La situación legal aún no está resuelta

Redrado renunció aunque el gobierno insiste en echarlo

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Redrado, en conferencia de prensa, en un hotel, anunció su salida del Banco Central no sin antes defender su gestión en la defensa de la moneda.

Foto: DyN

El saliente presidente del Banco Central acusó al Ejecutivo de avasallar las instituciones. El jefe de Gabinete dijo que esperarán el dictamen de la comisión del Congreso. Posturas divididas de la oposición sobre si debe o no existir pronunciamiento legislativo.

 

De la redacción de El Litoral

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Martín Redrado renunció anoche al cargo de presidente del Banco Central, al cabo de 23 días de una aguda crisis política y denunció que el gobierno hizo un atropello de las instituciones. Mientras daba una conferencia de prensa en un hotel capitalino, debió salir al cruce de declaraciones del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, quien había expresado que “el gobierno no le aceptaría la renuncia” y dijo que, “si el gobierno desconoce mi renuncia, quiere decir que sigo siendo presidente del BCRA, cosa que el gobierno desconoce, con lo cual siguen las incongruencias por parte del gobierno”.

La Casa Rosada aseguró que no aceptará la dimisión de Redrado y esperará hasta que la comisión parlamentaria se pronuncie el martes. “Para nosotros la renuncia no existe. Debería haberla presentado antes y no después de haber sometido a los argentinos a este sainete, a este mamarracho”, declaró el jefe del Gabinete de ministros.

Redrado puntualizó que “hemos llegado a esta situación por el avasallamiento a las instituciones que hace el gobierno nacional. El gobierno quiere llevarse por delante las reservas de todos los argentinos y llevarse todo puesto”. Remarcó que “hice lo correcto y dejo el Banco Central plenamente satisfecho. La presidenta buscó ilegalmente mi remoción, lo que era necesario era que el presidente del BCRA reportara a la comisión parlamentaria, pero lamentablemente el gobierno se llevó todo por delante”.

El funcionario saliente expresó que fue la primera vez que no se respeta al BCRA en cinco años. Más adelante, denunció que en 2008 hubo muchas presiones para que se devaluara la moneda y sostuvo que “se evitó por firmeza que pusimos en la política cambiaria”. Redrado reiteró: “Creo que mi ciclo está terminado y quiero que esto sirva para dar vuelta la página”, y calificó su renuncia como un “gesto republicano”.

Por otra parte, deslindó toda responsabilidad de su gestión en la conformación de los índices de inflación. “Muchos creen que con la tasa de interés y el tipo de cambio se puede manejar la inflación, pero esto no es así porque el 90 por ciento de la economía se maneja en efectivo y el mercado de crédito representa apenas el 12 por ciento”.

El ex presidente del BCRA dijo que “el atropello pudo más y no pude hacer nada, decidí cumplir con todos los pasos institucionales. Durante 5 años y 4 meses de gestión pudimos brindar estabilidad financiera, monetaria y predictibilidad cambiaria. No cerró ningún banco, no tuvimos problemas cambiarios y dimos tranquilidad”.

En otro tramo, expresó que “el gobierno ha tratado de avasallar la independencia del BCRA, he buscado cumplir con todos los pasos institucionales, pero el decreto 18/2010 me impide cumplir con mi rol al frente de la entidad”.

Luego se sinceró y remarcó: “Siento que mi ciclo en el BCRA se terminó. Dejamos un BCRA muy sólido. Últimamente sólo escuchaba: “Martín, por qué no entregas los fondos’”, confesó Redrado. Agregó luego que “no he resistido 23 días, he dado todos los pasos para hacer un alejamiento ordenado. No tengo más acto republicano por realizar”, concluyó Redrado.

La oposición dividida

Fernández en forma inmediata afirmó que “la renuncia no existe; hay que esperar el dictamen de la comisión”. El jefe de ministros fue la voz oficial, mientras la presidenta pasa el fin de semana en su residencia en El Calafate.

La oposición disintió en su postura sobre lo que debería pasar ahora: el radicalismo consideró que el trámite parlamentario debe darse por cerrado, mientras que Elisa Carrió (Coalición Cívica) y Francisco de Narváez (peronismo disidente) reclamaron que la comisión especial de todos modos emita su dictamen sobre Redrado.

En medio del debate, el ministro de Economía, Amado Boudou, descalificó al renunciante con duros términos. “Mientras Redrado se dedica al teatro, seguimos trabajando con el canje para salir del default y lograr el regreso a los mercados”, explicó el ministro, en diálogo con el diario La Nación.

La intención del gobierno ahora es avanzar con el uso de las reservas, tal como lo había planteado en el Fondo del Bicentenario, frenado por la Justicia hasta su tratamiento en el Congreso. Ya tendría resuelto mantener hasta septiembre al frente del BCRA al vicepresidente en ejercicio de la presidencia, el radical kirchnerista Miguel Pesce, pero sin enviar su pliego al Congreso para evitar un probable traspié.

Después podría insistir con Mario Blejer, que ya presidió el banco en 2002, y que fue sondeado a principios de mes. Redrado admitió anoche que tuvo una conversación con Blejer, en la que el ex funcionario del Fondo Monetario Internacional (FMI) le expresó que, hasta que no se resolviera el conflicto en torno de las reservas, no tiene deseos de volver a sentarse en ese sillón caliente.


Fernández, la voz oficial

El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, ratificó esta mañana que el gobierno no le va a aceptar la renuncia al presidente del Banco Central, Martín Redrado, al insistir que “hay que esperar que se expida la Comisión Bicameral del Congreso”. Además, aseguró que el futuro del denominado Fondo del Bicentenario “está tan vivo como en el primer momento”, y uno de sus objetivos es la previsibilidad.

Fernández reiteró sus críticas hacia Redrado al subrayar que “parece que estuviéramos escuchando a Mariano Moreno” por sus expresiones.

Afirmó además que “la solidez de la economía argentina hizo que las cosas no se complicaran” cuando Redrado se negó a destinar 6.500 millones de las reservas del Banco Central para pagar la deuda pública.

Reveló además que Redrado “se negó históricamente a acumular reservas” del Banco Central y que ante esa negativa proponía su renuncia indeclinable.

“Cuando lo llamé para decirle que la presidenta le había aceptado la renuncia, se negó a hacerlo”, recordó Fernández al agregar que “pidió que lo sacaran por el sistema de remoción” que establece la carta orgánica del Banco Central. Así explicó las razones por las que el Ejecutivo no acepta la dimisión del desplazado titular de la entidad monetaria mientras la Comisión Bicameral elabora su recomendación al Poder Ejecutivo.

“El gobierno se quiso llevar todo puesto para usar las reservas, que son el respaldo del ahorro de todos los argentinos. Ya lo había intentado hacer varias veces, pero yo puse límites: comprar YPF, cambiar la Carta Orgánica y colocar un título compulsivo al sistema financiero”.

Martín Redrado.

renunciante presidente del Banco Central.