Son alrededor de 20 personas

Ex empleados de La Nueva Balsa

piden recuperar su fuente de trabajo

Tras la compra de la casa de Sor Josefa Díaz y Clucellas, los trabajadores del comedor La Nueva Balsa se quedaron sin trabajo, no fueron indemnizados y no pudieron cobrar el Fondo de Desempleo. Mañana hay una nueva audiencia en Trabajo.

De la Redacción de El Litoral

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Los empleados del comedor La Nueva Balsa, que funcionaba en un sector de la histórica casa de Sor Josefa Díaz y Clucellas, se acercaron hasta El Litoral para manifestar la preocupación que sienten, sobre todo ante la pérdida de la fuente de trabajo que, en más de un caso, era el único sustento familiar.

“No sabemos qué será de nosotros, porque nadie nos dice nada. Encima no podemos cobrar el fondo de desempleo, porque no tenemos aportes, y quienes deberían darnos una respuesta, que son los hijos de la persona que nos contrató, no se presentan a las audiencias que se realizan en el Ministerio de Trabajo”, manifestó Sandra Bórtoli, quien trabajaba en el sector de la cocina del comedor hacía 5 años. Y aclaró: “Nuestro empleador falleció hace 2 meses, por eso las negociaciones son con los hijos de esa persona”.

Carina Sánchez, quien trabajó 7 años de moza en La Nueva Balsa -6 en negro y 1 en blanco-, refirió por su parte que en las audiencias realizadas el propio fiscal de Estado les dijo que “el gobierno provincial, actual propietario de la casa de Sor Josefa Díaz y Clucellas, mucho no puede hacer porque es un problema entre empleados y empleador”. “Nosotros sabíamos que había un negocio por detrás respecto del local donde funcionaba el comedor, pero nos enteramos cinco días antes que había que desalojarlo y que a cada uno de nosotros nos iba a llegar un telegrama”, comentó.

Entre los casos que más preocupan a los trabajadores se encuentra el de Mariana, una joven que atraviesa el quinto mes de embarazo. “Vivo con mi marido y otro bebé que tenemos, además de este que viene en camino. Él es remisero, y lo que yo ganaba era un ingreso más que ahora no disponemos. Necesito cobrar algún tipo de indemnización o el fondo de desempleo”, dijo preocupada, agregando que trabajaba en La Nueva Balsa desde 2005 y fue blanqueada 5 meses atrás.

En concreto, las personas que se acercaron hasta El Litoral dejaron en claro que lo único que quieren son respuestas. “Las audiencias anteriores fracasaron, y estimamos que en la del martes 16 de junio pasará lo mismo porque no se van a presentar los hijos de nuestro empleador ni tampoco quien hasta antes de la venta a la provincia era el propietario de la casa”, manifestó Sandra. Y agregó: “Vemos bien que se haga un museo, pero no por eso que dejen a 20 personas sin trabajo”.

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El comedor La Nueva Balsa funcionaba en un sector de la casa de Sor Josefa Díaz y Clucellas, ubicada en la intersección de San Luis y La Rioja.

Foto: Luis Cetraro

/// EL DATO

Casa comprada

A principio de este mes, el gobierno de la provincia compró la casa de Sor Josefa Díaz y Clucellas por un monto cercano a los $ 600.000. El inmueble, emplazado en la intersección de San Luis y La Rioja, tiene un importante valor patrimonial puesto que es una construcción emblemática y singular testimonio de la arquitectura doméstica de la década 1850/1860.

Tras la sanción de una Ley de Expropiación, la provincia adquirió la vivienda donde vivió la primera pintora santafesina con el principal objetivo de crear el Museo del Inmigrante. Cabe señalar que en un sector de la casa funcionaba el comedor La Nueva Balsa, que debió cerrar tras haber sido comprada por el gobierno provincial.