Preocupan algunos retrasos
La informatización del Poder Judicial avanza pero a contrarreloj
Una delegación del Banco Mundial vino a analizar la marcha del programa financiado con un crédito de 12 millones de dólares. La primera fase está cerca de completarse, pero los pliegos para la licitación de otras dos llevan más de un año de demora.
De la redacción de El Litoral
La ejecución del ambicioso proyecto de informatización del Poder Judicial de la provincia avanza con pasos concretos, que pronto comenzarán a mostrar sus frutos en un nuevo modelo de gestión para los tribunales santafesinos. Se trata de la primera fase de lo que, a su vez, es la primera parte de la modernización prevista, que se financia con un crédito del Banco Mundial por 12 millones de dólares y que se puso en marcha en diciembre de 2007.
Parte de ese dinero -un millón y medio, de los cinco y medio que ya están adjudicados- se utilizó en la construcción de los sistemas de gestión de todos los juzgados de la provincia. Esto es, los programas que contemplan toda la tramitación de un expediente y la transcripción de cada uno de los pasos y los textos respectivos, que permiten su seguimiento por Internet y la notificación on line.
En este contexto, representantes del Banco Mundial en Argentina e integrantes de la unidad ejecutora nacional de las líneas de financiamiento, estuvieron hace dos semanas en Santa Fe para evaluar la marcha de los programas en curso. Así, luego de entrevistarse con autoridades provinciales, estuvieron en la Corte, para tratar específicamente el proyecto de informatización y modernización.
Etapa por etapa
Este proyecto está dividido en dos etapas. La primera, a su vez, tiene tres fases: la de gestión, la documental, y la de administración. El sistema de gestión ya cuenta con un módulo, que fue presentado por la empresa adjudicataria, y que en las próximas semanas se instalará, a manera de prueba piloto, en el juzgado Civil y Comercial de la primera nominación de Santa Fe. Mientras tanto, se está transfiriendo y cruzando información del sistema actualmente en uso en el Poder Judicial.
Las otras dos fases permitirán a los jueces y funcionarios tener acceso directo a legislación, doctrina, jurisprudencia y antecedentes sobre los casos que tengan en estudio (documental) y organizar el manejo de los recursos humanos (administración).
El proyecto tendrá continuidad con una segunda etapa, que es la compra de equipamiento. En este plano, el Poder Judicial avanzó con la adquisición y actualización, pero harán falta servidores y memorias capaces de contener todo el volumen de datos que involucra el nuevo sistema. También, al respecto se está ganando tiempo con las consultas técnicas necesarias, para estar en condiciones de proceder apenas estén dadas las condiciones.
Pliegos en espera
El problema, en todo caso, aparece en lo relativo al aspecto documental y el de administración. Estas dos fases debieron ser licitadas en 2007, igual que la de gestión, pero los altos presupuestos presentados por las empresas oferentes llevaron a declarar desierto el proceso. El crédito siguió adelante, contra el compromiso del Estado de que, de todos modos, se seguiría adelante. Y un plazo: los contratos definitivos deberán estar firmados antes de septiembre del año que viene, o el crédito se cae.
En este punto, desde el Poder Judicial se confeccionaron los pliegos para una nueva licitación internacional. El camino previsto -tan engorroso como suele ser en estos casos- prevé el visto bueno, el rechazo o la incorporación de modificaciones por parte de la Unidad Ejecutora Provincial, en el Ministerio de Hacienda, su remisión a la Unidad Ejecutora Nacional y finalmente la aprobación del Banco Mundial. Recién a partir de ahí se podrá convocar a la nueva licitación.
El problema que despertó las mayores preocupaciones en las reuniones de hace dos semanas es que esos pliegos fueron remitidos a la Unidad Ejecutora Provincial en junio del año pasado, sin que hasta ahora la misma se haya expedido. Y ya transcurrieron casi 14 meses. Es decir, más tiempo del que resta para completar todos los tramos siguientes del proceso, antes de que opere la caducidad. Pero todavía no hay noticias.
