Un espectáculo inolvidable y por si algo faltaba
Le pusieron mucha Honda a la noche
Los New Civic fueron netos dominadores en una velada santafesina signada por el éxito en todo aspecto. Una multitud estimada en más de 50 mil personas coronó una histórica carrera de TC 2000.
Última curva. El New Civic de Leonel Pernía ya se va rumbo a su segundo triunfo dentro del TC 2000. Éste no fue uno más, significó el de ser el primer ganador en un callejero nocturno.
Foto: Pablo Aguirre
Daniel Monticelli
Uno no pierde su capacidad de asombro: ver ese gentío instalado en las cómodas tribunas; aficionados que pugnaban por un lugar para ver mejor, con un comportamiento cercano a lo ejemplar, sólo permiten experimentar orgullo y emoción.
Y nuestra querida Santa Fe de la Vera Cruz entró en la historia grande del automovilismo deportivo autóctono. Porque es la primera vez que una carrera de TC 2000 se corre en un circuito callejero nocturno, iluminado de manera óptima.
Con esa belleza paisajística que nos llenó los ojos a los que estábamos ahí y a los millones de telespectadores en América que siguieron en vivo la transmisión de TV, los tres Honda del equipo Petrobras que dirige Víctor Rubén Rosso, fueron tan contundentes que “encandilaron” cualquier acercamiento de las otras escuderías.
Porque Leonel Pernía (el “Tanito” heredó el apodo de su padre, el ex jugador de Boca y piloto de TC, Vicente Alberto), se manejó todo, porque José María López deslumbró con su maniobra para sortear a Juan Manuel Silva y éste porque cumplió una tarea destacable, para quedarse con el rutilante 1-2-3 para los New Civic de la marca japonesa. Otra terminal nipona como Toyota, representada por Norberto Fontana, arribó en el cuarto lugar.
Con estas posiciones de anoche y restando la otra competencia que se largaba pasado el mediodía de hoy, el “Pato” Silva continuaba como líder, pero ahora con 4 puntos de diferencia con respecto a José María López (éste le descontó 3) y tercero estaba Pernía a 8 puntos.
A puro golpe
Mariano Werner (Toyota Corolla), Omar Martínez (Fiat Línea), Matías Rossi, “Josito” Di Palma (Focus), Fabricio Pezzini (recibió un toque de Marcelo Bugliotti); Emiliano Spataro con el otro Fiat Línea, todos de una u otra forma “probaron” la dureza de los muretes que rodean el circuito. A todo esto Leonel Pernía se quedaba con la pole, seguido por sus compañeros Silva y López, después Fontana, el Focus de Ponce de León, el Astra de Yannantuoni, el Vectra de Ortelli, detrás su coequiper Ledesma. Después Moriatis con el Toyota del equipo satélite y Matías Rossi con el Renault. En tanto el representante del multimedios de Diario El Litoral, Maximiliano Baumgartner, renegaba con persistentes problemas de embrague y caja de velocidades en el Renault del equipo de Vitelli.
Partida
Después de diversos actos previos, exactamente a las 21.08 asomó la trompa del Chevrolet Astra de Fabián Yannantuoni, convirtiéndose en el primer auto en salir a pista para dar vueltas de reconocimiento a boxes abiertos (podían ingresar por cualquier desperfecto). Allí tuvieron problemas los Línea de Fiat, el “Gurí” Martínez pudo integrar la grilla, mientras que Emiliano Spataro tuvo que largar desde boxes. Mientras que no eran de la partida por no poder solucionar sus problemas después de las sendas piñas, Bugliotti y Marcelo Julián.
Temiendo algún prematuro encontronazo en la curva El Litoral (la 1), en la largada —tal cual sucedió el año pasado—, las autoridades de la prueba decidieron con muy buen tino, cambiar el lugar de la grilla de partida. Si bien fue en la misma avenida 27 de Febrero, se hizo del lado del este, tomando luego para la Alem.
A las 21.21 se puso en marcha la carrera y los Honda se fueron como flechas rumbo a la punta: Pernía, Silva y López, Rossi lo tocaba a Ledesma y abandonaba el otro Renault de Girolami, motivo por el cual antes de cumplirse el segundo giro ingresó el auto de seguridad.
Luego de la neutralización Pernía mostraba el iluminado camino, custodiados por Silva, López, Fontana, Ponce, Yannantuoni y el resto. Moriatis hacía el primer récord de vueltas y en la siguiente “Pechito” López era el más veloz.
Para olvidar la noche de Renault: los discos de frenos del Mégane de Matías Rossi tomaron tanta temperatura que hubo un principio de incendio sofocado rápidamente por los auxiliares del sector, pero el rombo se quedaba con las manos vacías. Mientras Maxi Baumgartner trataba de avanzar como podía, se tocaba con el “Gurí” Martínez. Ambos siguieron en carrera, pero con huellas inequívocas del choque.
A todo esto llegaba la maniobra de la carrera: Fontana lo apretaba a López y éste con esa “muñeca” endiablada le arrebató el segundo lugar a Silva, que el “Pato” ni siquiera atinó a nada, porque en un pestañar de ojos, ya tenía puesto el auto del cordobés.
Incidencias
El segundo paréntesis de la carrera se dio cuando la dirección hidráulica del Focus de “Josito” Di Palma se rompía en la curva Macua y quedaba cruzado.
En el relanzamiento, la punta era color Honda (blanco con celeste), detrás Fontana, bien Ponce de León con el Focus. Hasta aquí no lo nombramos a Martín Basso, quedaba relegado hasta allí a la posición 14 y el santafesino Baumgartner ganaba algunas posiciones. El tercer y último AS fue por el despiste de Fabricio Pezzini con el Renault.
Las últimas vueltas fueron un desfile de los New Civic de Pernía, López y Silva. Pero faltaba otro contacto: se pegaban en la última curva, Coscia que se bajaba muy enojado con Spataro por el toque. Fontana se brindaba por el espectáculo y terminaba cuarto. Más luego Ponce, Yannantuoni (vencedor entre los particulares), Moriatis (2º en el mismo campeonato), Ledesma y Ventana (completaba el podio de los privados). Mientras que Maxi Baumgartner culminaba en un decoroso 15º puesto final.