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Una piel linda también en verano

El mar, el cloro, la arena, el viento y el sol son enemigos para la belleza y salud de nuestro pelo y nuestra piel. Aquí, algunas claves de especialistas para cuidarnos y disfrutar sin problemas del verano.

FUENTE. SALUDYBELLEZA.ORG. FOTO. EL LITORAL.

El verano es la época en la que más nos exponemos al sol, es cuando buscamos estar bronceadas y la mayoría de las actividades que realizamos son al aire libre. Por eso, más que nunca, es tiempo de cuidarnos.

El sol, el agua con cloro o de mar, el viento y la arena dañan nuestra piel y nuestro pelo deshidratándolos. Las consecuencias no son alentadoras: pelo opaco, seco y con las puntas quebradizas, y una piel que pierde agua, su componente esencial.

Mantenernos hidratadas es vital para nuestras vidas. Entre el 50 y el 60% de nuestro peso está compuesto por agua. Este porcentaje debe mantenerse constante frente a todas las situaciones que tiendan a alterarlo. Durante el verano, la piel está muy propensa a la deshidratación. El sol es uno de los agentes más dañinos y de él recibimos los rayos infrarrojos, que son los que producen calor y deshidratación, y los ultravioletas, que modifican la estructura de la piel. La modifican porque atacan al colágeno, encargado de retener agua, y al deteriorarse, hace que la piel se reseque. Y con esto viene el envejecimiento.

CUIDADOS BÁSICOS

Para prevenir la deshidratación, es imprescindible tomar ciertos recaudos como ingerir abundante líquido y cuidar la piel con productos determinados que la mantengan sana y con la humedad necesaria.

Para proteger la piel, debemos utilizar productos que incluyan en sus fórmulas antioxidantes como las vitaminas A, C y E, coenzima Q10, hidrolizado de colágeno, aceite de oliva, caviar, ADN polimerizado, oro y cobre, con un gran potencial reparador y antiinflamatorio.

Estos tratamientos actuarán contra los radicales libres que maltratan la dermis y la epidermis durante la exposición solar. Podemos encontrar estos activos en diferentes vehículos, como geles y soluciones (especiales para pieles grasas), y cremas más emolientes (recomendadas para pieles secas).

PROTECCIÓN PARA EL CABELLO

No debemos olvidarnos de cuidar nuestro cabello. El 97 % de las personas utilizan protectores solares para el cuerpo y el rostro, pero este porcentaje no se mantiene en cuanto al cuidado del pelo. El sol, el agua de mar y el cloro dañan el pelo al igual que la piel; por eso hay que protegerlo con el mismo cuidado. En verano debemos cuidar el pelo con productos especialmente diseñados para esta estación. Y en el mercado podemos conseguir desde shampoo, acondicionadores, cremas de peinar, protectores y máscaras, todos con filtro solar, que protegen el pelo, y con vitaminas para fortalecerlo.

A la hora de exponerse al sol, debemos hacerlo aplicando previamente ciertos recaudos. Media hora antes de salir a la playa o a la pileta debemos aplicar primero, con la piel limpia, el producto diario de tratamiento para cada piel -una crema hidratante o anti age, por ejemplo- y luego la pantalla solar. Debemos reiterar el uso de la pantalla cada dos horas y después de sumergirnos. También, aplicar un protector para el pelo.

Pero principalmente debemos respetar el horario para la exposición y utilizar siempre un sombrero para proteger el cabello y el rostro.

El cuidado en los niños

Por otra parte, el verano es una época “especialmente propicia” para que los niños contraigan en playas y piscinas infecciones víricas como el molusco contagioso -aparición de pequeñas protuberancias de color rosado o carne en la piel-, o bacterianas como el estafilococo -provoca diarreas, vómitos y náuseas generalmente-, muy frecuentes y molestas pero que con un tratamiento adecuado se pueden corregir sin problemas.

Para evitar estas infecciones y otras irritaciones provocadas por el cloro y la salitre, se recomienda siempre que después del baño en la playa o en la piscina se tome una ducha con agua clara para eliminar los restos de cloro o salitre que hayan podido quedar en la piel.

más tips

ALOE VERA

Usar un shampoo y acondicionador con aloe vera, colocarlo por todo el cabello y dejarlo actuar 20 minutos, cubriendo la cabeza con un gorro o toalla húmeda.

REPARACIÓN

Usar un tratamiento capilar antes de entrar en la pileta o el mar. Al salir, lavarlo para remover los componentes nocivos para el pelo.

FILTRO

Aplicar una crema para peinar con filtro solar después de cada lavado para que mantenga y proteja la coloración del cabello.

HIDRATACIÓN

Beber abundante agua ya que la hidratación tanto de tu piel como de tu cabello provienen desde el interior del cuerpo.

Fuente: tratamientosbelleza.com.ar