En el Teatro Municipal

Voces de excelencia en una gala

La Fundación Accentus ofreció un espectáculo para celebrar los 125 años de la Fundación de la Bolsa de Comercio de Santa Fe. Destacada actuación de solistas.

De la redacción de El Litoral

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Fiesta de la música, fiesta de cumpleaños de la Bolsa de Comercio. Ciento veinticinco años de trabajo por Santa Fe, de trabajo continuo e incansable. Así nació la Gala Lírica organizada por Fundación Accentus y la Bolsa de Comercio de Santa Fe. Así se pudo disfrutar, en el Teatro Municipal, de la magia de la música en una de sus expresiones más elaboradas y cada vez más lejos de su imagen elitista, la música lírica.

El programa desarrollado permitió un recorrido de las mejores obras de Donizzetti, Puccini, Massenet, Bizet y Strauss, en un contrapunto muy logrado de sones y colores junto al Coro de Niños y Jóvenes de Santo Tomé, bajo la dirección general de Malena Boero. El Coro de Varones dirigido por Gabriela Aguirre Molina -y convocado especialmente para la ocasión-, la Orquesta de Cámara del Litoral con músicos invitados, dirigida por el joven maestro Matías Bustafán, mostraron la capacidad santafesina de lograr figuras y agrupaciones del mejor nivel.

Los protagonistas

Los solistas de Fundación Accentus: Daniela Tabernig, Rocío Arbizu, Eugenia Coronel Bugnon, Evelyn Plaumer -alumnas y ex alumnas del Coro de Niños y Jóvenes de la Municipalidad de Santo Tomé-, Gabriela Kreig, Fernanda Chávez Doldán y César Perren dieron clara muestra de sus enormes aptitudes vocales y expresivas. Probaron también que lograr calidad musical en la lírica es una tarea de tiempo y perseverancia, de tesón, buenos maestros y un ámbito institucional de contención y estímulo. Esto ocurre con la formación lírica en nuestra ciudad, y una muestra de ello fueron el Coro y los solistas participantes, jóvenes talentosos que mostraron la garra suficiente como para esperar de ellos caminos promisorios.

Interpretar la muñeca de “Les Contes d’Hoffman” en “Les oiseaux dans la charmille” exige una agilidad vocal y una expresividad que se reserva a las sopranos ligeras experimentadas. El desafío afrontado por la joven Evelyn Plaumer culminó con una lograda y aplaudida interpretación que sumó un mérito más para los solistas.

Dos jóvenes cantantes, Perren y Morello, en sus registros de tenor y barítono sumaron también calidad y jerarquía al espectáculo. Rocío Arbizu, por su parte, mostró la madurez alcanzada, perfilándose como soprano spinto con coloratura, y sorprendió con la Mimí de Puccini; y Gabriela Kreig calzó a la perfección en su “Carmen”, en que aportó toda la tensión dramática y una intensa interpretación.

Daniela Tabernig agregó el color a la fiesta. Precisamente al responder al pedido de “¡Czardas!”, desplegó toda la alegría y la tensión de la celebración y llegó al clímax de Strauss. Luego, en “Granada”, mostró su versatilidad expresiva y su capacidad vocal. Fue largamente ovacionada.

En el despliegue de sus amores y las francas diferencias con que muestran sus pasiones Musseta (Eugenia Coronel Bugnon) y Mimí (Rocío Arbizu) lograron armar con sus parejas un acabado contrapunto, con intenso crescendo que se sostuvo hasta el final del interpretación del cuarteto.

Los brindis fueron un disfrute particular y una muestra de dos miradas musicales: un contrapunto entre la manera sanguínea de la “Traviata” y el virtuosismo vienés de “El murciélago”; dos muestras de la grandiosidad que puede lograr la lírica y de las maneras en que cada cultura las manifiesta.

Así, con plenitud, se abrió el alma al goce. No sólo el oído y la vista se complacen por un espectáculo virtuoso. El espíritu se reconforta y comunica el gozo a los espectadores.

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Rocío Arbizu.

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Daniela Tabernig.

Fotos: Pablo Aguirre

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Gabriela Kreig.

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Evelyn Plaumer.

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María Eugenia Coronel Bugnon.

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Fernanda Chávez Doldán.