Un Grondona en su casa

... Y apareció don Héctor

Uno de los integrantes de una familia fuertemente arraigada al fútbol argentino. Foto: Archivo El Litoral

Enrique Cruz (h)

(Enviado Especial a Buenos Aires)

Héctor forma parte del “clan” Grondona (es hermano del presidente de la AFA). Fue delantero de Arsenal, luego presidente del club y después fue titular de Independiente, donde le tocó asumir con un equipo que peleaba el campeonato —aquél de Menotti de 1997— y luego, a fines de ese año y tras haber contratado a Gareca, perdió aquella final para entrar a la Libertadores a manos de Colón (el gol de Saralegui en cancha de Lanús).

Ayer estuvo en la cancha de Arsenal y recordó memorables tiempos en los que Héctor jugaba y debía enfrentar a Colón. “Era difícil la cancha de Colón. Me acuerdo que a principios de la década del “60, Colón estaba en la “C’ y había que ir a jugar a esa cancha. De los jugadores, el que más recuerdo es Jorge Omar Sanitá. Un tipo de gran categoría y personalidad, un emblema del Colón de ese entonces, al que me tocó enfrentar”, señaló Héctor Grondona.

—¿Viene a despuntar el vicio?

—Siempre me gusta estar cerca de Arsenal y de Independiente, que son los clubes de mis amores. La gente que hoy gobierna lo está haciendo bien.

—¿Cree que es bueno el gobierno de Comparada?

—Si Independiente gana la Copa, Comparada será un genio y estará todo bien; en cambio, si pierde la Copa, seguramente la gente dirá que la gestión es muy mala y que los dirigentes no sirven para nada. Si ganamos está todo bárbaro y si perdemos, la gente se olvida de las cosas que se pudieron hacer bien. Así es el fútbol.

—¿Hay problemas económicos en Independiente?

—Muchos... Independiente tiene un gran pasivo, las recaudaciones de la TV están comprometidas y el dinero que ingresa al club es por recaudación societaria y recaudación de partidos. Si a esto último le quitamos lo que se gasta en este país en operativos policiales, que son muy costosos, lo que queda es poco. Por eso el dinero no alcanza.

—¿Cree que una gestión se puede medir exclusivamente por un resultado?

—Yo seré bueno o mal dirigente según el equipo gane o pierda en la cancha. Esa es la realidad del fútbol argentino.

—Una realidad ingrata, porque hay clubes que están haciendo bien las cosas...

—Ya lo sé, pero eso es algo que podrás ver vos y algún otro más. La gente mira el resultado del fin de semana y se queda con esa imagen, lamentablemente. Por eso existen las internas en los clubes. Fijáte el caso de Colón, que es un club que anda bien, que está haciendo muchas cosas. ¡Hasta Colón tiene oposición! Es ingrato para un dirigente que todo se mida por un resultado, pero la gente tiene que ver otras cosas.

—¿Qué opina de las barras bravas?

—Que es un mal que existió, existe y existirá... Y todos somos responsables.

—¿Qué se puede hacer?

—Tenemos que trabajar todos, no solamente los dirigentes.

—¿Usted lo sufrió?

—Te cuento algo que me pasó: cuando era presidente de Independiente, no le daba entradas a la barra. Un día fueron a la escuela de mi nieto... ¿Qué querés que haga?, si yo no soy Gardel. Todos somos responsables de la existencia de las barras.