ACLARACIONES DE DAMIÁN RODRÍGUEZ KEES

“Son independientes, pero en un espacio del Estado”

El secretario de Cultura de la Municipalidad niega un “accionar arbitrario” por parte de su área y subraya que “El Birri siempre contó con el aval municipal”.

1_lc.jpg

Damián Rodríguez Kees se remitió al Convenio de Comodato que firmaron la Municipalidad y El Birri en 2008. Foto:LUIS CETRARO

ENTREVISTÓ ANA LAURA FERTONANI

[email protected]

A partir de la denuncia pública que concretó el Centro Cultural y Social El Birri a la Municipalidad de Santa Fe por “accionar arbitrario”, el secretario de Cultura, Damián Rodríguez Kees, formuló sus pertinentes aclaraciones. En su extensa exposición enarboló la cláusula 15º del Convenio de Comodato entre la Municipalidad y la asociación civil firmado en octubre de 2008 que leyó: “El Birri adoptará todas las medidas conducentes a evitar molestias que puedan generarse para los vecinos del predio. En este sentido, realizará las actividades generadoras de ruido, como recitales, ensayos, pruebas de sonido, talleres de música y similares, en días y horarios que sean razonables y que no impliquen un exceso a la normal tolerancia de los vecinos”.

“Toda actividad o evento cuya realización sea programada al aire libre, en las inmediaciones del inmueble, deberá contar con la autorización expresa de la Secretaría de Control de la Municipalidad de Santa Fe, por lo cual deberá confeccionarse un informe detallado de la actividad a realizar”. Y agregó: “La Secretaría de Control interviene y les dice que no porque es en la calle, y por el contexto de que hay una disconformidad de los vecinos”.

El funcionario aseguró que “hay denuncias de los vecinos, no sólo por los ruidos molestos, sino también nos alertan de otro tipo de actividades que no son conducentes para un centro cultural” y mostró las copias de tres denuncias que, según apuntó, llegaron vía mail y por el 0800.

CONFIANZA

El responsable del área comenzó contando “la historia del centro”: “Los chicos del Birri tienen un discurso de artistas independientes, alternativos; con respecto a esos conceptos lo del arte alternativo, nosotros desde la Municipalidad de Santa Fe trabajamos desde el principio de la gestión en darle espacio a aquellas expresiones artísticas que no tienen oportunidad en los medios masivos de comunicación. Por ese lado tenemos una coincidencia conceptual, es más, muchos de los artistas que contratamos pertenecen al Centro Cultural El Birri y tenemos tres permanentes. Ahí entra el otro discurso, el de independiente: en 2008, yo personalmente, terminé de convencer al Ing. Barletta para que firme un Convenio de Comodato con El Birri. Después de arduas y difíciles discusiones llegamos a un acuerdo: la Municipalidad firma que le autoriza la utilización de una parte de la Estación Mitre para que ellos hagan la gestión cultural de la misma. Hay partes que son exclusivas de la Municipalidad, otras del Centro Cultural y otra de uso común que es el hall. Con esto quiero decir que la Municipalidad de Santa Fe y yo especialmente tuvimos toda la confianza del mundo con este grupo y poder llegar a trabajos conjuntos, cooperativos y nos encontramos con una respuesta corporativa, donde evidentemente se autogestionan como grupo independiente pero están en un espacio del Estado. No pagan alquiler, no pagan impuestos, no pagan servicios. Fue en 2008 un acto de confianza brindarles un espacio”.

—¿Pero ellos no venían trabajando ahí?

—Sí, ya venían con una papelería un tanto informal, viviendo en ese lugar. Una de las cosas que dice el convenio es que no pueden vivir ahí y entonces llegamos a algunos acuerdos. Durante estos dos años algunas cosas hemos podido trabajar juntos y otras no. Como actores culturales independientes hacen todo su desarrollo de manera autónoma y después nos piden a nosotros avales institucionales y auspicios, cosa de no tener que pagar los cánones municipales en los espectáculos que hacen. Yo firmé todos ellos, siempre tuvieron nuestro aval. Qué ocurre con estos casos puntales (Fiesta Revuelta que se realizó el sábado pasado; y el Festival Somos Latinoamérica previsto para el próximo domingo): de Fiesta Revuelta yo me entero por un volante (...) La Secretaría de Control les dice que no porque empieza a las 23.30, es momento de emergencia nocturna y no tiene que ver con el objeto del convenio, es una fiesta, baile, con barra. Control siendo muy estricto con el sector privado no puede dejar pasar esto porque estaría cometiendo una injusticia.

Me enteré de casualidad por este volante (lo muestra), porque nunca nos avisan, no informan de nada. Eso habla mal hasta de nosotros mismos porque tendríamos que controlar qué es lo que hacen ellos y justamente por una actitud de confianza, demostrarles que son libres, que son independientes, que pueden gestionar el lugar de acuerdo con el convenio, los dejamos actuar. Y una vez que les decimos “no señores, esto no es una actividad cultural es una fiesta’, nos vienen a decir que les prohibimos actividades culturales, y lo hicieron igual.

Lazos de confianza

Rodríguez Kees muestra una copia con un acta en el que consta la presencia de un grupo en vivo, sin firma por parte de la asociación civil. “O sea que desconocieron la autoridad municipal”, señala.

—¿Qué quiere la Municipalidad del espacio cultural?

—Establecer lazos de confianza en los cuales ellos tienen que aggiornarse a que es un espacio público, del Estado, que son independientes hasta cierto punto, que no pueden hacer lo que quieren. Pueden hacer actividades culturales, no fiestas.

—Tengo entendido que el Proyecto Revuelta es de un grupo que está trabajando en la Vuelta del Paraguayo.

—Nosotros tenemos cantidad de proyectos sociales en territorio: en Yapeyú, Cabaña Leiva, Las Flores en todos lados, un proyecto cultural, no una fiesta a las 12 de la noche de un sábado para comunicar lo que están haciendo. No mezclemos la cosa, tenemos cantidad de trabajo social pero no hacemos una fiesta un sábado a la noche.

—¿Las denuncias que llegaron son de vecinos del Birri?

—Sí, de las inmediaciones y una de ellas es reiterada. Nosotros no estamos en contra de ellos si no hubiéramos firmado el convenio. Yo estoy muy triste porque personalmente le di mi palabra al intendente para decirle “no vas a tener problemas, vamos a trabajar juntos, y es lo mejor que le puede pasar al ferrocarril Mitre que estén ellos ahí”.

—¿Por qué un “no” de respuesta revoluciona a un montón de gente, de instituciones?

—Son las mismas. Porque se han manejado muy bien en su discurso en una postura de artista independiente alternativo castigado por el Estado, cuando en realidad no fue así. Lamentablemente las agrupaciones que se sumaron no preguntaron por la otra campana; y yo entiendo que el discurso es seductor no sólo ante los medios sino también ante organizaciones de derechos humanos, agrupaciones políticas de izquierda, pero no nos dejemos engañar, acá el gobierno municipal no está en contra, no está prohibiendo como dice el titular del diario, hay dos eventos a los que les dijo que no.

—¿Qué va a pasar este fin de semana con el Festival?

—Vamos a ver qué resolvemos, hay una postura de que lo van a hacer igual y están desconociendo la autoridad municipal. Es una pena porque están generando un conflicto y vamos a ser muy claros: eventos como Sonamos Latinoamérica dura varios días y en la ciudad hay eventos durante todo el año, muchos y de mucha calidad, inclusive hasta de manera superpuesta, es decir se está generando un conflicto en algo que es fantástico pero que en el contexto de toda la programación del año es pequeño.