Llegan Cartas
Cartas en el asunto
Viviana Gambini.
DNI: 12.696.754
Señores directores: Quisiera mediante esta carta dirigirme al intendente Ing. Mario Barletta. Quisiera expresar lo que siente una ciudadana que tiene sus impuestos al día, a pesar de los aumentos, y que con la lluvia pasada tuvo que pasar por una situación que, si ninguno de ustedes lo vivió, no sabe lo que se siente, cuando toda la familia trata de frenar la entrada del agua a nuestra casa, pero se torna imposible y hay que sentarse, llorar, angustiarse y esperar que alguien se digne a hacer algo por esta realidad. Es la tercera vez que la pasamos: en 2007 (otra gestión), en noviembre de 2009 y en febrero de 2010.
Vivo en Avellaneda 7628, Guadalupe Oeste, no barrio Chaqueño, desde hace 51 años, y hasta el año 2007 jamás había tenido que pasar por esta horrible situación. Cada vez que hay alerta meteorológico, perdemos la paz, no podemos ni dormir.
La inundación afectó nuestros bienes materiales (casa, muebles, pisos que se arruinaron; y lo invito a pasar mañana mismo por mi domicilio para corroborarlo). Los habíamos colocado luego de 2007 porque pensamos que alguien responsable iba a tomar cartas en el asunto y no volvería a ocurrir.
Quiero que sepa también que nunca pedimos un peso para solucionar el problema, no cobramos planes sin trabajar, no cobramos $ 180 por hijo sin trabajar. Trabajamos, y exigimos una solución a este problema, ya.
Debe saber también que esta situación me llevó en noviembre a ponerme en manos de profesionales, debiendo ser medicada y tratada, ya que el estrés provocado por la situación afectó mi sistema nervioso y emocional. Hasta pensamos en vender la casa, una casa que queremos con el corazón, porque fue hecha por nosotros y está llena de recuerdos de nuestras vidas. ¿Es justo que en el transcurso de esta gestión se hayan preocupado por las plazas, los “playones”, los parquímetros, la Estación Belgrano, y se despreocuparan de algo tan importante para muchos, que pasan lo mismo que nosotros?
Pago mis impuestos. No somos ningunos morosos y ayer corroboramos que no hay mucho control con respecto a cómo extremar las medidas para evitar estos problemas, ya que mi esposo y otros vecinos fueron a ver si funcionaban las bombas (Guadalupe Oeste) y ¡oh, sorpresa!, de dos, funcionaba una y, cuando la otra paró por un corte de luz, el grupo electrógeno no estaba.
En fin, creo que si usted lee esta carta se dará cuenta cómo nos sentimos, mi familia, yo y todos mis vecinos, es por eso que, como último comentario, si me permite, es para recordarle que cuando estaban en campaña se llegaron hasta nuestro barrio buscando votos, y los consiguió. Quiero que de la misma manera alguien se llegue hasta aquí nuevamente, porque ahora nosotros necesitamos de ustedes.
