Signos de un nuevo tiempo político
Con quórum propio, la oposición decidió cuándo se iniciaba la sesión y si esperaba o no al oficialismo. La crítica de las barras y las fórmulas del juramento.
De la redacción de El Litoral
DyN
En un anticipo de los tiempos políticos que vienen, la oposición le cambió la costumbre a la Cámara de Diputados al decidir iniciar la sesión preparatoria sin esperar al bloque oficialista del Frente para la Victoria, que demoraba el ingreso, ante la falta de acuerdo con otras bancadas.
Después de una demora de más de una hora y media sobre lo previsto, 149 legisladores de la oposición recibieron con un ruidoso aplauso el paso rápido de la bonaerense ex kirchnerista Graciela Camaño, quien anunció que en su calidad de presidenta de la Comisión de Asuntos Constitucionales -la más importante del cuerpo- decidió iniciar la asamblea. Indescriptibles fueron las miradas de algunos espectadores “de lujo” en los palcos, como los sindicalistas Hugo Moyano, Julio Piumato y Omar Viviani, que ante ese panorama optaron por retirarse.
Tras el sorpresivo acceso al estrado, Camaño dio por iniciada la sesión y convocó a Lidia Satragno, Pinky, para que en su condición de diputada de mayor edad, encabece el comienzo de la reunión y pidió que una diputada santafesina Paulina Fiol izara la bandera. Sin embargo Fiol, incorporada al bloque oficialista, no estaba en el recinto, por lo que la misma Camaño colocó la bandera en el mástil y la elevó.
Un gesto para la barra
De inmediato, se puso a consideración la elección de presidente provisional, y el titular del bloque radical propuso que Pinky continuara en esa función, mientras el jefe de la bancada de Solidaridad e Igualdad (SI), Eduardo Macaluse, pidió un cuarto intermedio de 10 minutos a la espera de que el oficialismo se hiciera presente en la sesión, “como respeto al voto que también recibió el oficialismo en las últimas elecciones”.
La propuesta fue apoyada por las barras, pero reprochada desde sectores opositores, y a los pocos minutos comenzó a ingresar el bloque del Frente para la Victoria, encabezado por el titular Agustín Rossi y Carlos Kunkel. A los pocos minutos en medio de una enfervorizada manifestación de apoyo de las barras oficialistas y los abucheos de los opositores, ingresó al recinto rodeado de diputados y funcionarios el ex presidente Néstor Kirchner, quien avanzó con una sonrisa y mientras distribuía saludos a legisladores en sus bancas y a ministros e intendentes que asistían en un rincón del estrado.
Letra de juramento
El ex presidente integró la segunda tanda de diputados y juró por Dios, la Patria y los Santos Evangelios, junto a los oficialistas Kunkel y Cigogna, dos diputados de extrema lealtad con el ex gobernador santacruceño. El juramento de Kirchner fue saludado ruidosamente por la barra oficialista.
Elisa Carrió concentró gran parte de los gritos y las ironías de las barras oficialistas al jurar sólo por la Constitución, junto al radical Ricardo Gil Lavedra y la macrista Laura Alonso. Francisco de Narváez y Felipe Solá fueron los dirigentes más criticados en el momento de jurar por Dios, la Patria y los Evangelios.
Una jura especial tuvieron Gabriela Michetti y Alberto Triacca, ambos en sillas de ruedas y ambos del macrismo de Capital, quienes concurrieron al estrado junto a Pinky, quien les tomó juramento con la fórmula tradicional. Ambos se ubicarán juntos en el recinto junto a bancas que carecen de asientos, al lado de una puerta de entrada en el extremo izquierdo del recinto.
Gestos
Un diálogo particular se produjo entre Fernando “Pino” Solanas y las barras oficialistas que le reclamaron apoyo para Kirchner. Insistentemente, abrió los brazos, cerró las dos manos y puso los dedos hacia abajo, como cuando los emperadores romanos pedían la muerte de los gladiadores en el circo romano.
Una de las juras más comentadas fue la de la esposa del gobernador Jorge Capitanich, Sandra Mendoza, que lo hizo “por los desaparecidos, para que los genocidas no se disfracen de demócratas y por el pueblo chaqueño”.
