En San Lorenzo

Bruno Baldini, campeón nacional

El deportista nacido en La Paz y que hace dos años vive en Santa Fe es el nuevo monarca en categoría Elite de triatlón short.

 
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La pareja ideal. Baldini y su Jamis, la bicicleta que lo acompaña en cada competencia.

Foto: Flavio Raina

De la redacción de El Litoral

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Bruno Baldini nació en La Paz, una ciudad a la que en el ámbito deportivo se la conoce por ser sede del triatlón más importante de Sudamérica. Ése fue uno de los motivos por los que este joven de 20 años decidió, hace casi una década, comenzar la práctica de este deporte, el cual de dio recientemente la alegría de consagrarse campeón argentino en la localidad de San Lorenzo, en el sur de la provincia de Santa Fe.

El título lo obtuvo en categoría Elite, la máxima a nivel nacional, y a la distancia se la denomina short, algo que Bruno explicó: “El triatlón short es el recorrido que le sigue al super sprint. Son 750 metros de natación, 20 kilómetros de ciclismo y 5 de pedestrismo; es decir, la mitad del triatlón olímpico, que es más largo. Ésa fue la carrera que se disputó en San Lorenzo, la cual gané y, por ser única fecha, salí campeón argentino, en categoría Elite; eso quiere decir que participaron los mejores exponentes del país, que son semiprofesionales”.

—¿Qué te decidió a practicar este deporte?

—En La Paz se hace todos los años el triatlón más importante de Sudamérica, ése fue uno de los motivos que más me impulsó; otro fue el hecho de que en la escuela, de 20 chicos, 15 hacían triatlón, eso también me incentivó.

—¿Y por qué viniste a Santa Fe?

—Vine hace dos años para tratar de superarme en lo deportivo, y también para empezar una carrera terciaria o universitaria, porque en La Paz no tengo esa posibilidad, acá estoy estudiando el profesorado de Educación Física.

—Sos muy joven, pero ya tenés varios logros... ¿Hiciste un balance de tu rica trayectoria?

—Sí, aunque no tan profundo. Uno nunca se conforma con lo que logró; si pasara eso, sería complicado progresar, pero creo que lo que logré hasta ahora es muy positivo, aunque tengo una deuda pendiente, que es la de ganar el triatlón de La Paz en junior, algo que no pude hacer, llegué a hacer podio un par de veces, buscaré ganarlo en Elite, vamos a ver.

—¿Quién te arrebató el primer puesto?

—La vez que estuve más cerca de ganar, el que me superó fue Luciano Taccone, un chico de Capital Federal con el que hoy en día somos muy amigos, fuera del deporte, porque en las competencias somos rivales. Con el que se armó una especie de clásico en La Paz es Juan Domínguez, que también nació ahí, pero vive en Buenos Aires.

Es una lucha...

—¿Qué virtud fundamental debe tener un triatleta?

—En principio, muchas ganas, porque no hay que olvidarse de que en este deporte se entrenan tres disciplinas para competir en una. Hay que tener un convencimiento de que lo que se hace se siente de corazón, un triatleta nunca podría entrenar o competir bajo presión o sin ganas de hacerlo.

—Para eso también es importante el apoyo externo, como el económico, por ejemplo.

—Seguro. Cuento con el apoyo infinito de mis padres y de un grupo de amigos que me ayudan en todo, Fabián López, Pablo Pascualón, Matías Georgetti, Ramón Neyra, “Cachito” Mastandrea y, por supuesto, mi entrenador, Rafael Zenklusen, pero lo fundamental es achicar gastos de todos lados para ir juntando y poder viajar a algunas competencias. Tengo una beca de la nación, pero nunca me alcanza. El gobierno de Entre Ríos también me ayuda un poco, pero, fundamentalmente, mi familia y mis amigos son los que mayormente me “bancan”.


El día a día.

El entrenamiento de Bruno consiste en correr no menos de 10 kms diarios (a veces hasta 22 kms, según la competencia a participar) en la costanera Este. Luego nada en la pileta del Club de Gimnasia y Esgrima; y finalmente pedalea alrededor de 300 kilómetros semanales, uniendo las dos costaneras santafesinas.