Vargas Llosa emocionado
DPA
El flamante Nobel de Literatura 2010, el escritor peruano Mario Vargas Llosa, compareció casi sin voz en un acto en el Instituto Cervantes de Estocolmo debido a lo que él mismo calificó de “excesos verbales” en los últimos días.
“Los excesos verbales de los últimos días me han guillotinado la voz”, empezó el escritor su corta intervención de apenas 11 minutos en el local ubicado en el centro de Estocolmo, muy cerca a la Sala de Conciertos donde el viernes recibirá el Nobel.
“Ya no tengo que cuidarme porque ya la perdí del todo”, bromeó también Vargas Llosa con una visitante que lo conminó a cuidar su voz.
En el acto estuvieron el ministro de Cultura peruano, Juan Ossio, así como su homóloga española, Ángeles González-Sinde. Vargas Llosa tiene desde 1993 también la nacionalidad española.
En la mesa estuvo además la directora del Instituto Cervantes, Carmen Caffarel. En el acto se presentó la exhibición “Mario Vargas Llosa, la libertad y la vida”, una muestra elaborada en cooperación con la Pontificia Universidad Católica del Perú y que estará en la capital sueca hasta el 20 de enero.
Su amigo, sorprendido
El pintor peruano Fernando de Szyszlo, considerado por muchos como el amigo más íntimo de Mario Vargas Llosa, cree que las emociones mostradas el martes por el escritor al pronunciar su Discurso Nobel son algo poco usual en él.
Fue un momento “muy conmovedor, muy conmovedor. Mario no es dado a unas efusiones así, sentimentales. Estuvo realmente conmovido y al borde del llanto”, dijo De Syzszlo durante un homenaje al flamante Nobel de Literatura en el Instituto Cervantes de Estocolmo. Vargas Llosa sollozó cuando habló de su país natal y de su esposa, Patricia, durante su intervención ante la Academia Sueca la tarde del martes.
“El Perú es Patricia, la prima de naricita respingada y carácter indomable con la que tuve la fortuna de casarme hace 45 años”, empezó el autor de “La casa verde” antes de que la emoción le cortase la voz.
De Syzszlo, por otra parte, contó pormenores del gran acto con el que recibirá su tierra natal a Vargas Llosa el próximo 15 de diciembre.
“Ahora que llegue le van a dar una medalla, un premio que se ha creado” especialmente para él, señaló. “La medalla la he diseñado yo, casualmente”, dijo el pintor de 85 años, que también ha trabajado en las artes plásticas y la escultura.
Entre otras cosas, De Syzszlo apoyó a Vargas Llosa cuando el literato se postuló a la presidencia de Perú en 1990, al frente de una alianza liderada por el Movimiento Libertad.
