Contra el fallo sobre drogas
Mientras el justicialismo disidente preparaba un pronunciamiento sobre recientes dichos del juez de la Corte Raúl Zaffaroni, el Senado santafesino declaró “su preocupación por el reciente fallo que despenaliza la tenencia de la marihuana para consumo propio”. El texto declarativo fue llevado al recinto por el bloque del PJ y votado sólo por esa fuerza.
La expresión de rechazo de la Cámara alta santafesina sobre un fallo de 188 páginas mereció la redacción de una carilla y media de fundamentos, firmados por los senadores justicialistas Alberto Crosetti, Hugo Pucheta, Norberto Betique, Danilo Capitani, Juan Carlos Mercier, Alcides Calvo y Hugo Terré.
“Entendemos que (la despenalización) no ayudará a los que padecen este flagelo, puesto que sólo tiende a que no se los penalice, pero en lo que hace a la verdadera recuperación del mismo, no se hace mayores aportes que declaraciones de voluntad”, dicen los considerandos.
Un párrafo de los fundamentos de los senadores peronistas que se oponen al fallo dice textualmente: “el concepto que cada individuo es soberano para tomar decisiones libres sobre el estilo de vida que desea sin que el Estado pueda intervenir en ese ámbito, podría ser aceptado en una sociedad cuyo desarrollo y calidad de vida respete estándares socialmente aceptables, pero en un país como Argentina donde todas las estadísticas y cifras sobre la pobreza se da un incremento, ¿qué tipo de libertad puede tener un ciudadano que no tiene recursos para cubrir sus necesidades básicas?”. (El subrayado corresponde al original).
Más adelante los fundamentos citan al arzobispo de Santa Fe José María Arancedo que ha dicho que “la droga es sinónimo de muerte” y a Horacio Castellano de la Comisión Nacional de la Pastoral de Drogadependencia que opina que la despenalización “promueve el consumo, porque dice que no es malo”.
Los fundamentos recuerdan que para esa comisión el fallo “puede generar confusión (...) entendemos el espíritu de la mirada jurídica, pero creemos que no es facilitando el consumo, ni haciendo parecer como que está bien lo que está mal, que vamos a superar este creciente flagelo de las drogas, particularmente en nuestros jóvenes y adolescentes”.
El texto también incluye manifestaciones de líderes de otras religiones, en un sentido parecido: el presidente del Centro Islámico Samir Salech; el rabino Abrahan Skorka, y a voceros del Programa Vida, una red evangélica de rehabilitación de adicciones.
