En Berazategui

Otro detenido por la muerte de Ferreyra

DyN

Un empleado ferroviario que al parecer integra la barrabrava de Racing fue detenido ayer en Berazategui en el marco de la causa que investiga el crimen del militante del Partido Obrero, Mariano Ferreyra, con lo cual ya son seis los acusados a disposición de la Justicia.

El detenido fue identificado como Gabriel Sánchez, quien es guardatrén en la estación Constitución y había sido señalado por el primer arrestado en la causa, Cristian Favale, como presunto autor del disparo que mató al joven

Sánchez, de 34 años, fue detenido por la División Asuntos Internos de la Policía Federal en un operativo conjunto con la fuerza de seguridad bonaerense en la localidad de Berazategui.

Las fuentes señalaron que en la vivienda allanada en la calle 30 y avenida Vergara, donde fue arrestado Sánchez, la Policía se incautó de un arma de fuego que será sometida a pericias.

La detención fue ordenada por la jueza Susana Wilma López que mantiene a cinco hombres arrestados en la investigación por el crimen perpetrado hace dos semanas en el barrio de Barracas tras una protesta de empleados tercerizados.

Entre los detenidos, se encuentran Pablo Díaz, jefe de los delegados gremiales oficialistas de la Unión Ferroviaria en la línea Roca, el afiliado Juan Carlos Pérez, Cristina Favale, el guardabarreras Francisco Pipito y el delegado Jorge Daniel González. Díaz está acusado de haber reclutado y comandado la patota desde la que partió el balazo que mató a Ferreyra.

Juan Carlos Pérez, portero del taller ferroviario de Remedios de Escalada fue arrestado porque, en imágenes televisivas, se lo ve acomodándose en la cintura algo similar a un arma de fuego.

En su descargo en la Justicia, alegó que sólo se acomodaba el pantalón.

Favale, señalado como autor material del asesinato proclamó su inocencia pero Pérez dijo a la Justicia que el barrabrava de Defensa y Justicia había asegurado, respecto de Ferrerya, “Yo lo puse”.

Pipito y González fueron acusados de amenazar a la periodista de televisión Gabriela Carchak y a un camarógrafo en Barracas para que no registraran el ataque.