Se realizó una nueva UEDAP en San Francisco

Más que un lote experimental, una fábrica de información

Las Unidades Experimentales Dekalb de Alta Producción permiten monitorear las últimas tecnologías en maíz en parcelas preparadas a tal efecto. Nuevos materiales que implican nuevos desafíos.

Campolitoral

Enviados especiales a San Francisco

Las UEDAP son demostraciones en el campo en donde se puede apreciar el manejo y el comportamiento de los cultivos, combinando el uso de herbicidas, maquinarias, fertilizantes y las más variadas tecnologías.

Esta nueva edición realizada en San Francisco, permitió relevar la gran cantidad de información que permiten monitorear las nuevas tecnologías para el manejo del maíz en sistemas de alto rendimiento e intensificados. En eso de manejar la captura y eficiencia en el uso de recursos de distintas regiones, las UEDAP significan una gran oportunidad de generar nuevos conocimientos.

Uno de los disertantes fue el Ing. Agr. Fernando Menéndez, quien pertenece a AACREA y al equipo de trabajo del prestigioso académico Emilio Satorre. En diálogo con Campolitoral, destacó que el objetivo del evento es probar nuevas tecnologías en manejo y genética, muchas de las cuales tienen incorporadas las últimas novedades, en el cultivo mismo y en el sistema de producción. “El maíz puede variar su superficie pero sigue siendo un elemento importante en el sistema de producción, sobre todo desde el punto de vista de la sustentabilidad del sistema. Las inversiones vienen por el lado de la biotecnología que aportan seguridad al cultivo”. Según este especialista, “tenemos cada ves más eventos que facilitan el control de insectos y malezas permitiendo hacer un repaso. La consecuencia brinda estabilidad a un cultivo que históricamente fue uno de los menos estables”.

Para el Agrónomo, no debe plantearse una competencia entre el maíz y la soja. “Vemos que estos cultivos se complementan. No es lo mismo hacer soja sobre soja o en EEUU donde hacen maíz sobre maíz, porque los rendimientos son menores”, agregó.

“Estamos probando en los ensayos cómo estos eventos responden en distintos ambientes, y vemos cómo impactan en el rendimiento del cultivo. El problema con el maíz es cuando se introducen otros factores que hacen que el precio no alcance. Con respecto al trigo uno escucha que hay menor intención de siembra, en parte por una sensación de incertidumbre por la exportación y por el clima con perfiles que no recargaron la humedad necesaria para sembrar”, finalizó.

La organización

La Ing. Agr. Rosana Tambornino fue, una vez más, la encargada del evento a nivel local. La especialista fue la encargada de organizar la segunda parte de los ensayos de los maices de segunda siembra. Lo demás ya fue cosechado, con distintos híbridos comerciales y precomerciales que se están probando. La siembra se hizo el 27 de diciembre en dos ambientes. Uno seco y con baja disponibilidad de nitrógeno. Se hizo un trigo fertilizado y se quemó antes de cosechar. El otro tiene un ambiente con más agua y nitrógeno y con barbecho. A todos se les aplicó la misma fertilización con distintas densidades. “Los resultados están a la espera de la cosecha, cuando haremos una estimación de rendimiento. Se analizan temas como el vuelco y las enfermedades. Aplicamos densidades normales de 75 mil plantas por hectárea con otra prueba de 90 mil plantas que tal vez es un exceso pero permite a elevar la planta. Al ser un maíz de segunda sembrado más tarde, las enfermedades pueden afectar la cosecha. En eso estamos, calculando la densidad que potencie las virtudes genéticas”, expresó.

Para la Ing. Tambornino, no se aconseja un maíz que no sea MG, protegido contra el barrenador del tallo. Por otro lado, el RR es otro adicional para combatir malezas. “El stax 2 presenta una ventaja de sinergismo en un volumen mayor de raíz. Tenemos un suelo con arcilla que si llueve está todo bien, pero si llueve poco el mismo suelo lo retiene y la planta no la toma, por eso un importante volumen inicial de raíz permite absorber mejor el recurso del agua”, agregó.

Trabajar juntos

Por último, los responsables de marketing de semillas de Monsanto destacaron la importancia del cereal y la apuesta a largo plazo de duplicar los rindes. “Esto no es una parcela experimental, es un generador de gran cantidad de datos e información. Para nosotros, desde el año 94, las UEDAP son la forma de mostrar los avances en el cultivo intercambiando experiencias de los productores, lo que permite ir ajustando los detalles. Es un centro de transferencia de tecnología en la que se comparte información trabajando juntos”. La empresa invierte entre U$S 700 y 1.000 millones por año en innovación en prácticas agronómicas y capacitación “porque las nuevas tecnologías requieren conocimiento y esto implica manejar herramientas presentes y futuras”, dijeron.

AACREA y AAPRESID volvieron a respaldar este nuevo evento a campo impulsado por las empresas líderes.

Fotos: Federico Aguer