Presupuesto y reforma fiscal

Respuesta a Binner en el Senado

“Llevó más tiempo el momento de los saludos de fin de año que aprobar el presupuesto con reforma fiscal y todo”, comparó un asesor de bloque, de la oposición, que disfrutaba del resultado de la última sesión de 2009: en la Cámara alta las caras de unos y otros reflejaban un dato fuerte: el gobernador Hermes Binner deberá enfrentar el tercer año de su gestión con un presupuesto e impuestos podados por el PJ.

La ley ómnibus se votó (en cuarta revisión) en cuestión de minutos en la Cámara alta. Al sostener su despacho de mayoría, los senadores peronistas por una parte y los integrantes del Frente Progresista por otra, sabía que todo se encaminaba a la sanción la reforma impositiva al gusto del justicialismo, y sobre todo del ex ministro Juan Carlos Mercier, que preside la Comisión de Presupuesto y Hacienda. El oficialismo minoritario respaldó (otra vez) el proyecto que aprobó Diputados.

No hubo discursos sobre el proyecto que impuso la oposición que domina el Senado, pero sí una respuesta -muy serena- del presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales, Ricardo Kaufmann, a declaraciones del gobernador Binner de ayer.

El titular del Poder Ejecutivo -entre otros conceptos- puso en duda “la legitimidad” de la decisión política adoptada por la oposición de imponer esta herramienta de gobierno al Ejecutivo. Y lo hizo al advertir que los 13 legisladores del justicialismo tienen esas bancas con muchos menos votos que los que lograron los 6 del oficialismo (sobre todo por el padrón de Rosario).

El senador Kaufmann respaldó el principio de representación territorial que alienta la existencia del Senado santafesino, además del criterio demográfico.

Advirtió que los mandatos recibidos por los senadores electos en grandes territorios con pocos habitantes son tan legítimos como los obtenidos por sus pares en cuyos departamentos existen grandes urbes.

Como Binner puso citó el caso del departamento Garay que no tiene ninguna ciudad (y sin embargo su voto vale tanto como el de otros departamentos) y Kaufmann subrayó que ése era un mérito de la Constitución y del federalismo.

Habló del campo y la ciudad, y bregó porque en la provincia “no se sigan formando estas Cabezas de Goliat como existen en la Nación”, en obvia crítica a las ciudades más densamente pobladas y sus problemas.

También elogió a la Constitución santafesina que consagra en la Cámara de Diputados una mayoría fija (muchas veces llamada automática), que confiere al número de diputados por el oficialismo todos los resortes legislativos menos los dos tercios, es decir, las mayorías especiales que requieren el consenso de otra fuerza política de la oposición. “Asegura un piso de gobernabilidad, pero también un techo”, resumió.

Dijo que en el juego bicameral previsto por la Carta Magna santafesina -y en la realidad política actual- debe ser mayor el diálogo entre oficialismo y oposición y reclamó su apertura al Ejecutivo.

Ricardo Kaufmann, titular de la Comisión de Asuntos Constitucionales

Foto: Archivo/El Litoral