Postales del centro histórico

Por las calles de Fort Worth

El impulso económico que le dio la ganadería hizo que en algún momento del siglo XIX se la conociera como “Cowtown”. Esa tradición se mantiene viva en el casco histórico, donde abundan las referencias al “lejano oeste”.

Juan Manuel Fernández /// Enviado Especial a EEUU /// [email protected]

CAMPO_P16_A.JPG

Punto turístico. Un ejemplar de Longhorn, la raza criolla de los EEUU, le sirve a los visitantes para fotografiarse en la puerta de ingreso al Coliseum, donde se desarrolla el tradicional rodeo.

CAMPO_P16_B.JPG

Como en México. El casco histórico de Fort Worth revela, en los trazos de su arquitectura, las raíces hispanas que precedieron al dominio anglosajón.

CAMPO_P16_D.JPG

Patrimonio cultural. Como su nombre lo indica, el “Longhorn” -ganado criollo norteamericano- se caracteriza por las exageradas dimensiones de su cornamenta, que puede llegar a tener una envergadura de hasta 6 pies (1.8 metros).

CAMPO_P16_F.JPG

El hombre de la calle. Como en una auténtica película del oeste, el centro histórico de Fort Worth luce arquitectura y personajes típicos.

CAMPO_P16_E.JPG

Clásico y moderno. Dos protagonistas de la vida rural en Texas: el camión jaula y los hombres de a caballo para manejar la hacienda.

CAMPO_P16_C.JPG

Ingenioso bálsamo. El verano texano arrecia en agosto con temperaturas por arriba de 40º. Para aliviar a los peatones existen ventiladores con aspersión de agua sobre la vía pública para un “refresco al paso”. Fotos: Juan Manuel Fernández