River transita un momento caótico
El alma de la alarma
Redacción de El Litoral
Télam
La eliminación de River Plate en la Copa Libertadores desató una tormenta en la entidad de Núñez, en lo deportivo, porque no puede salir a flote, y en lo institucional, por la cercanía de las elecciones, el club se transformó en un todos contra todos.
Desde lo estrictamente futbolístico, la derrota ante Nacional de Paraguay acentuó una crisis deportiva que River padece hace varias temporadas, con jugadores que demostraron no estar a la altura de la camiseta y que cumplirán su ciclo a mitad de año.
Esta eliminación es comparable con las anteriores ante Boca, contra Caracas, en 2007, donde también se despidió en primera ronda. Algo similar vivió en la pasada edición de la Copa Libertadores al caer contra San Lorenzo de Almagro, que quedó marcada a fuego junto como la peor campaña de la historia del club, con Diego Simeone al frente en el Apertura 2008, y que opacó el título conseguido en el anterior torneo.
Hoy, en River muchos marcan como el principal problema la conformación del plantel profesional, siendo los últimos equipos con jerarquía los de Manuel Pellegrini y Leonardo Astrada. En el medio pasaron Reinaldo Merlo y Daniel Passarella, figuras emblemáticas como futbolistas, aunque en sus ciclos con el presidente José María Aguilar no tuvieron éxito.
Ahora, el entrenador Néstor Gorosito empezaría a tambalear en el cargo si no consigue una victoria ante Gimnasia de Jujuy, algo que lo dejaría lejos de la pelea por el título. Otra arista es que “Pipo” solamente es del gusto de Aguilar, lo cual se supo desde el primer momento y el presidente de River lo querrá sostener más allá de los resultados porque lo eligió como el entrenador para terminar su ciclo como máximo dirigente del club.
Comparaciones
En estos años, River pasó de Fernando Cavenaghi a un Cristian Fabbiani fuera de estado, al que le alcanzó con ser hincha del club para ser un efímero ídolo; de Andrés D’Alessandro a un Diego Buonanotte que se desdibujó después del campeonato conseguido con Diego Simeone; de Santiago Solari a Rodrigo Archubi y de Marcelo Gallardo, que retornó por amor a la camiseta, pero lejos de su pico de rendimiento, por mencionar algunos casos.
En el arco, la venta de Juan Pablo Carrizo generó un karma bajo los tres palos, puesto en el que se incorporó Mariano Barbosa, pero que a esta altura “Pipo” Gorosito ya probó a sus tres arqueros disponibles en diez fechas.
¿Elecciones anticipadas?
La crisis en el campo de juego se trasladó al ámbito de los dirigentes del club de Núñez, porque en los malos momentos aparecen las figuras del pasado y los opositores en un año de elecciones clave para el futuro de la institución.
Inclusive llegaron a trascender rumores de elecciones anticipadas y no en diciembre. Las banderas de los candidatos cada vez son más y parece que se pelean para ver quien hace una campaña más elaborada y costosa pidiendo “salir de este momento y buscar lo mejor para River”.