Lo expresó en la Sociedad Rural

Solá teme maniobras con la carne

El ex gobernador de Buenos Aires deslizó que puede pensarse en un brote “accidental” de aftosa. Bregó por la unidad nacional y dijo que la inercia del campo no se puede parar.

Federico Aguer

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“¿Cuánto llovió en la zona?”. Ése fue el disparador con el que Felipe Solá comenzó su charla con los productores reunidos ayer en la Sociedad Rural de Santa Fe. Sabedor de los códigos del hombre de campo, arrancó su ponencia con un intercambio de experiencias con los productores santafesinos, quienes expusieron la difícil situación del norte provincial.

Luego de la conferencia de prensa brindada a los medios de comunicación, en donde dejó en claro sus aspiraciones presidenciales y la necesidad de unir al peronismo para el 2011, el ex gobernador bajó al salón principal de la Rural para expresar su punto de vista de la realidad ante un nutrido grupo de hombres de campo. “El yuyo es la mayor apuesta de los Kirchner para el año que viene; Alarcón es una aventurera; falta una política agropecuaria”, fueron algunas de las sentencias que disparó.

Para Solá, hemos vivido un año y medio “inusitado, con cosas que nadie esperaba”. Según analizó, “los Kirchner alientan la idea de un futuro urbano, en donde las divisas salen del Banco Central y los alimentos se hacen en el supermercado”, sentenció. “Esa idea, la de los piquetes de la abundancia, que tanto seduce a la izquierda, es la que generó la 125 y la ley de prensa” (por el proyecto de ley de radiodifusión). “Es una idea con una mirada sospechosa y conspirativa del cambio tecnológico, es una idea que fracasa desde su origen”, continuó. Según dijo, el 80 por ciento de la población vive en las ciudades y el 20, en el campo; pero ese 20 por ciento sigue siendo mucha gente”.

Movimiento imparable

“Cuando quisieron enfrentar al campo, descubrieron la gran unidad gremial del sector. Se generó una fuerza muy grande”, analizó. “La ciudad apoyó al campo, cambió la política del país, y el gobierno perdió ese 70 por ciento de imagen positiva con el que contaba”, continuó.

Para Solá, el peor momento ya pasó, se rompió la barrera de la no participación, y se transformó en algo orgánico. Con respecto a la agricultura y la ganadería, dijo que la primera depende del clima, del precio de los mercados y del esquema fiscal. “Ahora, la política ganadera es más difícil de reconstruir”, sentenció.

¿Aftosa intencional?

“Tenemos sospechas de que el Senasa planearía quitarles a los entes el monopolio de la vacunación contra la aftosa”, anunció. Según expresaron Solá y Raúl Rivara, ex ministro de Asuntos Agrarios y diputado electo, se va a acabar la oferta de gordo, puede llegar a faltar carne y puede surgir un brote “accidental” de aftosa, del cual el campo sería el culpable.

“Todavía estamos a tiempo de frenar la medida de la aftosa y la ley de arrendamiento, que es una cuña para dividir a la Mesa de Enlace, porque la misma nace de un proyecto de la Federación Agraria que, de manera muy inteligente, después se despegó del mismo”, analizaron en conjunto.

“Hemos dejado de tener un gobierno, porque un gobierno busca el bien común. Sin embargo, este gobierno se comporta como una facción en cada medida que adopta. ¡¿Cómo se va a tomar una medida para el trigo un 10 de septiembre?!”, criticó.

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