Esta noche desde las 20.30, en el CCP

Arce vuelve a estimular los oídos

El reconocido difusor vuelve con “La clásica música”, luego del parate por la emergencia sanitaria. El programa va de la imponente “Carmina Burana” de Carl Orff a “The Wall” y “The Dark Side of the Moon”, de Pink Floyd.

De la redacción de El Litoral

Esta noche desde las 20.30, en el Centro Cultural Provincial, Marcelo Arce se reencontrará con sus seguidores luego de la ausencia impuesta por la emergencia sanitaria. En la ocasión, preparó un programa especial que vincula a Pink Floyd y “Carmina Burana”, la célebre obra de Carl Orff.

Cuenta el difusor: “En 1936 surge una de las grandes obras, popularizada y célebre en todo el mundo: ‘Carmina Burana’, un clásico de clásicos, siempre vigente, que impacta a todos los públicos y generaciones”.

Es una cantata tan popular que aparece en cine, en la TV, en publicidades, etc., de tal modo que millones en el mundo reconocen la pieza del comienzo, con el gran golpe de pianos y gongs, pero pocos recuerdan a su compositor, Carl Orff. Él vivió este fenómeno masivo, y sonriendo dijo: “No importa que sepan quién la compuso, mientras reaccionen y disfruten con ella”.

Carmina deriva de “canciones” y está relacionada con los goliardos, un grupo de vida “irregular”, “non sancta” que vivía en los alrededores del convento benedictino de Beuren, en Baviera, en los siglos XII y XIII, formado por monjes disidentes, estudiantes rebeldes, soldados desertores.

Fiel a su personalidad, Arce no puede evitar afirmar: “No debo olvidarme de remarcar que se pronuncia Cármina, acentuando la primera ‘a’, pues aunque no constituya ningún pecado de incultura-, se escucha por doquier ‘Carmína’, con acento en la ‘i’. Además, hay versiones locales y mundiales tan malas que pasan a ser ‘Carmíña’...”.

Sobre los goliardos, antiguos autores de los textos, destaca que “ellos tenían como lengua una combinación de alemán antiguo, francés y latín vulgar. Dejaron más de 300 piezas en rima. Orff seleccionó algunas y las conectó formando una historia simple. Además, Orff indica en el subtítulo de la partitura, ‘para ser cantada junto a imágenes mágicas’ ”. Nosotros, en la edición especial que realizamos para cada espectáculo, agregamos esas imágenes mágicas”.

Cruce de estéticas

Sobre la relación con el grupo que encabezaron Roger Waters y David Gilmour, acota: “Ritmo y melodía, fuerza y color, historia y mito, son algunos de los elementos comunes entre estos dos clásicos, ‘Carmina Burana’ y ‘The Wall’. Esto deriva en ‘El lado oscuro de la luna’ ”.

En “Carmina Burana” pasan varios números críticos, denunciando el autoritarismo, gritando contra el destino cruel de los que no se amoldan (dicen “En este mundo furibundo la vida es vana”). Esto mismo está en la esencia de “The Wall”, esa muralla que tiene tantas significaciones. Claramente revela el maltrato a los niños, el abuso del poder. Es una obra magistral, un clásico imperdible. Cada canción es un cuento y se van hilvanando para formar la historia envuelta en una atmósfera gótica. Que no se priva del humor y la emoción, la parodia y la ensoñación.

Para el locuaz “maestruli”, la música de Floyd “sigue atrayendo a los que vivieron esa época de los ‘70, a los jóvenes de hoy y a los ‘más adultos’ que descubren ‘nuevos clásicos’ allí, bajo la sombra de los ‘eternos clásicos’, desde Bach a Stravinsky”.

Y concluye: “Como Carmina, Pink Floyd emplea melodías breves y pegadizas. Muestran la tristeza, la alegría, la nostalgia y hasta el amor. Ofrecemos no sólo la versión original de Pink Floyd sino también la versión sinfónica en un concierto en el Royal Albert Hall organizado por el gran violinista Yehudi Menuhin”.

Arce vuelve a estimular los oídos

Roger Waters criticó en “The Wall” al autoritarismo de la sociedad, contra el que ya se habían rebelado los goliardos, autores de los versos de “Carmina Burana”.

Foto: ARCHIVO EL LITORAL