EN LA ESCUELA COLÓN

Restauran un mural de Fernández Navarro

La pintura data de 1940. Fue restaurado en el “92 por el mismo Fernández Navarro, ahora Salvador Massa concreta la tarea.

DE LA REDACCIÓN DE EL LITORAL

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Hace casi dos meses el artista Salvador Massa está trabajando en la restauración de un mural pintado por César Fernández Navarro en el año 1940 sobre una pared de la escuela Nº 8 Colón, ubicada en Francia 1557. El mural de 6.50 metros por 3 metros relata el desembarco de Colón en América.

“En el año “39 se decidió fundar la Escuela Provincial de Artes Visuales Juan Mantovani y a los profesores que contrataron de Buenos Aires -entre ellos César Fernandez Navarro, Orlando Pierri, José Planas Casas y otros- les pidieron que realicen un mural en las distintas escuelas de Santa Fe, antes de la inauguración de la de Bellas Artes”, cuenta Massa, también encargado del Departamento de Restauración de la provincia.

“A él le tocó la escuela Colón y después pintó otro en la Juan de Garay de Santo Tomé... Hay más de 40 personajes, allí retrató personalidades de la época a partir de modelos”.

-¿Son los únicos murales del artista?

- Había otro en la UNL pero lo pintaron encima. Estaba bastante deteriorado y las autoridades decidieron pintar la pared blanca y se perdió el mural. También hay uno más chico en un edificio que está en la Costanera y Salvador del Carril.

El mural ya había sido restaurado en el año 1992 por el mismo Fernández Navarro con la colaboración de Massa.

“Lamentablemente los chicos empezaron a apoyar la bicicleta, juegan adentro del salón con la pelota. Está pintado con témpera profesional y tuvo dos rajaduras importantes el muro, uno en el medio por filtración de agua y el otro se ve que por movimiento del piso”, cuenta.

-¿Cómo llega al mural de Fernández Navarro nuevamente?

-La escuela pidió al Ministerio de Innovación y Cultura si se podía restaurar a partir de una nota y el subsecretario de Gestión Cultural, Carlos Bernatek, lo derivó al Departamento de Restauración, a cargo de la restauración de las obras de arte de la provincia.

-¿Actualmente qué otra obra se está restaurando?

-Nosotros estamos restaurando la de Sor Josefa Díaz y Clucellas, la obra que está expuesta en el Museo Rosa Galisteo que tiene que ver con la temática del puerto. Y hay una obra de Quinquela Martín también muy importante que estaba en la gobernación y fue devuelto al museo. Este gobernador quiso que se devuelvan las obras del museo al museo, y la verdad es una obra importante que no se veía y en este momento está expuesta.

EL PINTOR

-¿Está pintando?

-Dejé la presidencia de la Asociación de Artistas Plásticos justamente para dedicarme a mi obra, con el trabajo y la presidencia no tenía mucho tiempo para mí. Y ahora me estoy dedicando. Tengo mi taller en mi casa, y en octubre hago una muestra en Guastavino, del último trabajo que van a ser unas 12 acuarelas y 10 óleos.

-¿Sobre qué está pintando?

-Sigo con la temática de las ciudades perdidas. Primero yo buscaba la ciudad perdida bajo la montaña por eso en la serie anterior hay montañas, huecos, y en esta oportunidad la busco bajo tierra, la cuestión es buscarla. Son ideas que uno tiene. De chico viviendo en Italia rodeado de mar y montañas siempre tenía esa idea de ciudades perdidas.

-¿Cuánto tiempo vivió en Italia?

- Viví hasta el año “54, tenía 13 años cuando llegué acá. Después de la guerra, mi padre buscó un nuevo horizonte porque no había trabajo, él era sastre y tenía una tía en la Argentina y el lugar más fácil era Santa Fe, primero vino mi padre y luego nosotros.

-¿El pintor cuándo aparece?

-Empecé allá en Italia, iba con mi maestro pintor, como se usaba en aquel entonces, le preparaba la paleta, me iba enseñando, mientras él pintaba me daba para dibujar caras, y estuve dos años con él. Después vine acá y estudié en la Mantovani, donde me recibí. Ya la tengo incorporada a la pintura, no me imagino vivir sin pintar. Fui presidente de la Asociación de Artistas Plásticos más de 20 años...

-Debe haber sido difícil

_ Sí, hay más problemas (ríe) lo que pasa es que uno tiene que comprender que el artista trabaja solo y todo lo que hace siempre cree que es lo mejor, como para la madre no hay hijo feo. Cuando a uno no le gusta una obra o se la rechaza...

-¿Y tardó mucho tiempo en comprender esto?

- Estuve si... Tu abuelo (Ernesto Fertonani) igual, ya no quería ser jurado porque decía “no estoy para aguantar las quejas de los pintores”. Y a mí me pasó lo mismo. Ahora me merezco trabajar para mí.

Restauran un mural de Fernández Navarro

Hace dos meses que el artista trabaja en la restauración del mural que relata el desembarco de Colón a América.

Foto: AMANCIO ALEM