Alta abstención en las elecciones para el Parlamento europeo

Avanza la derecha en toda Europa

El grupo conservador del Partido Popular Europeo (PPE) será la mayor fuerza en la Eurocámara con alrededor del 36,3% de los votos.

[email protected]

AFP-EFE-Télam

Los conservadores se impusieron ayer a los socialdemócratas en las elecciones europeas, aunque con desgaste en los países donde gobiernan, mientras la ultraderecha ganó terreno, según los resultados publicados por el Parlamento Europeo (PE).

Tras cuatro jornadas de votación, los 27 Estados miembro de la Unión Europea (UE) pusieron fin ayer a las mayores elecciones democráticas del mundo -después de los comicios en la India-, y las primeras celebradas en el continente desde el inicio de la crisis económica mundial.

Sólo un 42,94% de los 375 millones de ciudadanos que tenían cita con las urnas acudieron al llamado para elegir a los 736 eurodiputados -751 cuando entre en vigor el Tratado de Lisboa- que conformarán durante los próximos 5 años el único parlamento multinacional del mundo.

Se trata de la tasa más baja de participación en la historia de las elecciones europeas -2 puntos respecto a 2004, cuando fue del 45,47%- lo que confirma el divorcio entre la ciudadanía y sus instituciones en un contexto marcado por la parálisis del proyecto de integración tras el No de Irlanda al tratado de Lisboa, y por la mayor recesión económica desde la Segunda Guerra Mundial.

Por tercera vez consecutiva, el grupo conservador del Partido Popular Europeo (PPE) será la mayor fuerza en la Eurocámara con alrededor el 36,3% de los votos y 263 escaños, seguida por los Socialistas Europeos (PSE), con un 21,6% de los sufragios y 163 bancas.

Los demócratas y liberales se ubican en tercer lugar con 80 eurodiputados -frente a los 100 actuales-, seguidos de los Verdes, que ganan peso al pasar de 43 a 52 escaños.

También la Izquierda Unitaria baja al caer de 41 a entre 33 y 37 eurodiputados, mientras los soberanistas de Unión por una Europa de las Naciones también obtendrían igual número de escaños.

Descontento no capitalizado

Los socialistas no han conseguido capitalizar el descontento de los ciudadanos en los países en recesión en los que gobiernan los conservadores, situación de la que sí sacaron provecho los partidos minoritarios, de extrema derecha y euroescépticos.

Entre los beneficiarios se encuentra el ultraderechista Partido Liberal Austríaco (FPO), el Partido para la Libertad (PVV) de Holanda, liderado por el antieuropeo y xenófobo Geert Wilders, que se situó como la segunda fuerza del país, y el partido de extrema derecha finlandés Trae Finns, que logró un representante en la Eurocámara.

Los resultados en las europeas tendrán sin duda una lectura en clave nacional sobre todo en los principales países del continente afectados por la recesión y tasas de desempleo inéditas en las últimas décadas, y donde se celebran elecciones próximamente o los gobiernos se encuentran en la cuerda floja.

En Alemania, la Unión CDU-CSU - cristiano demócratas (CDU) y socialcristianos de Baviera (CSU)-, que lidera la canciller federal Angela Merkel, se impuso con claridad en las elecciones europeas. Los conservadores lograron un 38% de los votos, mientras el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), que forma parte del actual gobierno de Gran Coalición, obtuvo un 20,8 %, resultado similar a la debacle sufrida en 2004.

Sarkozy reforzado

En Francia, la crisis económica no puso en discusión la hegemonía de la alianza de derecha gobernante UMP (Unión por un Movimiento Popular), del presidente Nicolas Sarkozy, que logró un 27,87% de votos.

Pese a la impopularidad del líder francés, la derecha obtiene su primer gran triunfo en las europeas desde 1994, después de la derrota sufrida en 2004 con Jacques Chirac al frente de la presidencia.

En cambio, el Partido Socialista (PS) de Martine Aubry, sucesora de Ségolène Royal, sufre un descalabro al no superar la barrera del 20% y conseguir sólo un 16,48% de los sufragios, frente al 28,9% cosechado hace 5 años.

Por su parte, los ecologistas de Daniel Cohn Bendit, ex líder del Mayo francés, se alzaron en la tercera posición con un (16,28%) por delante del Modem (Movimiento Democrático) del aspirante a presidente François Bayrou, con apenas un 8,5% de los sufragios.

En tanto, el Frente Nacional del ultraderechista Jean Marie Le Pen, obtiene un 6,5% de los votos y los euroescépticos de Libertas, un 4,8%, al igual que el Nuevo Partido Anticapitalista del joven Olivier Besancenot.

Berlusconi, vencedor

En Italia, los escándalos amorosos y las fotos comprometidas publicadas del primer ministro Silvio Berlusconi no han quitado votos al Partido de la Libertad (PDL), que es vencedor con un 35,2% de los votos, frente al opositor Partido Demócrata (PD), con un 26,2%.

También la Liga del Norte de Umberto Bossi y aliada de Berlusconi obtiene un 9,5%.

En España, el conservador Partido Popular (PP), liderado por Mariano Rajoy se impone con un 42,23% de los votos frente al gobernante Partido Socialista (PSOE) del presidente José Luis Rodríguez Zapatero, con un 38,51%, lo que se traduce en 23 y 21 escaños respectivamente en la Eurocámara.

Por su parte, la Coalición por Europa, en la que están integrados los nacionalistas catalanes de CiU y el Partido Nacionalista Vasco (PNV) entre otros, consigue un 4,8% de los votos y 2 escaños, al igual que Izquierda Unida (IU-ICV), con el 3,7% de los sufragios. La novedad es la entrada de UPyD (Unión, Progreso y Democracia) de Rosa Díez, que consigue un escaño, como Europa de los Pueblos, que integra a independentistas catalanes, vascos y gallegos (ERC, Aralar, BNG).

problemas para Brown

En el Reino Unido, los datos oficiales apuntan a que el Partido Laborista del primer ministro Gordon Brown quedará relegado al cuarto puesto, con un 14,4% de los votos, por detrás de los conservadores, con un 28,1%, los antieuropeos del Ukip, con un 18,4% y los liberales demócratas, con un 14,4%.

Avanza la derecha en toda Europa

El líder del ultraderechista Partido Liberal Austríaco (FPO), Heinz-Christian Strache, sonríe tras los buenos resultados obtenidos en las elecciones al Parlamento Europeo. Foto: AGENCIA EFE

ParlamentoEuropeo2009.pdf

/// análisis

Prefieren conservadores

Por Anna Pelegrí - AFP

El triunfo de la derecha en las elecciones parlamentarias europeas de ayer mostró que los ciudadanos del Viejo Continente prefieren un manejo conservador de la crisis económica ante la falta de alternativas de los socialistas, indicaron analistas. La derecha gobernante se impuso sin problemas en grandes países como Alemania, Francia e Italia y logró superar desde la oposición a los socialistas en el poder en Gran Bretaña, Portugal y España, que encajaron derrotas de mayor a menor grado.

La tendencia en el resto de la UE, donde los conservadores gobiernan en 21 de los 27 países, fue similar, con excepciones en Suecia, Dinamarca, Grecia y Eslovaquia, principalmente.

“Los socialistas perdieron porque no pudieron aportar ninguna alternativa creíble a la crisis económica”, explicó Piotr Maciej Kaczynski, analista del Centro de Estudios Políticos Europeos en Bruselas.

La segunda fuerza política europea atraviesa una “crisis de credibilidad, incapaz de presentar un frente unido”, coincide Antonio Missiroli, del Centro de Política Europea.

La crisis económica pasó factura a los socialistas que gobiernan en Gran Bretaña o España pero reconfortó al presidente francés, Nicolas Sarkozy, a la canciller alemana, Angela Merkel y hasta el jefe del gobierno italiano, Silvio Berlusconi, salpicado por nuevos escándalos judiciales y sexuales.

“No es que la derecha tampoco haya aportado una alternativa. También está dividida a nivel europeo, como lo demuestran las divergencias entre Merkel y Sarkozy” sobre las soluciones a la crisis, “pero es una cuestión de confianza” del electorado, defiende Kaczynski.

Los europeos, sumidos en la peor debacle económica desde la Segunda Guerra Mundial, “tienden a votar a la derecha en tiempos de crisis o bien, votan radical, desesperados y frustrados con los políticos”, lo que explica el alza de los Verdes en Francia o Bélgica, indica el analista.

El ciudadano medio quiere protección social, lo que debería beneficiar a la izquierda, pero también “seguridad, que se le proteja físicamente y contra la inmigración y se le dé estabilidad financiera”, reivindicaciones que encajan en los programas de la derecha, continúa.

Pero también hay quien resta importancia a la derrota socialista en Europa: “Los electores estiman que no hay gran cosa en juego en unas elecciones europeas. Por eso muchos votan a pequeñas formaciones, como los Verdes, aunque sean socialistas”, defiende Missiroli.