El Chaquito Local Riders

Una cancha de primera

La Setúbal es sin dudas un escenario que provoca admiración entre los amantes de los deportes extremos que conjugan agua y viento. El Chaquito es el lugar de encuentro de muchos santafesinos y visitantes que navegan en nuestra laguna, quienes no se cansan de ponderar las características naturales que la diferencian sobre otros espejos de agua.

 

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Ubicado en el norte de la ciudad se encuentra el paraje “El Chaquito”, poco conocido por los habitantes de Santa Fe, pero visitado comúnmente por los mejores exponentes del país de aquellos deportes que tienen en el agua, una tabla, una vela y el viento como protagonistas: wakeboard, windsurf y principalmente kitesurfing.

Ya ponderamos en ediciones anteriores las bondades de la laguna Setúbal para la práctica de este tipo de actividades, en algunos casos extremas. Por ello, en esta oportunidad fue el turno de visitar el paraje para conversar con alguno de los referentes del grupo de amigos que desde hace tiempo formaron lo que ellos bautizaron como “El Chaquito Local Riders”.

Distintas opciones

Matías Francia, estudiante santafesino, es uno de los integrantes del grupo cuya característica fundamental es la de reunir a los amantes de la acción y la adrenalina en un rango de edad que va desde los 14 a los 50 años, entre los que hay hermanos, padres e hijos.

Su principal característica y lo que ellos dicen que los diferencia del resto es la búsqueda de las mejores opciones de acuerdo a cómo se presentan las condiciones el día de la actividad; si hay viento se practica kite, sino wakeboard y wakeskate, y ahora con las rampas u obstáculos se busca andar lo más fuerte posible, dando todo y con un estilo definido como “wakestyle”, que es lo último en kitesurfing a nivel mundial.

Donde está

El Chaquito queda antes de llegar a Ángel Gallardo. Para llegar, uno debe tomar Avenida General Paz hasta la laguna, pasando el Monte Zapatero. Este lugar es un pequeño poblado que pertenece a la comuna de Monte Vera.

“El lugar lo conocimos a partir de que Nacho Benuzzi se instaló en ese lugar. Desde entonces lo tomamos como nuestra base y lugar de encuentro para salir a hacer lo que se preste en el agua. Nos fuimos conociendo de hacer otros deportes como windsurf o wakeboard y armando el grupo de los que se iban volcando a la práctica del kite”, manifestó Matías.

Distinto a todo

Una gran parte de la charla estuvo dedicada a mencionar las características del lugar y las particularidades únicas de la Setúbal.

“Lo bueno es que tiene playas muy grandes, con kilómetros de extensión que te permiten armar los equipos sin dificultades. No es profundo, lo que es ideal para cuando hacés alguna maniobra y te caés, y hacés pie, no estás pensando en que tenés que flotar y nadar. Por lo general te metés hasta unos 500 metros y el agua te llega a la cintura, eso está bueno. Te permite meter obstáculos y armar como un pequeño parque de maniobras y pruebas, lo que en definitiva lo hace diferente al resto de los lugares.”

“Yo recorrí varios lugares y siempre que vuelvo a Santa Fe me doy cuenta lo espectacular que es nuestra laguna. Realmente se valora mucho este espacio, es cómodo, grande y tiene muchos lugares para navegar, no solo por la costa del chaquito sino también lo podés hacer por la otra costa.

“Si la laguna con esta playa estuviera en una ciudad turística, seguro que sería un punto que atraería miles de visitantes. Una laguna así en Rosario, por ejemplo, sería una locura. Los rosarinos para hacer kite tienen que ir al Paraná, lo que es un peligro terrible, o cruzarse en lancha, que ya implica un viaje y un traslado y el lugar a donde van no llega a ser lo suficientemente grande y donde no entran bien los vientos”.

 

La laguna es única para este tipo de deportes por su superficie y poca profundidad entre otras ventajas, que la diferencian de otros lugares.

Foto: Chaquito Local Riders.

El Chaquito es el punto de encuentro del grupo. Deporte y amistad se practican en el norte de la ciudad.

Foto: Chaquito Local Riders.