Un fenómeno que la EPE observa desde octubre de 2008

La crisis bajó la demanda

industrial de energía

Las fábricas electrointensivas, en especial del sector metalmecánico, bajaron su consumo en los últimos 6 meses. Desde abril se nota una leve recuperación, que todavía no constituye una tendencia.

De la redacción de El Litoral

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El presidente del directorio de la Empresa Provincial de la Energía, Daniel Cantalejo, señaló que es en la demanda del sector industrial metalmecánico, donde más se nota la crisis la compañía estatal. Negó que la EPE vaya a resignar inversiones en 2009 (a las que ubicó en unos 200) millones y destacó que la empresa vive una etapa de “refundación”.

“Nosotros tenemos un termómetro muy particular sobre nuestros clientes, y que nos permite ver al final de cada mes cómo es la evolución de la demanda de energía. Vemos una sensible baja de la demanda desde octubre de 2008 en el sector de las industrias en todo el territorio provincial”, dijo Cantalejo.

El consumo de energía eléctrica “se verifica sobre todo en localidades y en zonas donde existe una fuerte presencia de industrias metalmecánicas, es el caso de Las Parejas, por ejemplo”, advirtió.

Al bajar la demanda industrial, “esto se traduce en menos ingresos para la EPE, menos recaudación, pero no hemos tenido que resignar obras, dentro del plan de inversiones que tenemos trazado para 2009. Esto nos llena de orgullo”, dijo y enumeró las 5 estaciones transformadoras que -como hoy en Santa Fe- ha inaugurado la EPE.

¿Cambio de tendencia?

“Notamos -siguió el titular de la empresa- que la baja de la demanda industrial fue mayor entre octubre y marzo. En abril, notamos una pequeña recuperación de la actividad, que se mantiene hasta hoy, por lo que es aún prematuro para decir que haya una tendencia. Lo veremos en los próximos meses: todo depende de cómo vaya evolucionando la actividad económica en la provincia”.

Cuando El Litoral señaló a Cantalejo que con menor consumo de clientes regulares (como las industrias) deben tener un peso mayor las llamadas “pérdidas no técnicas”, el funcionario subrayó: “Aún no notamos un aumento del problema del fraude en proporción a la consumo regular, es más vemos que sigue en tendencia a bajar el fraude”.

El presidente del Directorio de la EPE lo atribuyó a “una efectiva lucha de toda la empresa sobre este problema”, aunque comentó que deben pasar unos meses más para establecer una tendencia. “Por ahora, vemos que baja la demanda, pero también las pérdidas no técnicas”, resumió.

Fraude

“La lucha contra el fraude eléctrico es una tarea permanente. Un objetivo que nos hemos trazado en el que nos preocupa mucho el vecino que hurta energía y perjudica a los demás y a la empresa”, comentó. En este sentido, pidió “la colaboración permanente de la población para denunciar esos casos, a través de nuestra página web o las oficinas comerciales. Nosotros hacemos especial hincapié en los sectores que pueden pagar la energía y no lo hacen: son muy efectivos los operativos en barrios de buen poder adquisitivo”.

En los sectores que tienen una capacidad de pago indudable “vamos con lo tradicional: una inspección constante, con agentes de la empresa que todos los días revisan entre 600 y 700 inspecciones domiciliarias, con un resultado positivo (donde encontramos fraude) en unos 400 casos: la efectividad de las inspecciones ha aumentado del 40 % al 60 %”, afirmó.

Inversión

En términos comparativos dado la crisis que afecta al mundo y también llega a Santa Fe, que “implica un esfuerzo para todas las empresas de servicios públicos, debe decirse que crece la inversión”.

Explicó que en promedio, de 2001 a 2007, la EPE ha invertido por año unos 61 millones de pesos, y que en 2008 fueron 130 millones de pesos. Cantalejo dijo que esa cifra crece a más de 150 millones de pesos “si contamos los acuerdos que hemos hecho con algunos grandes clientes para la repotenciación de la Estación Transformadora de Reconquista, para la construcción de una línea de alta tensión (en 132 kw) para la Terminal Nº 6, de Puerto San Martín, o la estación transformadora de Rosario (similar a la que hoy se inauguró en el norte de Santa Fe), que fueron hechas en parte con un financiamiento de nuestros clientes”, que necesitaban esa infraestructura eléctrica.

Estimó que en 2009 “pese a la crisis” la inversión de la EPE será de 200 millones de pesos. “Es un nivel que triplica o cuadruplica lo que se invertía entre 2001 y 2007: esto nos indica con claridad que hay un proceso de profundo sinceramiento y refundación de la empresa, donde vamos recuperando la inversión, uno de los principales objetivos de nuestra gestión”.

Ante una consulta, Cantalejo dijo que en 2008 el Estado aportó una ayuda de 95 millones de pesos que se sumaron a los aproximadamente 1.400 millones de pesos que tuvo la empresa por sus ingresos de facturación. Es decir que la asistencia del Estado fue de un 7 u 8% sobre el flujo normal de la EPE.

Comparación

El gobernador Hermes Binner comparó -al participar de un acto de inauguración de una Estación Transformadora en el norte de la ciudad- a la actual inversión de la EPE con los años anteriores, en especial la etapa de privatizaciones de los ‘90, cuando la compañía estuvo a punto de ser vendida.

Entre otros conceptos, dijo que una privatización de la EPE hubiera sido aún más perjudicial para los santafesinos que la privatización del agua, por el valor estratégico del servicio eléctrico en la economía provincial.

Para graficar la diferencia entre un servicio público en manos del Estado y otro privatizado, expresó: “En la EPE, no existe el concepto de la inversión no rentable, existe el concepto de la inversión necesaria para atender las necesidades de los santafesinos”.

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Junto al gobernador Hermes Binner, el intendente Mario Barletta y el ministro Antonio Ciancio, el titular de la EPE, Daniel Cantalejo destacó el nivel de inversiones de la empresa.

Foto: Amancio Alem

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El servicio en los barrios pobres

El ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente de la Provincia, Antonio Ciancio, admitió que “son dificultosos por las condiciones geográficas” los controles sobre los enganchados a la red eléctrica en los barrios más pobres de las ciudades más grandes de la provincia.

“Sabemos que este problema existe y nadie lo ignora: el esfuerzo de la EPE, en el que ha tenido mucho éxito, es tratar de sumar clientes de bajos recursos con convenios especiales”, para reducir el consumo irracional y regularizar el servicio.

Por otra parte, “nosotros tenemos en cuenta que hablamos de santafesinos con condiciones extremas de pobreza. El gobierno provincial en esto tiende una mano solidaria y, creo que como el resto de los santafesinos, nosotros no pensamos que se está robando energía, sino en que hay sectores carenciados que la necesitan para cocinar y calefaccionarse”, dijo Ciancio.

“Vemos que hay situaciones en las que esta energía que no se paga es necesaria para poder subsistir. No podemos soltarles la mano a nuestros comprovincianos en momentos como éste”, destacó.

Daniel Cantalejo, titular de la EPE, brindó más detalles sobre las tareas en barrios pobres que procuran regularizar el servicio eléctrico. “Tenemos una tarifa social de prueba, con un consumo estimado y realmente ha sido bueno el resultado. Hay una zona, que va entre la marginalidad más extrema y los sectores que sin dudas pueden pagar la energía, que hemos contemplado con estas tarifas sociales. Estimamos que hemos incorporado 6.000 nuevos clientes: no es una cifra que vaya a cambiar la realidad económica de la empresa, pero tiene el valor del ejemplo porque las familias que tienen energía eléctrica en forma regular cuentan con un servicio seguro, y les otorga más posibilidades de mejorar su situación, porque con una tarifa de la EPE es posible acceder a créditos para electrodomésticos o ropa. Es una política inclusiva de la EPE”.

$ 61

millones se invirtieron en promedio, en la EPE, entre 2001 y 2007.

$ 130

millones se invirtieron en la EPE en 2008. $ 95 millones fueron aportados por el Estado a la compañía eléctrica provincial.

$ 200

millones es el monto de inversión previsto para 2009.