento M1, sufrió notables modificaciones con un desarrollo importante de la oferta de modelos con techo rígido retráctil en detrimento de los de capota de lona, menos polivalentes y más vulnerables. El 308 ha sustituido ya, en sus variantes berlina y SW, al 307, aprovechando las cualidades de su exitoso antecesor pero imponiendo su renovación generacional, su modernidad y su fuerte personalidad. Con sus cuatro plazas reales, el 308 CC mantiene las cualidades de la gama 308, pero además capitaliza el espíritu de su antecesor y disfruta de toda la experiencia de Peugeot en la realización de cupés cabriolet.

Ávido de seducir a su clientela de auténticos expertos poniendo énfasis en su “carácter sensible”, pero con un toque de impertinencia que lo lleva a presentarse como un “cabriolet capaz de jugar con las estaciones del año”, el 308 CC se convirtió en una de las estrellas del Salón de Ginebra.

Con carácter

Con un equilibrio de sus volúmenes particularmente trabajado, tanto en configuración cupé como cabrio, el 308 CC se presenta como una moderna y dinámica escultura, con una apariencia musculosa, sobre la que juega la luz y como un vehículo excepcional, de fuerte temperamento que se codea con las cupés cabriolet de gama alta. Bajo, con un parabrisas muy aerodinámico, un diseño agresivo del parachoques delantero, un lateral generosamente esculpido con un junquillo cromado que destaca la parte inferior de los cristales laterales, unos pasarruedas muy marcados, un original alerón sobre el baúl y sus espectaculares faros traseros de leds rojos, que utilizan la tecnología de cortina de luz roja, el 308 CC rebosa personalidad.

Un innegable espíritu de “Gran Turismo” emana de su exclusivo habitáculo.

Los asientos delanteros envolventes disponen, en la base de los apoyacabezas, de la parrilla del sistema “Airwave” para calentar la nuca. Los asientos traseros retoman el diseño distintivo de los delanteros y ofrecen dos plazas excepcionalmente acogedoras para tratarse de un cabrio. La exclusividad se transmite, además, a cada una de las plazas mediante el diseño elegante de las contrapuertas y de los tiradores metalizados que evocan al mismo tiempo dinamismo y robustez.

El diseño deportivo del volante, el tratamiento específico de la instrumentación y la consola central lacada en negro, completan la ambientación interior. Vestido de sport o de “alta costura”, el 308 CC dispone de tejidos textiles dinámicos, de tapicería de cuero e incluso de un interior de cuero integral. Éste último, exclusivo del 308 CC en su segmento, envuelve por completo el habitáculo.

Techo retráctil

En el centro de la escenografía, el techo retráctil totalmente automático permite, en función de la elección del conductor, configurar una dinámica cupé o un elegante descapotable. Los 20 segundos de su cinemática se retransmiten en la pantalla a color escamoteable. Una sorprendente capacidad para jugar con las estaciones. Prolongar el bienestar propio de los descapotables incluso cuando hace frío, anticipar la primavera, disfrutar los paisajes nevados que centellean bajo el sol, el 308 CC hace posible cualquier deseo. Peugeot ofrece este placer a los ocupantes del vehículo bajo el efecto conjunto de su arquitectura protectora, de su climatización inteligente que adapta su funcionamiento a la configuración cabriolet, de sus asientos calefactables, de su “windstop” y de su sorprendente sistema “Airwave”, una auténtica cascada de aire caliente cuya temperatura, caudal y orientación son regulables y que se encuentra situado en los apoyacabezas delanteros.

Hegemónico

A bordo del 308 CC reina una gran homogeneidad y se consiguió eliminar toda vibración que pudiera afectar a la dirección, la retrovisión y el confort de los asientos. El resultado es el fruto de la estudiada disposición de los refuerzos estructurales, de la presencia de soportes de goma y de la acción de los tirantes. En síntesis, ofrece una estructura muy rígida y un remarcable comportamiento vibratorio que demuestra el “savoir-faire” de Peugeot en el campo de las cupé cabriolet.

Líder mundial de los “cabrio”. La terminal francesa dio a conocer este 308, al cual sus directivos evalúan si llegará a la Argentina para 2010. Foto: Prensa/Peugeot

Moderna y dinámica escultura, hacen que el 308 sea seductor para el potencial usuario. Foto: Prensa/Peugeot

3008. Compacto y volumétrico es este modelo, que llegó para explorar nuevos mercados. Foto: Prensa/Peugeot