En Melincué

El casino cambió los hábitos

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El interior del casino de Melincué. Un elevado número de los concurrentes, lo hacen diariamente, según el sondeo de opinión realizado.

Foto: Archivo/Aires de Aventura

Una encuesta elaborada por el diputado Fabián Peralta en el área de influencia de esta sala de juego en el sur, es reveladora del cambio de conductas sociales.

 

De la redacción de El Litoral

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El diputado nacional Fabián Peralta (GEN), en su carácter de presidente de la Comisión de Prevención de Adicciones y Control del Narcotráfico, llevó adelante un relevamiento sobre las consecuencias que ocasiona la instalación del casino de Melincué en la zona de influencia.

El legislador se ha caracterizado por realizar estudios vinculados con el consumo y tráfico de drogas pero esta vez ha comenzado a analizar las tendencias vinculadas con el juego.

El muestreo, que consistió en 300 encuestas domiciliarias, se concretó entre hombres y mujeres mayores de 18 años con residencia en las localidades de Labordeboy, Bombal, Elortondo y Carreras.

Datos significativos

Del relevamiento surgen las siguientes conclusiones:

* El 73% indica que el casino de Melincué cambió los hábitos de los ciudadanos de la zona.

* El 44,8% de los consultados afirma que esos cambios fueron negativos.

* El 82,8% de los encuestados conoce a alguna persona que asiste habitualmente al casino, y el 69,4% de este grupo, asegura que dichas personas concurren diariamente.

* El 37,7% dice conocer a alguna persona que se ha perjudicado a nivel económico o familiar por la presencia del casino.

Propósito

El legislador nacional señala que su intención fue poner en debate las consecuencias sociales, psíquicas y económicas que traen las instalaciones de las salas de juegos. “Creemos que el Estado debe concientizar a la población sobre la ludopatía, que es un problema de salud grave; y que detrás de la imagen de progreso, confort y lujo que se muestran en los casinos, sus consecuencias pueden convertirse en verdaderos dramas”.

Peralta destacó asimismo que es muy interesante hablar con los comerciantes de las localidades. “Ellos refieren -dijo- a la escasez de circulante de dinero y al deterioro de las cadenas de pagos en los propios comercios”.

“Nosotros suponemos que el casino de Rosario no es, ni va a ser, la excepción. No alcanza con los programas de juego responsables. El Estado debe ser mucho más agresivo con esta problemática”, opina el diputado santafesino.

Hoy por hoy las salas de juegos obtienen grandes ganancias, tienen concesiones por muchísimos años, no tributan de acuerdo con sus ganancias y no se hacen cargo de los trastornos de salud que ocasionan, señaló Peralta.

En Rosario

El legislador del GEN hizo referencia a estudios realizados en otros países que arrojan que entre el 2 y 3 % de los habitantes mayores de 18 años sufre directa o indirectamente trastornos por el juego, “lo que implicaría que entre 20 mil y 25 mil habitantes del Gran Rosario son potenciales ludópatas”, indicó en relación con el casino de Rosario.

La ludopatía es considerada una enfermedad por la OMS desde 1992 y es definida como un trastorno caracterizado por episodios repetitivos y frecuentes de participaciones del individuo en juegos de apuesta. “Sabemos que las consecuencias para el jugador y su familia son devastadoras desde el punto de vista laboral, social y humano”, concluyó el legislador del GEN.

Los comerciantes hacen alusión a la escasez de circulante de dinero y al deterioro de las cadenas de pagos en los propios comercios.

Fabián Peralta,

legislador del GEN