Intenso debate
Un Senado bajo presión vota
la ley sobre matrimonio gay
El kirchnerismo descartó el proyecto de unión civil. El jefe de la bancada oficialista, Miguel Pichetto, admitió que será una definición “muy cerrada”. Ayer, una multitud defendió el matrimonio tradicional.
De la redacción de El Litoral
En un clima de máxima confrontación, al cierre de esta edición, el Senado nacional sesionaba para resolver si acepta o rechaza la ley de matrimonio entre personas del mismo sexo, que tiene media sanción de la Cámara de Diputados.
Ayer, el kirchnerismo se mostró confiado en poder darle sanción definitiva a la norma que equipara los derechos de las parejas homosexuales con los de las heterosexuales. Esta mañana, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, manifestó su optimismo y vaticinó un debate de “varias horas”.
Sin embargo el jefe bloque oficialista de senadores, Miguel Pichetto, reconoció que la votación “será muy cerrada”. Primero se iba a poner a consideración el “rechazo” al matrimonio gay que aprobara Diputados, según lo propone el despacho de mayoría de comisiones de la Cámara alta. Si ese rechazo gana la votación, el tema no podrá volver a tratarse este año.
Pero si, como se prevé, la mayoría desestima ese rechazo, se habilita el tratamiento en general del proyecto ya aprobado en Diputados. Si esa instancia gana la votación, entonces avanza el análisis en particular, instancia en la que el radicalismo propondría cambios que podrían hacer regresar el expediente a la Cámara baja.
Sólo si supera esas votaciones con su propio criterio, el kirchnerismo podrá imponer la voluntad de Néstor. La mandataria y su esposo avalan la iniciativa tal como llegó desde Diputados, y esperan que hoy sea ley.
Los votos
En los últimos días, Pichetto logró adhesiones clave para aprobar la norma. Entre ellas, la del presidente provisional del Senado, José Pampuro, y las de Elida Vigo, Teresita Quintela y José Mayans. Uno de estos legisladores, que se autodefinió como “no convencido”, dijo ayer que igual votará por el matrimonio homosexual.
“Tras las declaraciones agresivas de la Iglesia, esto dejó de ser un tema de libertad de conciencia y no nos queda otra que actuar como soldados”, explicó. Los Kirchner también tendrían el aval de otros renuentes, como el puntano Daniel Pérsico y Graciela Di Perna, cuñada del gobernador de Chubut.
El radicalismo y otros bloques minoritarios aportarán 13 votos fundamentales. Pero el jefe del bloque, el jujeño Gerardo Morales, junto al mendocino y presidente de la UCR, Ernesto Sanz, el santacruceño Alfredo Martínez, y el correntino Eugenio “Nito” Artaza, propondrían -durante la votación en particular- no asignar el término “matrimonio” a la unión homosexual.
En principio el kirchnerismo logró frenar el proyecto de unión civil que impulsaban radicales y peronistas disidentes. El bloque K entiende que se trata de un despacho inconstitucional porque obvió el hecho de que Diputados, como cámara de origen, ya sancionó el matrimonio gay y rechazó la unión civil.