Mientras se descartan versiones

Otro video para reconstruir el

camino de la familia Pomar

No era de los Pomar el perro que ayer encontraron muerto, mientras un nuevo video muestra al grupo de familia en el peaje de la Ruta 7, próximo a Luján.

DyN

El misterio sobre el paradero de la familia Pomar sigue creciendo, aunque apareció un nuevo elemento que se sumó a la investigación: una nueva imagen captada en un puesto de peaje sobre la Ruta Nacional 7 mostró al matrimonio y sus dos hijitas dentro del vehículo en el que viajaban a las 19.49 del sábado 14 de noviembre, minutos antes de desaparecer.

El dato no es menor, ya que la única imagen que se conocía hasta ahora, también de una cámara de peaje pero en otro puesto, mostraba a Fernando Pomar, jefe de la familia, conduciendo el auto a las 20.07, aunque sin que se viera al resto de su familia.

La imagen en soledad de Pomar dentro del auto -sacando su cabeza y su brazo izquierdo por la ventanilla y gesticulando, al salir de una cabina de peaje de Villa Espil, en la Ruta Nacional 7- había generado versiones sobre la suerte que habían corrido su mujer, Gabriela Viagrán, y las dos nenas de la pareja, de 6 y 3 años.

Esa especulación también se reforzó esta mañana, cuando medios de comunicación dijeron que habían encontrado al perro de los Pomar asesinado de dos disparos y envuelto en ropas de mujer, tirado en un costado de la Ruta 7.

Sin embargo, los detectives a cargo de la investigación de la fiscal Karina Pollici desmintieron que el animal fuera la mascota de la familia desaparecida. No obstante, unos 150 policías se desplegaron en la zona de San Andrés de Giles, cercana al lugar donde apareció ese animal, en busca de alguna pista que pudiera develar el misterio.

Otra de las versiones que se escucharon en las últimas horas indicaba que la familia había sido vista en la provincia de Río Negro, pero las autoridades policiales también desmintieron la veracidad de esos rumores.

“Desconozco esa versión -dijo hoy Juan Pomar, padre del hombre desaparecido- . La última que tenemos es el paso del peaje por Espil, sobre Ruta 7. No tenemos ninguna novedad. Sólo seguimos con mucha confianza y mucha esperanza en la fiscalía de Pergamino y el personal de la DDI, en todas las autoridades que están trabajando.

Por su parte, María Cristina de Viagrán, madre de Gabriela, señaló que ya no sabe qué pensar y que hasta imagina que los secuestraron por error. “Me hago la idea de que se equivocaron de personas y ahora no se animan a largarlos. Lo único que queremos es tener noticias”, aseguró. Fernando Pomar, de 40 años, y Gabriela Viagrán, de 37, junto a sus dos hijas, Candelaria, de 6, y Pilar, de 3, salieron el sábado 14 de su casa de la localidad de José Mármol, en el sudoeste del conurbano. En un auto Fiat Weekend rojo iban supuestamente hacia Pergamino, donde Fernando hubiera tenido el lunes pasado una entrevista de trabajo. Pero nunca llegaron y nadie se puede explicar qué pasó.

En medio del misterio, el viernes pasado, los investigadores encontraron una filmación que mostraba a Fernando Pomar a las 20.07, pero la imagen no alcanzaba a mostrar el resto del pasaje del vehículo.

Testigos del peaje, sin embargo, dijeron que creían haber visto a la esposa y las nenas. Ahora, los investigadores encontraron la filmación del peaje anterior, llamado El Rodeo, en donde se confirma que -al menos hasta allí y hasta las 19.45/49- Pomar iba con su familia.

El horario coincide, además, con el momento en que los Pomar se habrían comunicado por teléfono celular con su familia de Pergamino para avisar que ya estaban en viaje y llegarían en poco tiempo más.

Ninguno de esos caminos llegan por vía directa hacia Pergamino porque hay que conectar con otras rutas: una posibilidad es desviarse, poco después de la entrada de San Andrés de Giles, por la Ruta 41 hacia San Antonio de Areco y desde allí ir a Pergamino por la Ruta 8; otra alternativa es ir hasta Chacabuco -más de 100 kilómetros más adelante-, siempre por la 7, y luego tomar la 30, enganchar la 188 y enfilar hacia Pergamino; y una tercera posibilidad es seguir por la 7 hasta Junín y desde allí tomar la 188 hasta Pergamino, aunque en este caso el viaje sería bastante más extenso.

El operativo rastrillo en zona rural continúa con la participación del personal de Caballería. También buscan desde el aire.

Foto: Télam

Desde el aire

Un helicóptero y un avión de la policía provincial se sumaron a los rastrillajes que se realizaban hoy en distintas rutas bonaerenses en busca de la familia Pomar, desaparecida el 14 de noviembre cuando se dirigía hacia la ciudad de Pergamino, informaron fuentes policiales.

“Continuamos con los rastrillajes en toda la provincia, especialmente estamos concentrados en el corredor de las rutas 7, 8, 41, 51 y 31”, aseguró a Télam un jefe policial a cargo de la investigación por la desaparición del matrimonio y sus dos hijas.

Según detalló, la zona “abarca una extensión muy grande de campos, por eso contamos con el refuerzo de un avión y un helicóptero de la División Aérea de la policía bonaerense y están participando al menos 100 hombres pertenecientes a la Jefatura Departamental de Pergamino”.

Los investigadores aseguraron que por día se reciben muchos llamados al teléfono de emergencias policiales 911 y que todos ellos se chequean.

“Sólo en jurisdicción de Mercedes recibimos en una noche cuatro llamados al 911. En uno decían que había una mujer enterrada en un monte y que podía ser la mujer de Pomar, en otro que de un campo salía un fuerte olor a podrido... Son chequeados y, por el momento, siempre fueron negativos”, dijo un pesquisa.

Durante la tarde ayer se realizó un intenso rastrillaje en una zona rural lindera a la ruta 7, entre el kilómetro 87 y el kilómetro 130, pero el resultado fue negativo.

Esperanza de madre

María Cristina, la madre de Gabriela Viagrán de Pomar, sostuvo que sigue confiando en que su hija, su yerno y sus nietas aparecerán de un momento a otro porque no puede ni pensar en que haya ocurrido una tragedia.

Cuando le preguntaron directamente si ella creía que estaban con vida, la mujer respondió: “Si mi corazón pensara de otro modo, no estaría latiendo. Tengo la fortaleza en la imagen de mi hija, que la voy a ver en cualquier momento”.

La mujer afirmó por C5N que son una “familia muy unida y solidaria”, señaló que en el matrimonio hay “una comunicación maravillosa” y reseñó que su hija es “la dulzura personificada”.

Sólo refirió que cuando su hija se casó con Fernando Pomar, él se convirtió en “una especie de autoridad” para el hijo mayor de la mujer, de un primer matrimonio, algo que, confió, a ella le molestaba un poco porque le obligaba a su nieto -por ejemplo- comer comidas que no quería.

Pero ella misma se dio cuenta de la levedad de su comentario y subrayó que no puede explicar qué ocurrió. Precisó que la Fiscalía y la Delegación de Investigaciones de Pergamino descartaron la hipótesis de secuestro.

Aclaró además que “en ningún momento” sospechó de una venganza que tampoco “hubo ninguna amenaza”. Cuando le preguntaron sobre una posible deuda de su yerno, la mujer afirmó: “Que yo sepa, tampoco; se metía (en gastos) hasta donde podía. Estaban restringidos todos los gastos, tenían la ayuda de la familia de él, cuando podían todos los ayudaban... Son familias bien constituidas, como madre tengo que estar feliz, todo bien”. Pero cuando una vez más le preguntaron qué pudo haber pasado entonces, María Cristina afirmó: “No tengo contestación, quiero pensar en positivo, pienso que en cualquier momento puedo tener buenas noticias. No encontramos explicación de lo que ha pasado”.